Los Países BRICS Consideran Menos Importante el Dólar Estadounidense en el Comercio Global, Asegura un Experto Indio En un contexto global en constante cambio, los países que conforman el bloque conocido como BRICS —Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica— están empezando a redefinir su papel en la economía internacional, particularmente en lo que respecta a la utilización del dólar estadounidense en el comercio. Según un análisis realizado por un experto indio, esta tendencia podría marcar un hito en la economía mundial y alterar las dinámicas de poder económico a nivel global. Tradicionalmente, el dólar estadounidense ha sido la moneda de reserva mundial y el medio dominante para el comercio internacional. Sin embargo, en los últimos años, los BRICS han expresado su deseo de aumentar la cooperación económica entre sí y buscar alternativas al dólar. Esta evolución es vista como una respuesta a la creciente influencia de EE.
UU. en los mercados internacionales, así como a las políticas comerciales y económicas de la administración estadounidense que, en ocasiones, han causado incertidumbre en los socios comerciales. El experto indio que ha investigado esta materia, el Dr. Rohit Sharma, señala que "la dependencia excesiva del dólar ha expuesto a las economías emergentes a riesgos significativos, especialmente en un mundo donde las sanciones y las restricciones comerciales han llegado a ser moneda común". Durante su intervención en una reciente conferencia de economía en Nueva Delhi, el Dr.
Sharma enfatizó que la diversificación de monedas en el comercio internacional no solo es una estrategia viable, sino también necesaria para la estabilidad económica de los países BRICS. Con un enfoque hacia la creación de un sistema monetario más multipolar, los países BRICS han empezado a explorar opciones que les permitan realizar transacciones en sus monedas nacionales o en monedas alternativas. En el caso de India y Rusia, por ejemplo, han incrementado considerablemente el comercio bilateral utilizando el rublo y la rupia, minimizando su dependencia del dólar en transacciones comerciales. En China, el yuan ha estado ganando terreno como moneda de intercambio, facilitando el comercio en Asia y en el resto del mundo. Uno de los elementos más destacados de esta transición es la creciente adopción de tecnologías de pago digital y criptomonedas, que están ofreciendo a los países un nuevo marco para realizar transacciones de manera más eficiente y segura.
"La tecnología blockchain y las criptomonedas como Bitcoin están permitiendo a los países BRICS experimentar con nuevas formas de comercio internacional que no dependen de las infraestructuras financieras dominadas por Estados Unidos", comenta el Dr. Sharma. A esta tendencia también se une el aumento de reservas en oro por parte de muchos de estos países. En un contexto de volatilidad económica, el oro sigue siendo un activo refugio y una protección contra la inflación y las fluctuaciones del dólar. Brasil y Rusia, por ejemplo, han incrementado sus reservas de oro en un intento de diversificar sus activos y fortalecer sus economías frente a la inestabilidad del mercado internacional.
Cabe destacar que el cambio de enfoque hacia otras monedas y activos no se limita a los BRICS, sino que también está siendo observado por otros países que buscan desdolarizar sus economías. La situación geopolítica actual ha llevado a muchas naciones a considerar opciones que les permitan reducir la influencia que el dólar ejerce sobre sus economías. Esto ha generado un debate sobre la viabilidad de un sistema financiero global en el que el dólar no sea la única moneda dominante. Sin embargo, el camino hacia esta diversificación no está exento de desafíos. La existencia de un sistema financiero global construido en torno al dólar durante décadas crea resistencias a cualquier cambio significativo.
Además, la falta de sistemas de pago eficientes, así como la volatilidad asociada con algunas monedas emergentes y criptomonedas, puede dificultar este proceso. Durante la conferencia, varios representantes de los países BRICS discutiendo estas preocupaciones. El ministro de Comercio de Brasil, Paulo Guedes, subrayó que "la transición hacia un sistema menos dependiente del dólar requerirá no solo cambios en las políticas monetarias, sino también una cooperación más estrecha entre las naciones BRICS para establecer un marco de confianza". En este sentido, se están realizando esfuerzos para crear acuerdos comerciales bilaterales y multilaterales que prioricen el uso de monedas locales y reduzcan las transacciones en dólares. Otro aspecto relevante es el papel que desempeñan los organismos internacionales en este contexto.
La reforma de instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial ha sido un tema recurrente entre los países en desarrollo que buscan una representación más equitativa en la toma de decisiones. La influencia de los países BRICS en estas instituciones podría ser clave para impulsar un cambio significativo hacia un sistema monetario más diverso. Algunos analistas sugieren que este nuevo enfoque podría conducir a una mayor estabilidad en la economía global, ya que disminuiría el riesgo de que decisiones unilaterales por parte de Estados Unidos interrumpan el comercio internacional. A corto plazo, las fluctuaciones del dólar y las tensiones comerciales pueden continuar afectando a las economías, pero a largo plazo, la búsqueda de alternativas podría llevar a un equilibrio más saludable. En conclusión, el movimiento hacia la desdolarización por parte de los países BRICS representa una oportunidad para reconfigurar el comercio global y construir un futuro donde múltiples monedas y sistemas de pago coexistan.
Este cambio, facilitado por la tecnología y la cooperación entre naciones, podría marcar un camino hacia un sistema económico más equitativo y resistente. El tiempo dirá si este enfoque logra consolidarse, pero lo que es indiscutible es que el paisaje económico internacional está en transformación, una transformación en la que los BRICS están desempeñando un papel cada vez más protagónico.