El sector del transporte aéreo de carga se encuentra en un momento crítico debido a la reciente eliminación de la exención conocida como 'de minimis' para envíos de bajo valor desde China y Hong Kong hacia Estados Unidos. Esta medida, que entró en vigor a principios de mayo de 2025, está generando un impacto significativo en el flujo de comercio electrónico y en la administración de la capacidad aérea, provocando lo que muchos califican como una turbulencia sin precedentes en la industria. La exención 'de minimis' permitía anteriormente que ciertos envíos de bajo valor fueran liberados de pagar aranceles o tarifas aduaneras al ingresar a Estados Unidos. Esta regla facilitaba un volumen considerable de comercio electrónico, especialmente con productos manufacturados y vendidos en pequeñas cantidades. Su eliminación significa que todos los envíos, sin importar su valor, están ahora sujetos a controles aduaneros más estrictos y a posibles aranceles, lo que repercute directamente en los costos y en la eficiencia logística.
Una de las primeras consecuencias ha sido un descenso notable en la demanda de capacidad aérea para envíos provenientes de China y Hong Kong. Las aerolíneas y operadores de carga están ajustando sus vuelos, cancelando rutas o redirigiendo aviones a otros destinos donde la demanda se mantenga más estable. Esto complica la planificación de la capacidad y provoca un efecto dominó que afecta a todo el sistema global de transporte aéreo de mercancías. Expertos en la materia, como Niall van de Wouw de Xeneta, advierten que la industria debe prepararse para un desorden logístico significativo durante los próximos meses, con impactos que probablemente se reflejarán en las estadísticas de mayo y más allá. La incertidumbre en la oferta y la demanda puede ocasionar dificultades para equilibrar la capacidad de los vuelos con el volumen real de carga, elevando potencialmente los costos para todos los actores involucrados, desde exportadores e importadores hasta consumidores finales.
En el contexto global, la eliminación de la exención 'de minimis' también llega en un momento en que el comercio internacional enfrenta múltiples desafíos. Las políticas arancelarias de Estados Unidos, bajo la administración previa, intensificaron las tensiones comerciales, con aumentos en tarifas que impactaron especialmente al comercio con Asia. Aunque algunas medidas arancelarias fueron suspendidas temporalmente, otras, como las dirigidas a China, se mantienen vigentes con incrementos que han impulsado envíos acelerados antes de su aplicación, provocando un aumento repentino en las tarifas aéreas. El resultado ha sido un aumento en las tarifas al por mayor para el transporte aéreo de carga entre Asia y Norteamérica. Datos recientes muestran incrementos mensuales significativos en las tarifas spot, con subidas del 13% y 10% en rutas desde el sudeste y noreste asiático hacia Norteamérica.
Estos incrementos reflejan la presión adicional en la capacidad aeroportuaria y los costos operativos derivados de esta situación. Este encarecimiento del transporte aéreo también afecta a los exportadores estadounidenses que envían productos a China y Hong Kong, con un alza del 14% en las tarifas de la ruta inversa. La dinámica crea un ambiente de cambio constante en las tarifas logísticas, complicando la planificación de costos para empresas y afectando la competitividad comercial. El mercado global del transporte aéreo de carga experimentó un crecimiento del 4% en el volumen mundial año tras año, pero este avance se ha visto frenado por las nuevas normativas y tensiones comerciales. El factor de carga dinámico global, que mide el volumen y peso de la carga transportada junto con la capacidad disponible, se mantiene en alrededor del 57%, reflejando una presión constante en capacidad que puede limitar el crecimiento o generar cuellos de botella en la cadena de suministro.
La eliminación de la exención 'de minimis' también tiene implicaciones importantes para el comercio electrónico, sector que depende en gran medida de envíos rápidos y a bajo costo de pequeños paquetes. La obligación de pagar aranceles y gestionar trámites adicionales para todos los envíos, sin importar su valor, podría desalentar a consumidores y vendedores, afectando las ventas transfronterizas y modificando los patrones tradicionales de compra y venta. Esta transformación del entorno operativo obliga a las empresas a reconsiderar sus estrategias de logística y distribución. Algunas podrían optar por trasladar parte de sus operaciones a otros mercados o ajustar sus estructuras de costos para absorber el impacto. Mientras tanto, los transportistas y operadores de carga aérea deberán adaptarse a un panorama más complejo, gestionando con mayor precisión su capacidad y enfocándose en rutas más rentables.
Además, el aumento en la complejidad aduanera pone de manifiesto la necesidad de una mayor digitalización y automatización en los procesos de despacho, para minimizar retrasos y reducir errores que pueden incrementar el tiempo y costo del transporte. La modernización de los sistemas logísticos será clave para mitigar los efectos negativos de esta medida y garantizar la continuidad en las cadenas de suministro globales. Aunque la eliminación de la exención 'de minimis' puede representar un golpe duro al sector en el corto plazo, también podría incentivar la formalización y regulación de los flujos comerciales, disminuyendo prácticas informales y promoviendo un comercio más transparente. En este escenario, las autoridades y actores sectoriales tienen la oportunidad de colaborar para desarrollar soluciones conjuntas que apoyen la adaptación del sector aéreo y comercial a las nuevas condiciones. Finalmente, la evolución del transporte aéreo de carga en el segundo semestre de 2025 estará marcada por la capacidad de la industria para gestionar esta transición inesperada.
El equilibrio entre oferta y demanda, la fluctuación de tarifas y la respuesta logística a las nuevas obligaciones serán determinantes para evitar una crisis prolongada y garantizar la fluidez del comercio global en un mundo cada vez más interconectado. En conclusión, el fin de la exención 'de minimis' para envíos entre Asia y Estados Unidos ha desencadenado una etapa de turbulencia en el transporte aéreo de carga que obliga a una renovación de estrategias en todos los niveles del comercio internacional. Los actores involucrados deberán adaptarse rápidamente para enfrentar un entorno de mayor regulación, costos y complejidad logística, estimulando así innovaciones y ajustes imprescindibles para mantener la competitividad y eficiencia en un mercado global en constante cambio.