Uber Technologies, una de las compañías más innovadoras y transformadoras en el ámbito de la movilidad y la entrega a domicilio, está a punto de presentar sus resultados trimestrales. Antes del informe oficial, un analista destacado de BofA Securities, Justin Post, ha decidido elevar su pronóstico para la empresa, mostrando confianza en la capacidad de Uber para superar las expectativas del mercado. Este giro en la valoración resulta significativo para inversionistas y actores del sector tecnológico, ya que refleja no solo un desempeño financiero sólido sino también una estrategia expansiva bien fundamentada. Los números preliminares muestran que se espera que Uber alcance aproximadamente 43.5 mil millones de dólares en reservas o "bookings" para el primer trimestre, superando las expectativas de la mayoría de los analistas, que rondaban los 42.
9 mil millones. En términos de ingresos, la estimación se sitúa alrededor de 11.73 mil millones de dólares frente a los 11.62 mil millones anticipados por el consenso. Estas cifras no solo indican un aumento en la demanda y uso de la plataforma, sino también una optimización en la monetización de sus servicios.
El EBITDA – ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización – se proyecta en 1.89 mil millones de dólares, otro indicador que supera las predicciones previas. Esto sugiere que Uber está logrando una mayor eficiencia operativa y control de costos, aspectos fundamentales en un sector tan competitivo. Además, la apreciación del analista se ve reforzada por la buena performance de Instacart, la plataforma de entrega de comestibles, y un panorama estable para el segmento de entrega a domicilio en Estados Unidos. El área de movilidad, que representa el núcleo original del negocio de Uber, se anticipa que crecerá en un 21% ajustado por tipo de cambio, aunque este crecimiento muestra signos de una ligera desaceleración comparado con informes previos basados en el gasto en tránsito online.
Sin embargo, las inversiones en nuevos verticales, como Uber Teen y los vehículos autónomos, dan un impulso adicional al crecimiento diversificado que la empresa quiere consolidar a mediano y largo plazo. Es importante destacar también que ciertas señales recientes, como datos más débiles de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) sobre actividad aeroportuaria en Estados Unidos, podrían limitar de forma temporal la demanda por viajes en ciudades clave. Esto representa un desafío para un segmento en el que Uber ha mostrado un alto potencial, pero que podría verse afectado por fluctuaciones en la movilidad aérea y restricciones de viaje. El análisis de la industria de rideshare indica además una desaceleración en el precio promedio por viaje en Uber, aunque la estimación para el crecimiento del segmento de entrega se mantiene estable en 18% ajustado por tipo de cambio. En el mundo real, esto se traduce en un mercado que mantiene dinámica, pero que también enfrenta presión competitiva y sensibilidad en los precios.
Uno de los desarrollos que más entusiasma a los inversores es el segmento de "Grocery & Retail", donde Uber ha logrado cerrar acuerdos con marcas que antes mostraban resistencia a asociarse con aplicaciones de terceros para la entrega. Esta expansión es estratégica, ya que añade una nueva fuente de ingresos y diversifica la oferta de servicios, adaptándose a la creciente demanda de conveniencia y rapidez en la compra y entrega de productos. En cuanto a la innovación tecnológica que definen el futuro de Uber, la temática de vehículos autónomos tiene un rol protagónico. Waymo, la empresa hermana de Alphabet que opera vehículos autónomos, lanzó un programa exclusivo en la aplicación de Uber en Austin. En ese esquema, Uber maneja la gestión de flotas y la intermediación mientras Waymo se encarga del software de conducción y soporte en carretera.
Los primeros datos sugieren que esta alianza está funcionando bien, lo que aporta credibilidad al modelo colaborativo entre plataformas tecnológicas. Además, Uber anunció una asociación con Volkswagen para desplegar vehículos autónomos en múltiples ciudades, comenzando con Los Ángeles. El vehículo autónomo de Volkswagen, el “ID. Buzz”, entrará en fase de pruebas a finales de 2025 y se espera que comience a prestar servicios de transporte al público a través de Uber en 2026. Esta colaboración representa un hito importante, ya que es la primera vez que Uber se asocia con un fabricante de automóviles de gran escala para una producción y despliegue masivo, lo que supera alianzas anteriores más centradas en software.
Estas iniciativas no solo reflejan la visión de Uber como una plataforma tecnológica que trasciende el modelo tradicional de ridesharing, sino que también posicionan a la empresa para competir en mercados emergentes y en nuevas formas de movilidad que anticipan el futuro del transporte autónomo y sostenible. Desde el punto de vista de los inversores, las acciones de Uber experimentan un interés renovado a la luz de estas noticias y estimaciones revisadas. Mantener una calificación de compra con un precio objetivo actualizado a 96 dólares por acción refleja la confianza en que la compañía podrá capitalizar tanto su liderazgo actual como sus innovaciones estratégicas. En resumen, las perspectivas para Uber antes de publicar sus próximos resultados son positivas, con especial atención a la diversificación de sus segmentos de negocio, la consolidación de su crecimiento en movilidad y entrega, y la apuesta por tecnologías avanzadas como los vehículos autónomos. Aunque existen factores externos que podrían afectar momentáneamente la demanda – como la actividad aeroportuaria y la presión en precios – el balance general es optimista.
Uber continúa reimaginando la manera en que las personas se mueven y consumen productos, integrando nuevas oportunidades y tecnología para solidificar su posición en el mercado global. La combinación de crecimiento financiero respaldado por cifras convincentes y estrategias de innovación promete mantener la atención de los mercados y potenciar el desarrollo de la empresa en los próximos años.