Skechers, una de las marcas de calzado más reconocidas a nivel mundial, ha tomado una decisión trascendental en su trayectoria corporativa. La empresa ha acordado una adquisición por parte del fondo de inversión 3G Capital, en una operación que valora la compañía en aproximadamente 9.4 mil millones de dólares, lo que implica un precio de 63 dólares por acción en efectivo. Este acuerdo hará que Skechers deje de cotizar en la Bolsa de Nueva York tras la culminación de la compra, prevista para el tercer trimestre del año. La transacción es uno de los movimientos de privatización más relevantes en la industria de moda y ropa en los últimos años, según análisis expertos del sector.
La operación representa un cambio estratégico para Skechers, que hasta ahora había mantenido una sólida presencia en los mercados públicos. El análisis hecho por Evercore, firma que acompañó la operación, indica que 3G Capital ve en Skechers un valor sostenible y una posición fuerte para continuar su crecimiento a largo plazo, a pesar de los retos económicos y las políticas comerciales globales que han afectado a la industria durante los últimos años. La adquisición se da después de que Skechers decidiera retirar su pronóstico financiero para el 2025, debido a la incertidumbre generada por las tensiones comerciales, particularmente los aranceles impuestos durante la administración de Trump. El liderazgo de Skechers permanecerá intacto tras la compra, con Robert Greenberg continuando como presidente y CEO, acompañado por su hijo Michael Greenberg en la presidencia y David Weinberg como COO. Este hecho subraya la confianza de 3G Capital en el equipo directivo actual para guiar la empresa en esta nueva etapa privada, y refleja su intención de apostar por un crecimiento sostenible y económico en el sector calzado, que ha demostrado ser resiliente aún en tiempos difíciles.
Uno de los aspectos más interesantes de esta operación es la apuesta que realiza 3G Capital en un sector que ha enfrentado numerosos desafíos debido a políticas comerciales y aumento de costos de producción. Los analistas de Evercore, liderados por Jesalyn Wong, explican que esta compra no se basa en alguno secreto o ventaja exclusiva en la cadena de suministro, sino en la fortaleza y permanencia de Skechers como franquicia. El hecho que la compañía haya reportado resultados récord en ventas trimestrales, incrementando sus ingresos en un 7% año tras año durante el primero trimestre, agrega peso a la decisión de inversión. Históricamente, Skechers se ha distinguido por su capacidad para posicionarse entre los principales fabricantes y distribuidores de calzado a nivel mundial. Su diversidad de productos que van desde calzado deportivo hasta estilos casuales, sumado a un enfoque en innovación, confort y marketing efectivo, la ha convertido en una marca favorita de consumidores en múltiples países.
La evolución de su oferta y su presencia global han sido clave para mantener su relevancia en un mercado altamente competitivo. Por su parte, 3G Capital es conocido por su experiencia en gestionar y revitalizar grandes marcas internacionales. Actualmente es el mayor accionista de Restaurant Brands International, con marcas globales como Tim Hortons, Burger King y Popeyes bajo su gestión. Su entrada en el sector del calzado con Skechers reafirma su interés en expandir su portafolio más allá del sector alimenticio hacia marcas de consumo masivo que muestren potencial de crecimiento firme y duradero. El hecho de que Skechers salga de la cotización pública también abre la puerta para una gestión más centrada en estrategias a largo plazo, sin la presión de informes trimestrales ante inversionistas y mercados financieros.
Esto puede fomentar decisiones más audaces en cuanto a expansión, innovación tecnológica en sus productos, suplencia y optimización de costos, además de fortalecer su posicionamiento global a través de alianzas y nuevas plataformas de venta. Sin embargo, la privatización no está exenta de riesgos. La dinámica del mercado global del calzado se ha visto afectada en los últimos años por la creciente competencia, cambios en los hábitos de consumo y un entorno comercial con tarifas y restricciones que todavía generan incertidumbre. 3G Capital está apostando que estas condiciones se estabilizarán y que Skechers podrá capitalizar su marca para seguir creciendo en un mercado donde la diferenciación en diseño, sostenibilidad y experiencia del consumidor son cada vez más determinantes. El acuerdo subraya además el interés de los inversores institucionales en marcas que han mostrado capacidad de adaptación frente a adversidades, y que cuentan con una estructura sólida y liderazgo comprometido.