En un movimiento estratégico que refleja el dinamismo del mercado global de activos digitales, Hong Kong ha decidido dar un giro significativo en su regulación cripto. La Comisión de Valores y Futuros de Hong Kong (SFC) ha levantado la prohibición al staking en plataformas autorizadas, una medida que representa un claro reconocimiento de la madurez que está alcanzando el sector en esta región. Al mismo tiempo, la SFC ha fortalecido su colaboración internacional con los reguladores de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), con el objetivo de crear un marco regulatorio más sólido y armonizado que facilite la supervisión y desarrollo del ecosistema cripto en ambos territorios. Esta iniciativa forma parte de un diseño estratégico más amplio de Hong Kong para consolidar su estatus como centro líder en finanzas digitales con regulación avanzada. La flexibilización del staking y el impulso a la cooperación transfronteriza se presentan como piezas clave dentro de la política de innovación financiera y gobernanza digital que la ciudad está promoviendo.
El levantamiento de la prohibición de staking autorizada por la SFC responde a una evolución regulatoria que busca equilibrar la oportunidad de crecimiento del mercado cripto con la protección efectiva de los inversionistas. Desde mediados de 2023, el staking estaba vetado en plataformas reguladas, lo que limitaba la oferta de servicios dentro del entorno al por menor y a inversionistas institucionales. Sin embargo, la creciente demanda de estos productos, junto con los avances tecnológicos y mejores prácticas en seguridad, han motivado a la SFC a revisar su posición y abrir la puerta a un desarrollo controlado y supervisado. Las nuevas pautas establecen que solo las plataformas de activos virtuales con licencia pueden ofrecer servicios de staking, y deben mantener un control total sobre los activos apostados por los clientes, prohibiendo la administración a través de custodios terceros no autorizados. Además, se exige transparencia rigurosa con respecto a los términos del servicio, tales como periodos de bloqueo, tasas aplicables y riesgos asociados.
Entre estos riesgos se incluyen posibles sanciones por parte de validadores, vulnerabilidades de seguridad y errores al nivel del protocolo blockchain. Adicionalmente, las plataformas que permiten staking mediante terceros deben realizar una exhaustiva diligencia debida y supervisión constante para garantizar la seguridad y cumplimiento normativo. En el caso específico de fondos virtuales autorizados por la SFC, el staking solo se permite con plataformas licenciadas y custodios aprobados, además de requerirse aprobaciones regulatorias previas y establecer límites de exposición financiera. Este marco normativo permite a Hong Kong ofrecer a los inversores una vía para participar en el creciente mercado de staking, mientras mitiga los riesgos inherentes a esta práctica. El staking, que consiste en inmovilizar activos digitales para apoyar la operatividad y seguridad de una red blockchain a cambio de recompensas, ha ganado auge como una alternativa de inversión dentro del ecosistema DeFi (finanzas descentralizadas).
Al normar este proceso de manera clara y estricta, Hong Kong impulsa la confianza hacia las plataformas que operan localmente y atrae capital institucional. Por otra parte, la visita reciente de la delegación de la SFC a los Emiratos Árabes Unidos evidencia la apuesta de Hong Kong por intensificar la cooperación internacional en materia de supervisión y regulación de activos virtuales. Durante las reuniones en Abu Dhabi y Dubái, el equipo encabezado por el Director Ejecutivo Christopher Yip y la jefa de fintech Elizabeth Wong intercambió perspectivas con representantes de entidades claves como la Autoridad de Valores y Mercancías (Securities and Commodities Authority), la Autoridad de Servicios Financieros Reguladores (Financial Services Regulatory Authority) y la Autoridad de Servicios Financieros de Dubái (Dubai Financial Services Authority). Estos encuentros se centraron en compartir experiencias, modelos regulatorios y desafíos comunes en el monitoreo y supervisión de empresas relacionadas con activos digitales. El diálogo forma parte del programa ASPIRe de la SFC, que tiene como objetivo establecer un marco acorde a las tendencias globales para el desarrollo de activos digitales y fintech.
En conversaciones adicionales con compañías de Web3, se destacó la importancia de contar con regulaciones claras y consistentes que reduzcan los riesgos sistémicos y fomenten la innovación responsable. Christopher Yip afirmó que la SFC continuará liderando los esfuerzos regulatorios en materia de activos virtuales, con énfasis en la colaboración internacional y el desarrollo de políticas que promuevan la innovación financiera ante los desafíos emergentes. El fortalecimiento de las relaciones con los EAU no solo amplía la red de aliados estratégicos de Hong Kong, sino que también facilita la creación de estándares comunes y mecanismos coordinados para supervisar un mercado que trasciende fronteras. Este avance cobra relevancia en un contexto donde más jurisdicciones están introduciendo marcos regulatorios formales que pueden convertirse en factores competitivos para atraer negocios y capital relacionados con cripto. Hong Kong, gracias a su compromiso con la regulación rigurosa y la cooperación global, se posiciona como un segundo centro más amigable al ecosistema cripto, según el Reporte Cripto 2025, lo que fortalece su atractivo para inversionistas e instituciones que buscan operar bajo un entorno confiable y transparente.
La decisión de permitir staking bajo regulaciones estrictas contribuye a que los actores dentro del mercado puedan ofrecer productos más diversificados mientras se asegura que los riesgos para los usuarios se minimicen mediante mecanismos como la divulgación completa de información y controles internos robustos. Esto también impulsa la proliferación de proyectos y plataformas basadas en tecnologías Web3, que requieren marcos claros para fomentar su adopción y escalabilidad. Asimismo, la alianza regulatoria con los EAU abre puertas a una sinergia que combina la experiencia y estándares de dos centros financieros globales. Mientras Hong Kong destaca por su fuerte tradición en mercados de capitales y fintech, los Emiratos Árabes Unidos ofrecen un enfoque innovador en la adopción de tecnologías disruptivas dentro de un ambiente compatible con las demandas internacionales. Esta cooperación facilitará también la integración de nuevas soluciones financieras digitales y permitirá a ambas regiones mantener una vigilancia conjunta frente a posibles riesgos asociados al fraude, lavado de dinero u operaciones ilícitas.
Finalmente, el nuevo marco y el impulso diplomático evidencian que Hong Kong está decidido a permanecer a la vanguardia del ecosistema cripto mundial, promoviendo un equilibrio adecuado entre la innovación y la protección del usuario. La combinación de una regulación flexible pero estricta, junto con la alineación global, será clave para la futura prosperidad de la ciudad como un nodo esencial dentro de la economía digital global. En resumen, la SFC no solo ha levantado la prohibición al staking con medidas que protegen a los inversores y el mercado, sino que también ha fortalecido vínculos internacionales cruciales que reforzarán la supervisión y crecimiento del ecosistema cripto en Hong Kong y más allá. Estas acciones colocan a la ciudad en una posición privilegiada para capitalizar las oportunidades que trae la transformación digital financiera a nivel mundial.