El pasado 15 de septiembre de 2024, los New Orleans Saints sorprendieron a todos en el mundo de la NFL con una victoria abrumadora sobre los Dallas Cowboys, alzándose con un marcador de 44-19. Este triunfo no solo mantuvo a los Saints en una racha invicta, sino que también se convirtió en un evento memorable gracias a una cita inspiradora del rapero Kendrick Lamar, utilizada por el entrenador en jefe Dennis Allen durante su discurso postpartido. La atmósfera en el vestuario fue eléctrica tras la victoria en el AT&T Stadium de Dallas. Allen, conocido por su estilo directo y motivador, no dudó en utilizar las palabras de Lamar de su popular tema "Not Like Us" para elevar el espíritu de su equipo. “Man, that's a hell of a win guys,” comenzó el entrenador, antes de pronunciar una frase que resonó con todos los presentes: “We played the way the Saints have to play this game.
And look, sometimes you just gotta f–king pop out and show ’em.” Estas palabras encendieron la energía del vestuario, donde los jugadores habían estado esperando con ansias un momento como este para celebrar su convincente actuación. "Not Like Us" ha sido un éxito en las listas, alcanzando el número uno en la lista Billboard Hot 100 y manteniéndose en el top 10 durante varios meses. La canción, que algunos interpretan como una respuesta a la competencia y una declaración de intenciones, se vinculó perfectamente con la mentalidad de los Saints, que llegaron a Dallas con la determinación de demostrar su valía. El impacto de la cita de Allen fue inmediato.
En cuestión de momentos, el vestuario se convirtió en un torbellino de celebraciones. Los jugadores se abrazaron, gritaron y, en un gesto de camaradería, uno de los jugadores se acercó para darse un "dap" con el entrenador, simbolizando la conexión y el respeto entre el equipo. Los fanáticos también comenzaron a comentar sobre el discurso en las redes sociales, con muchos elogiando la inclusión de Kendrick Lamar en un contexto tan inesperado. Uno de los comentarios destacados en las redes sociales vino del exjugador de la NFL, Gerald McCoy, quien twitteó: “Esto es una cita del entrenador Dennis Allen de los Saints en NUEVA ORLEANS, pero ustedes están llorando por qué eligieron a Kendrick Lamar para el Super Bowl. ¡ESTO ES POR LO QUE!” Este comentario no solo resalta la relevancia de Lamar en la cultura pop actual, sino que también refleja cómo su música ha permeado en la mentalidad de los deportistas y sus seguidores.
El running back Alvin Kamara también fue protagonista en el partido, anotando cuatro touchdowns en una actuación sobresaliente que dejó huella en el juego. Tras el partido, algunos fanáticos celebraron su desempeño llamándolo “Certified Boogeyman”, enfatizando su capacidad para dominar en situaciones críticas. La combinación del liderazgo inspirador de Allen y el espectacular juego de Kamara fue la fórmula perfecta para la victoria. El partido en sí fue un espectáculo de tácticas bien ejecutadas y una defensa impenetrable, mostrando por qué los Saints son un equipo a tener en cuenta esta temporada. Con un liderazgo claro y una sólida ejecución en el campo, los Saints lograron construir una ventaja de 35-16 al medio tiempo.
La segunda mitad se convirtió en una exhibición de control del juego, donde el equipo mantuvo su enfoque y disciplina. El enfoque de Allen en el vestuario y su habilidad para motivar a los jugadores fue sin duda un factor clave para el éxito del equipo. Esto se ve reforzado por la creciente popularidad de Kendrick Lamar, no solo como artista, sino como voz de una generación que enfrenta desafíos y busca la autenticidad en sus esfuerzos. "Not Like Us" está cargada de energía y un sentido de lucha, exactamente lo que cualquier equipo necesita tras un triunfo significativo. A medida que los Saints siguen adelante, el próximo desafío que enfrentarán es contra los Philadelphia Eagles.
Este será otro encuentro clave que podría solidificar aún más su posición en la conferencia. Con la motivación de su victoria reciente y el eco de las palabras de Kendrick Lamar en sus oídos, los jugadores se preparan para dar lo mejor de sí una vez más. La引用 del entrenador Allen no solo unió al equipo, sino que también reavivó la pasión de los aficionados. La música de Kendrick Lamar tiene un papel especial en la cultura del deporte, y su inclusión en este contexto ejemplifica cómo la música y el deporte a menudo se entrelazan para crear momentos significativos. Las referencias culturales pueden brindar una dosis extra de inspiración, algo que va más allá de lo futbolístico.
A medida que la temporada avanza, los aficionados se preguntan si Kendrick Lamar será parte del espectáculo del medio tiempo del Super Bowl LIX, que se llevará a cabo en Nueva Orleans en febrero. La posibilidad de ver a Lamar, quien ha dejado una marca indeleble en la industria musical, en un escenario tan grandioso, añade un aire de expectación a un evento que ya de por sí es monumental para la ciudad y sus aficionados. En conclusión, la cita de Kendrick Lamar en el discurso postpartido de Dennis Allen no solo encierra la esencia de un momento triunfante, sino que también resalta la interconexión entre la cultura pop y el deporte. La victoria de los Saints no solo se mide en puntos en el marcador, sino en la energía colectiva que los rodea y en cómo esa energía se traduce en acción. El impacto de las palabras de Lamar, unidas a la determinación de los Saints, puede ser un símbolo de lo que significa ser parte de un equipo que, aunque enfrenta su cuota de desafíos, siempre busca destacarse y demostrar que no son como los demás.
Sin duda, este evento será recordado como un hito en la temporada y quizás como un precursor del gran espectáculo que se avecina en el Super Bowl.