La industria marítima, uno de los sectores con mayor impacto ambiental a nivel global, se enfrenta a la urgente necesidad de reducir sus emisiones contaminantes para cumplir con los ambiciosos objetivos climáticos establecidos internacionalmente. En este contexto, la empresa finlandesa Wärtsilä ha anunciado un avance tecnológico de gran relevancia: el lanzamiento comercial de su solución de captura de carbono (CCS) destinada al mercado marítimo, marcando un hito en la lucha por la descarbonización del transporte marítimo. La apuesta de Wärtsilä por la innovación se traduce en una tecnología capaz de capturar hasta un 70% de las emisiones de CO2 generadas por los motores y sistemas de escape de las embarcaciones. Este desarrollo llega en un momento crucial, en el que las regulaciones medioambientales se vuelven cada vez más estrictas, y las compañías navieras buscan alternativas eficaces que les permitan certificar operaciones más sostenibles y evitar riesgos asociados con activos que puedan quedar obsoletos ante nuevas normativas. El proyecto ha sido probado exitosamente en condiciones reales a bordo del buque Clipper Eris de la naviera Solvang ASA, un porta-etileno de 21.
000 metros cúbicos. Esta embarcación, ya equipada con tecnologías propias de reducción de emisiones como los sistemas de scrubbers para gases de escape, ha servido como plataforma ideal para implementar la solución integral CCS de Wärtsilä. La instalación abarca todos los sistemas de escape del buque, demostrando así la versatilidad y efectividad del sistema en la captura masiva de gases contaminantes. La colaboración estrecha entre Wärtsilä y Solvang ASA ha sido fundamental para el desarrollo de esta tecnología disruptiva. Solvang, siendo una empresa comprometida con la sostenibilidad y la reducción de su huella de carbono, ha aceptado con entusiasmo esta alianza estratégica para adaptar su flota profunda a las demandas futuras del mercado y la legislación.
Además, para nuevos buques en construcción, ambas compañías trabajan conjuntamente para integrar sistemas CCS compatibles desde el diseño, incluyendo la preparación para scrubbers y otras necesidades técnicas específicas. Desde una perspectiva técnica, la solución CCS de Wärtsilä se distingue por su compatibilidad con diversas fuentes de combustible fósil presentes en el sector marítimo, tales como fuelóleo pesado (HFO), metanol, gas natural licuado (GNL) y gasóleo marino (MGO). Esto permite una aplicación adaptable en flotas heterogéneas, aumentando su atractivo en un mercado global marcado por la diversidad de tecnologías y carburantes utilizados. Además de su capacidad para capturar dióxido de carbono, esta tecnología puede integrarse con otros sistemas de reducción de contaminantes ya conocidos, incluyendo filtros de partículas, reductores de óxidos de nitrógeno (NOx) y depuradores de óxidos de azufre (SOx). Esta sinergia multiplica el efecto positivo sobre la calidad ambiental, facilitando el cumplimiento integral de los estándares internacionales.
Es importante destacar que el despliegue comercial de esta tecnología responde también a una estrategia integral de Wärtsilä para impulsar la digitalización y la sostenibilidad en el sector marítimo. La compañía ofrece sistemas escalables y configurables que se ajustan tanto a instalaciones retrofitted como a nuevos proyectos, apoyados por una red global de servicios y acuerdos basados en el rendimiento que garantizan tanto la rentabilidad como la eficiencia operativa. El potencial económico trae consigo una ventaja adicional: Wärtsilä ha estimado que el costo de captura de carbono estará en un rango competitivo, entre 50 y 70 euros por tonelada métrica de CO2, cifra que incluye los costos de capital y operación. Esta perspectiva posiciona a la tecnología como una opción viable no solo desde un punto de vista ambiental sino también financiero, especialmente frente a posibles impuestos o mercados de carbono futuros. El impacto de este lanzamiento cobra mayor relevancia a la luz de los compromisos asumidos por la Organización Marítima Internacional (IMO) para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero del transporte marítimo en un 50% para 2050 con respecto a niveles de 2008.
Las soluciones como la propuesta por Wärtsilä no solo aceleran el cumplimiento de estos compromisos sino que también evitan la obsolescencia tecnológica de las flotas, que podrían enfrentarse a sanciones o limitaciones operacionales sin estas herramientas innovadoras. Desde la perspectiva de la prensa sectorial y la comunidad marítima, el anuncio ha sido recibido como un avance transformador. Håkan Agnevall, Presidente y CEO de Wärtsilä, ha enfatizado el valor disruptivo de la CCS, resaltando el interés creciente que genera en el mercado y su capacidad para mantener la competitividad de las navieras a medida que el planeta avanza hacia la neutralidad de carbono. Por su parte, Edvin Endresen, CEO de Solvang ASA, ha subrayado el compromiso de su empresa con tecnologías que promuevan operaciones marítimas sostenibles, y la satisfacción de contar con un socio experimentado para implementar la CCS en su flota. Wärtsilä no se limita a este proyecto, sino que continúa impulsando la investigación y el desarrollo, incluyendo un centro especializado en Moss, Noruega, donde se llevan a cabo pruebas de captura de hasta 10 toneladas de CO2 por día en motores marinos Wärtsilä.
Estas iniciativas demuestran la fortaleza tecnológica y la visión a largo plazo de la compañía para liderar la transición hacia un futuro más sostenible y amigable con el medio ambiente. Asimismo, el liderazgo de Wärtsilä se refleja en su amplia cartera de soluciones, que abarca desde sistemas de propulsión híbridos y soluciones digitales hasta tecnologías de tratamiento de emisiones y optimización del rendimiento, integrando todos los aspectos clave para una gestión eficiente y responsable de la operación marítima. En conclusión, la introducción comercial de la solución de captura de carbono de Wärtsilä marca un antes y un después en el sector marítimo. Al ofrecer una herramienta eficaz para reducir significativamente las emisiones de CO2, esta innovación provee una solución práctica y escalable para los desafíos actuales y futuros de la industria. La colaboración con compañías pioneras como Solvang ASA, la adaptabilidad tecnológica y la alineación con las regulaciones internacionales consolidan a Wärtsilä como un actor decisivo en la transformación hacia un transporte marítimo más limpio, eficiente y competitivo.
Para el futuro, la integración de este tipo de tecnologías se espera que se convierta en estándar, apoyando la meta global de minimizar la contaminación y mitigar el cambio climático sin sacrificar la viabilidad económica del sector marítimo. Así, Wärtsilä no solo impulsa innovación tecnológica, sino que también contribuye a preservar el equilibrio ambiental para las generaciones venideras.