En un escenario de gran incertidumbre para los inversores en criptomonedas, los recientes acontecimientos en torno a XRP y la posibilidad de un fondo cotizado en bolsa (ETF) han generado un intenso debate y análisis. XRP, la moneda digital emitida por Ripple, había experimentado un optimismo renovado tras la solicitud de un ETF por parte de Bitwise; sin embargo, tras la decisión de la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) de apelar la decisión judicial que favoreció a Ripple, las esperanzas de los titulares de XRP se han visto significativamente empañadas. La situación comenzó a tomar forma el 30 de septiembre de 2024, cuando Bitwise, un gestor de fondos indexados, presentó una aplicación para crear un ETF de XRP en Delaware.
Esto fue seguido por la presentación oficial de la solicitud ante la SEC el 2 de octubre. La comunidad cripto había anticipado un potencial éxito para esta iniciativa, especialmente después de que la jueza Analisa Torres dictara el año pasado que XRP no se consideraba un valor en el contexto de la pelea legal entre la SEC y Ripple. Sin embargo, la emoción se desvaneció rápidamente cuando, ese mismo día, la SEC anunció su decisión de apelar el fallo a favor de Ripple, lo que agitó nuevamente el mercado. El comportamiento del precio de XRP refleja la montaña rusa emocional que han experimentado sus poseedores. El anuncio del ETF provocó un aumento significativo en la demanda por XRP, pero esta misma demanda se desplomó tras la noticia de la apelación de la SEC.
Algunos analistas han indicado que la relación entre estos eventos podría no ser tan directa como parece, dado que la fecha límite de la SEC para presentar una apelación era el 7 de octubre. Desde el ámbito analítico, voces como las de Alex Thorn, responsable de investigación de Galaxy, sostienen que la probabilidad de éxito para esta solicitud de ETF se ha reducido drásticamente tras la apelación de la SEC. En contraposición, algunos traders creen que la acción de la SEC podría ser simplemente un movimiento estratégico para mantener la atención en el asunto hasta que se realicen las elecciones presidenciales en EE. UU. Las elecciones son vistas como un “factor variable” crucial en la posibilidad de que el ETF de XRP obtenga la aprobación.
Tras la reciente autorización de un ETF de Ether, la especulación sobre qué criptomoneda podría ser la siguiente en recibir luz verde ha tomado fuerza. Algunos piensan que Solana podría ser el siguiente contendiente, aunque las complicaciones surgidas de ser mencionada como posible valor en la demanda de la SEC contra Binance han generado dudas sobre su viabilidad. Eric Balchunas, analista senior de ETFs en Bloomberg, ha señalado que el futuro del ETF de XRP estaría más estrechamente relacionado con el resultado de las próximas elecciones en EE. UU. que con los casos judiciales en cuestión.
Balchunas apuntó que si la candidata demócrata Kamala Harris gana las elecciones, la posibilidad de que el ETF de XRP sea aprobado sería prácticamente nula. Por otro lado, si el candidato republicano y aliado de las criptomonedas, Donald Trump, sale vencedor, se abrirían las posibilidades para un aluvión de solicitudes de ETFs de otras criptomonedas. Esta perspectiva se apoya en las prometedoras declaraciones de Trump respecto a reformar la SEC y reemplazar a su actual presidente, Gary Gensler, que ha sido criticado por su postura estricta hacia las criptomonedas. El analista considera que la solicitud de ETF de XRP puede ser vista como una “opción de apuesta económica” ligada a una victoria de Trump, quien podría facilitar notablemente el proceso de aprobación para productos relacionados con criptomonedas. Aun así, existe el riesgo de que, en caso de que Harris gane, los intentos por parte de XRP de recurrir al mercado de ETFs puedan caer en el olvido.
A pesar de estas dinámicas, Harris ha hecho comentarios vagos pero positivos sobre los activos digitales y la tecnología blockchain. Sergei Gorev, gerente de riesgos en Web3 YouHodler, argumenta que independientemente del resultado de las elecciones, la evolución de la industria cripto seguirá adelante. “El resultado electoral puede retrasar o acelerar la adopción de criptomonedas, pero está claro que las criptomonedas han venido para quedarse”, explica Gorev. La apelación en el caso Ripple podría extenderse hasta 2026, lo que añade otra capa de incertidumbre sobre la posibilidad de que XRP obtenga la aprobación de un ETF. Brad Garlinghouse, CEO de Ripple, ha declarado que están dispuestos a “luchar en los tribunales el tiempo que sea necesario”.
Comparado con Solana, que ha enfrentado problemas técnicos significativos, como interrupciones en su red, XRP parece tener la ventaja. Gorev señala que, mientras que los problemas de Solana podrían obstaculizar la creación de su propio ETF, XRP es percibido como un “jugador completo en la industria”, mostrando una sólida confianza en su futuro. No obstante, el interés en un ETF de XRP podría no traducirse en una afluencia significativa de nuevos inversores. La experiencia con los ETFs de Ether muestra que a pesar de la emoción que rodea a los productos innovadores, la participación de inversores ha sido bastante tibia, con una preferencia marcada por los ETFs de Bitcoin. Gorev destaca que muchos inversores tradicionales ya han asignado liquidez a Bitcoin y Ether y son reacios a deshacer sus posiciones en estos activos para inyectar capital en un potencial ETF de XRP.
En resumen, la posibilidad de que XRP obtenga un ETF se encuentra en un punto crítico, determinado tanto por la acción de la SEC como por el contexto electoral en EE. UU. La incertidumbre y la especulación crean un ambiente volátil para los titulares de XRP, quienes deben navegar en medio de decisiones regulatorias complejas y un futuro político incierto. A medida que se acercan las elecciones, las miradas del mundo cripto están puestas no solo en lo que sucederá con XRP, sino en cómo se desarrollará la narrativa más amplia sobre la regulación de las criptomonedas en EE. UU.
La evolución del mercado de ETFs en el espacio cripto continuará siendo un tema de interés, pues los inversores esperan que la claridad regulatoria comience a emerger, permitiendo un desarrollo sano y sostenible de este apasionante sector.
