Los inversores en efectivo podrían estar perdiéndose un retorno del 8%, y la razón está íntimamente relacionada con el mercado de la vivienda. A medida que las tasas de interés disminuyen en Estados Unidos y la Reserva Federal trabaja para reducir los costos de endeudamiento para los hogares y las empresas, el panorama del mercado inmobiliario comienza a cambiar. En el último año, muchos propietarios de vivienda han enfrentado tasas de interés hipotecario que superan el 7%. Sin embargo, recientes datos indican que en la última semana, las solicitudes de refinanciamiento han aumentado en un 24%. Este incremento refleja los intentos de los propietarios por reducir sus costos hipotecarios ante la bajada de tasas a niveles que no se veían hace dos años.
Es interesante observar cómo esta ola de refinanciamiento beneficia a un grupo específico de propietarios que tomaron hipotecas de 30 años durante los picos de tasas. Estos prestatarios, que ahora tienen la oportunidad de refinanciar a tasas cercanas al 6%, están en una posición favorable. A pesar de que muchos préstamos hipotecarios todavía conservan tasas más bajas, alrededor del 4% que surgieron durante la pandemia, la posibilidad de refinanciamiento para otros podría desencadenar un cambio significativo en el comportamiento de los consumidores y el mercado inmobiliario en general. Clayton Triick, jefe de gestión de carteras en Angel Oak Capital Advisors, ha destacado que, aun en un entorno donde la Reserva Federal ha indicado su intención de bajar las tasas de interés, la mayoría de las hipotecas existentes todavía pertenecen a la era de tasas bajas. Este fenómeno sugiere que los rendimientos futuros para los inversores hipotecarios podrían ser superiores a lo que se anticipaba originalmente.
Uno de los principales factores que influye en esta situación es la declaración de la Reserva Federal, cuyo presidente Jerome Powell ha manifestado que no está dispuesto a tolerar un debilitamiento significativo en el mercado laboral. Con muchas personas ya beneficiándose de tasas hipotecarias extremadamente bajas y un aumento en el precio de los hogares desde la pandemia de COVID-19, el ambiente es propicio para un mercado de tendencias al alza tanto en el sector de la vivienda como en el crédito al consumidor. Triick ha mencionado que el "put" de la Reserva Federal sigue vivo, lo que significa que hay un respaldo implícito para evitar un deterioro dramático del mercado laboral. Esto se traduce en la idea de que cualquier cambio importante en la salud del empleo podría llevar a la Reserva a actuar para estabilizar la economía. A pesar de la incertidumbre que pueda presentar el desempleo, que podría aumentar en el corto plazo, hay señales de que se anticipa un crecimiento significativo en los "second liens" y las líneas de crédito sobre el capital de la vivienda.
Esto es especialmente relevante dado el enorme capital que los propietarios han acumulado en sus viviendas en los últimos años. Triick menciona que, a pesar de la hesitación de los prestatarios en utilizar el capital de sus viviendas desde la crisis financiera global, podrían comenzar a considerar la posibilidad como una solución si enfrentan desafíos económicos. Angel Oak Capital, una firma que debutó después de la crisis del 2007-2008, se especializa en activos ligados a la vivienda, deuda del consumidor y crédito corporativo. Actualmente, administra aproximadamente 17 mil millones de dólares en activos y ha mostrado un rendimiento notable en sus fondos. Por ejemplo, su ETF de Valores Respaldados por Hipotecas Angel Oak está en camino a un retorno del 8.
7% para el año, mientras que su ETF de Ingresos ha registrado un aumento del 8.2%. Estos números resaltan cómo el ajuste en las tasas de interés puede impactar directa y favorablemente en los rendimientos de los inversores. Triick advierte que los inversores que se han aferrado al efectivo, con rendimientos del 5%, podrían enfrentarse pronto a una caída de esos rendimientos a alrededor del 4% si las tasas continúan disminuyendo. Él enfatiza que el tiempo que muchos están tardando en salir del efectivo podría resultar costoso.
El contexto del mercado también se refleja en los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años, que se situaban cerca del 3.69%, ligeramente por encima del mínimo del año. Con la bolsa de valores alcanzando niveles récord, la incertidumbre persiste, y las acciones siguen siendo una opción atractiva para muchos inversores. Es esencial para los accionistas tomar decisiones informadas en este entorno en constante cambio. Los datos indican que la tendencia hacia la vivienda y el crédito al consumidor se mantendrá fuerte en los próximos años.
A pesar de un posible aumento en la tasa de desempleo y una leve alza en los incumplimientos de pagos, los perfiles de riesgo podrían ser menos desalentadores de lo que algunos anticipan. Los que invierten en efectivo deben ser cautelosos. Aquellos que no se aventuren a diversificar su cartera y buscar alternativas de inversión en el mercado inmobiliario podrían estar dejando de lado una oportunidad valiosa. La historia ha demostrado que, en tiempos de incertidumbre, el mercado de la vivienda ha sido una de las avenidas más estables para generar retornos. A medida que el panorama del mercado inmobiliario se ajusta en respuesta a los cambios en las tasas de interés y el entorno económico, los inversores inteligentes están analizando nuevas oportunidades que antes podían parecer demasiado riesgosas.
Aunque los rendimientos del 8% pueden parecer un sueño distante para algunos, los cambios actuales en el sector de la vivienda están creando un espacio donde estos retornos son verdaderamente alcanzables. En conclusión, el mensaje es claro: los activos en efectivo pueden resultar menos atractivos en un contexto donde el mercado inmobiliario ofrece oportunidades de retorno mucho más significativo. Los inversores deben actuar con rapidez, contemplando sus posibles elecciones, y estar dispuestos a explorar el mercado de la vivienda, que parece estar a punto de revivir. A medida que las tasas continúan su trayectoria descendente, los que se preparen para hacer el cambio pueden encontrar un camino hacia la rentabilidad que no quieren dejar pasar.