En un clima político cambiante, los inversores buscan constantemente las mejores oportunidades para maximizar sus rendimientos. Con la posibilidad de un nuevo mandato presidencial de Donald Trump, muchos analistas financieros han comenzado a especular sobre qué acciones podrían beneficiarse en un entorno donde se prevé una agenda económica que mantiene ciertas políticas del pasado. En este artículo, exploraremos cinco acciones que podrían ser interesantes para los inversores en caso de que Trump regrese al poder. Desde su primera presidencia, Trump ha priorizado políticas que favorecen a las empresas, como recortes de impuestos y desregulación. Estas políticas, combinadas con un enfoque en la energía y la infraestructura, pueden ofrecer a los inversores una hoja de ruta sobre dónde colocar su dinero.
A continuación, se presentan cinco acciones que, según analistas de Kiplinger’s Personal Finance, podrían destacar en un segundo mandato de Trump. La primera acción en la lista es Caterpillar Inc. Esta empresa es sinónimo de maquinaria pesada y ha estado en el centro de los proyectos de infraestructura durante décadas. Durante la primera presidencia de Trump, Caterpillar se benefició enormemente de la promesa del presidente de invertir en el crecimiento de la infraestructura estadounidense. Dado que Trump ha reiterado su interés en mejorar el estado de las carreteras, puentes y aeropuertos, Caterpillar podría verse impulsada nuevamente por futuros contratos del gobierno.
La demanda de sus productos tiende a aumentar en momentos de gasto público en infraestructura, lo que podría llevar a un crecimiento significativo en sus ingresos. La segunda opción es Halliburton Company, una de las compañías de servicios petroleros más grandes del mundo. Bajo la administración Trump, hubo un marcado aumento en la producción de petróleo y gas, acompañado de un enfoque en la independencia energética de los Estados Unidos. Halliburton, que ofrece servicios cruciales para la exploración y producción de energía, podría beneficiarse en gran medida si el presidente Trump prioriza nuevamente el sector energético. Las políticas que promueven la producción nacional pueden hacer que la atención vuelva a enfocarse en empresas como Halliburton, que están bien posicionadas para capitalizar el aumento de actividades en el sector de la energía.
El tercer candidato en la lista es American Electric Power (AEP). En medio del cambio hacia las energías renovables, AEP ha estado buscando diversificar su portafolio energético, al tiempo que también se beneficia de las decisiones políticas que favorecen a las corporaciones. Durante la primera presidencia de Trump, aunque hubo un enfoque en la producción de combustibles fósiles, las empresas de energía renovable han seguido creciendo. Si bien Trump ha sido menos entusiasta con respecto a las políticas de cambio climático, su administración podría seguir apoyando la modernización de la red eléctrica. AEP podría beneficiarse de las inversiones en infraestructura energética y una mayor demanda de servicios eléctricos en un contexto donde se busque fomentar la producción local de energía.
La cuarta acción en la lista es Lockheed Martin Corporation, un gigante en el sector de la defensa. La administración Trump fue conocida por aumentar el gasto en defensa, un patrón que podría continuar en caso de un segundo mandato. Lockheed Martin, que fabrica una amplia gama de productos, desde aviones hasta sistemas de misiles, podría ver un aumento en los contratos gubernamentales a medida que se busca fortalecer la defensa nacional. La relación del expresidente con los militares y su política de “América Primero” han hecho que empresas del sector de defensa se beneficien significativamente de las decisiones políticas anteriores. Así, inversores atentos a las tendencias de gasto en defensa pueden encontrar a Lockheed como una opción atractiva en su portafolio.
Por último, pero no menos importante, está The Boeing Company. Al igual que Lockheed Martin, Boeing puede verse beneficiada por un aumento en la inversión en tecnología y defensa. La compañía ha enfrentado diversos desafíos en los últimos años, incluyendo problemas con la certificación de aeronaves y presiones financieras. Sin embargo, si Trump asume nuevamente el poder, podría reavivar contratos para nuevas aeronaves militares y mantener el enfoque en el desarrollo de la industria aeroespacial. Además, la recuperación del tráfico aéreo y el crecimiento de la industria de viajes podrían potenciar su negocio comercial, brindándole una oportunidad adicional para recuperarse.
El enfoque económico de Trump se ha centrado históricamente en favorecer a las corporaciones y estimular el crecimiento a través de políticas que apoyan la producción y el empleo en Estados Unidos. Sin embargo, los inversores siempre deben tener en cuenta los posibles riesgos asociados con las decisiones políticas, ya que una nueva administración también podría traer incertidumbres que afecten a las acciones. A medida que se acercan las elecciones y aumentan las especulaciones sobre un posible segundo mandato, los inversores deben considerar no solo las acciones mencionadas anteriormente, sino también su propia tolerancia al riesgo y horizonte de inversión. La diversificación en un portafolio puede ayudar a mitigar los riesgos asociados con la volatilidad política y económica. Además, es vital estar al tanto de las tendencias económicas y sectoriales que podrían influir en el rendimiento de estas acciones.