En medio de un escenario turbulento que ha movilizado a la comunidad criptográfica, First Digital Labs ha publicado un informe de atestación que reafirma el respaldo total y transparente de su stablecoin FDUSD, esto a pesar de las acusaciones de fraude por un monto cercano a los $500 millones realizadas por Justin Sun, fundador de Tron. Este hecho no solo ha generado revuelo mediático sino también una batalla legal que puede marcar un precedente en el mundo de los activos digitales, especialmente en el campo de las stablecoins reguladas. El informe dado a conocer el 14 de abril de 2025 detalla que la totalidad del suministro de FDUSD, que alcanza los 2.58 mil millones de tokens, está respaldada de forma completa por activos líquidos y seguros. Entre estos activos se incluyen más de 1.
74 mil millones de dólares en bonos del Tesoro de Estados Unidos, considerados uno de los activos más confiables y seguros del mercado financiero global. Además, posee 603 millones de dólares en acuerdos de recompra (repurchase agreements) de corta duración, instrumentos financieros que garantizan liquidez y respaldo inmediato. Para complementar, First Digital Labs también informó que mantiene depósitos a plazo fijo en diversas jurisdicciones, con lo que busca diversificar y fortalecer sus reservas. Un dato relevante en esta estrategia es que todos los fondos se alojan en cuentas de tipo 'bankruptcy-remote', es decir, protegidas contra procesos de quiebra o insolvencia de la compañía, asegurando que el dinero de los usuarios nunca se mezcle con las finanzas corporativas de First Digital Trust. Pese a estas garantías y elementos de transparencia, Justin Sun ha mantenido firme su postura denunciando un presunto fraude masivo.
Según sus declaraciones públicas y evidencias presentadas ante autoridades regulatorias en Hong Kong, la empresa y sus socios —incluyendo a la compañía Aria DMCC con sede en Dubái— habrían orquestado un esquema para desviar aproximadamente medio billón de dólares de fondos pertenecientes a clientes. La acusación se centra en un cambio fraudulento de dirección para canalizar los fondos a otras cuentas, una de ellas bajo el nombre "Glass Door" ubicada en Hong Kong. El papel del fundador de Tron no se limita únicamente a las denuncias, pues ha organizado transmisiones en vivo y encuentros con reguladores para reforzar sus alegatos con supuestas pruebas documentales y testimoniales. Considera que este caso es comparable con los clásicos ataques de hacking y explotación de vulnerabilidades en carteras digitales, lo que agrava el riesgo para los inversores y la integridad del ecosistema. Por su parte, First Digital Trust ha reaccionado contundentemente rechazando las imputaciones y ha iniciado un proceso judicial por difamación en la Alta Corte de Hong Kong.
Buscan detener la difusión de las acusaciones no comprobadas y exigir rectificaciones junto con compensaciones por daños a su reputación. Esta disputa legal se desarrolla en paralelo a los esfuerzos comunicativos de la firma por mantener la confianza del mercado. El impacto de esta controversia se reflejó en la volatilidad de la cotización de FDUSD, que llegó a perder su paridad con el dólar estadounidense durante algunos días, desplomándose hasta los $0.87. Sin embargo, tras la liberación del informe de respaldo y otras acciones comunicativas de First Digital Labs, la stablecoin pudo recuperar su valor acercándose a la paridad de $0.
99 al momento de esta publicación. FDUSD, cuya emisión está a cargo de FD121 Limited y es supervisada por First Digital Trust, se ha destacado en el mundo cripto por ser una stablecoin regulada y respaldada por activos tradicionales, con presencia en diversas cadenas de bloques relevantes como Ethereum, BNB Chain, Solana y Sui. Este nivel de integración le ha permitido ganar una adopción significativa en el ecosistema DeFi y más allá. Este tipo de stablecoins que combinan regulación y transparencia buscan atender la creciente demanda de activos digitales confiables que puedan funcionar como puentes entre el sistema financiero tradicional y el mundo descentralizado. La publicación periódica de informes de atestación es una práctica esencial para demostrar que cada token en circulación está efectivamente respaldado por activos reales, lo cual es clave para mantener la confianza de usuarios, instituciones y reguladores.
Mientras avanza el litigio judicial, First Digital Trust ha reiterado su compromiso con la transparencia y ha asegurado que continuará colaborando con firmas auditoras independientes para publicar nuevas certificaciones que validen la solvencia y respaldo de FDUSD. Este esfuerzo busca disipar dudas y consolidar una imagen de fiabilidad en un entorno donde la credibilidad es fundamental. El caso suscita debates importantes sobre la seguridad, regulación y gobernanza en la emisión y custodia de stablecoins. También pone en evidencia los riesgos asociados con la centralización de tokens supuestamente descentralizados y la necesidad de contar con mecanismos que protejan a los usuarios de posibles fraudes o manejos indebidos. Las autoridades regulatorias, tanto en Hong Kong como a nivel internacional, están observando de cerca esta controversia dado que involucra sumas millonarias y actores clave del mercado digital.
La resolución de este conflicto no solo determinará el futuro de FDUSD sino que podría sentar las bases para una supervisión más rigurosa y protocolos más robustos dentro del sector. En conclusión, la publicación del informe de respaldo por parte de First Digital Labs representa un paso significativo para demostrar la legitimidad y seguridad detrás de FDUSD en una etapa crítica de cuestionamientos y acusaciones. Mientras la disputa legal prosigue, el caso mantiene en vilo a usuarios, inversionistas y especialistas, quienes esperan que prevalezca la transparencia y justicia para fortalecer el ecosistema cripto a largo plazo.