Citi realiza cambios en su liderazgo tras multas de 136 millones de dólares por problemas de calidad de datos El gigante bancario Citigroup, conocido comúnmente como Citi, se enfrenta a una crisis de reputación y confianza después de recibir una multa de 136 millones de dólares en julio debido a problemas persistentes de calidad de datos. Esta situación ha llevado a la entidad a realizar una restructuración importante en su liderazgo, enfocándose en mejorar la gestión de datos, un aspecto crítico que ha sido objeto de controversia y una creciente presión regulatoria. La reciente sanción se suma a otro duro golpe que Citi enfrentó casi cuatro años atrás, cuando la entidad fue multada con 400 millones de dólares por deficiencias en el manejo de datos y controles de riesgo. Los reguladores han expresado su frustración ante la incapacidad del banco para solucionar estos problemas de manera efectiva y rápida, lo que ha resultado en un cambio significativo en su estructura organizativa. En un intento por revertir esta situación, Citi ha decidido poner al frente de sus esfuerzos en la gestión de datos a Tim Ryan, quien ocupa el cargo de nuevo jefe de tecnología.
Según un memorando filtrado a los medios, Ryan ahora dirigirá el programa de datos en estrecha colaboración con Anand Selva, el director de operaciones de la entidad. Esta reestructuración tiene como objetivo centralizar y agilizar las iniciativas relacionadas con la calidad de los datos y asegurar que el banco cumpla con las exigencias reguladoras. En el comunicado emitido por Ryan y Selva, se señaló que "en los últimos meses, hemos dejado claro que nuestros esfuerzos en datos han crecido significativamente desde nuestro plan original a medida que hemos avanzado en el trabajo". Asimismo, el memo destaca la necesidad de acelerar el progreso en esta área y el compromiso del banco de dedicar recursos adicionales para lograr una transformación efectiva. Desde 2021, Citi ha dividido su enfoque en un ambicioso programa de transformación que ha elevado el personal involucrado de 3,000 a 12,000 empleados.
Este esfuerzo ha requerido inversiones masivas, ascendiendo a al menos 7.4 mil millones de dólares entre 2021 y 2023. La presión para rectificar los fallos en el manejo de datos es palpable y la entidad espera que la incorporación de nuevas figuras clave ayude a encaminar los esfuerzos en esta dirección. Tim Ryan, que se unió a Citi en junio pasado procedente de PricewaterhouseCoopers, tiene una vasta experiencia en implementar proyectos tecnológicos de gran escala. Anteriormente, funcionó como líder del negocio estadounidense de PwC y estaba en condiciones de convertirse en presidente global de la firma antes de decidir retirarse.
Su llegada a Citi se enmarca dentro de un esfuerzo por modernizar la tecnología del banco, que ha sido criticada por sus sistemas obsoletos y poco integrados. Un incidente notable que evidenció la carencia en la eficiencia de los sistemas de Citi fue la transferencia accidental de 900 millones de dólares a prestamistas de Revlon, un error que dejó al descubierto las vulnerabilidades en la gestión de datos del banco. El nuevo liderazgo en el área de datos también incluye a Ashutosh Nawani, quien asumirá el cargo de nuevo responsable de la Oficina de Datos del Banco. Nawani, que anteriormente lideró la gestión de riesgos empresariales en Citi, reportará directamente a Ryan y se esforzará por coordinar los esfuerzos relacionados con la transformación de datos, aportando su experiencia en el sector tras haber sido socio de PwC en Londres, donde dirigió la práctica de asesoría en riesgos financieros. A medida que se realizan estos cambios, Citigroup parece decidido a fortalecer su posición en el mercado y restaurar la confianza de sus clientes y reguladores.
Sin embargo, la monumental tarea que tienen por delante no debe subestimarse. La ineficiencia en el manejo de datos ha afectado a la reputación del banco, y se espera que la nueva dirección traiga consigo un enfoque renovado para enfrentar esta problemática. Por otro lado, el actual director de datos de la entidad, Japón Mehta, será reubicado en un nuevo rol cuya naturaleza aún no ha sido especificada. Esta decisión es parte del cambio de enfoque del banco y refleja la intención de construir un equipo más sólido en el marco de las iniciativas vinculadas a la calidad de datos y su gestión. El historial de Selva como COO ha estado marcado por desafíos.
Con una larga trayectoria profesional en Citi que data de 1991, Selva ha visto ascensos notables dentro del banco, llegando a asumir el cargo de COO en marzo de 2023. Sin embargo, su gestión ha estado envuelta en controversia, especialmente luego de que una exejecutiva del programa de transformación, Kathleen Martin, presentara una demanda en su contra. Según la demanda, Selva presionó a Martin para que ocultara información que podría perjudicar a Citi ante el OCC (Oficina del Contralor de la Moneda). Selva ha negado las acusaciones, alegando que Martin fue despedida por bajo rendimiento. La presión sobre Citi para cumplir con los estándares regulatorios y mejorar su calidad de datos es indiscutible.
Con los nuevos líderes a bordo, la entidad espera no solo mitigar el daño causado por las sanciones financieras, sino también trazar un camino hacia un futuro más estable, donde la gestión de datos se convierta en una competencia central. Las medidas adoptadas reflejan un compromiso con la mejora continua, que será crucial para que Citi pueda navegar por el complejo entorno regulatorio que enfrenta en la actualidad. A través de la implementación de una cultura de responsabilidad en gestión de datos y la adopción de tecnologías modernas, Citi tiene la oportunidad de redefinir su enfoque y demostrar que puede ser un líder en el sector bancario. Los próximos meses será crucial, no solo para observar cómo se integran estos nuevos líderes, sino también para evaluar si las promesas de cambio se traducirán en acciones concretas que restauren la fe de clientes y reguladores en una de las instituciones bancarias más grandes del mundo.