En el vertiginoso mundo de las finanzas, 2024 se perfila como un año de transformación clave. Gracias a la rápida evolución de la tecnología y la creciente demanda de un servicio al cliente más personalizado, el sector bancario se enfrenta a desafíos y oportunidades sin precedentes. En este contexto, American Banker ha reconocido a 24 personas influyentes que están preparadas para alterar el panorama bancario. A continuación, exploraremos a algunas de estas figuras clave y cómo sus innovaciones y enfoques están configurando el futuro de la banca. Uno de los nombres que destaca en esta lista es el de Mariana Mazzucato, conocida por sus ideas radicales sobre el papel del Estado en la economía.
Como economista, Mazzucato aboga por un modelo de banca que no solo tenga en cuenta la rentabilidad, sino que también se centre en el bienestar social. Su enfoque sugiere que los bancos, en lugar de ser meros intermediarios financieros, deberían participar activamente en el financiamiento de proyectos que beneficien a la sociedad, como las energías renovables y la infraestructura sostenible. En 2024, sus enseñanzas serán vitales para instituciones que buscan un lugar en la economía del futuro. Otro rostro prominente es el de David Vélez, CEO de Nubank. Esta fintech brasileña ha revolucionado la forma en que las personas en América Latina interactúan con sus finanzas.
Con una app sencilla y un enfoque en la accesibilidad, Nubank ha logrado atraer a millones de clientes que antes estaban excluidos de los servicios bancarios tradicionales. Su modelo de negocio, centrado en eliminar tarifas ocultas y promover la transparencia, establece un estándar que otros bancos deben seguir en un entorno donde los consumidores son cada vez más exigentes. Por otro lado, Jessica Jackley, cofundadora de Kiva, ha sido una pionera en la financiación colectiva. Kiva permite a las personas prestar dinero a emprendedores en todo el mundo, impactando no solo en el ámbito financiero sino también en el social. Su enfoque innovador fomenta no solo la inclusión financiera, sino también una economía más justa y equitativa.
Este modelo será clave en 2024, a medida que los bancos busquen formas efectivas de colaborar con la comunidad y apoyar proyectos de desarrollo. Adicionalmente, la inteligencia artificial y la analítica de datos están transformando la industria bancaria. Una de las figuras destacadas en este ámbito es Ritu Anand, responsable de diversidad e inclusión en Tata Consultancy Services. Ella enfatiza la importancia de utilizar la inteligencia artificial de manera responsable, asegurando que los algoritmos no perpetúen sesgos y que se respete la privacidad del cliente. En un año en el que la confianza en las instituciones financieras es más crucial que nunca, su trabajo será fundamental para construir una banca más ética y responsable.
No podemos olvidar a los líderes corporativos en el ámbito de los bancos tradicionales. Jane Fraser, CEO de Citigroup, está comprometida con una transformación digital profunda dentro de su banco. Fraser ha liderado esfuerzos significativos para reducir costos y mejorar la eficiencia operativa, mientras promueve la diversidad y la inclusión en el lugar de trabajo. Su visión audaz para Citigroup no solo se centra en la rentabilidad, sino en el establecimiento de una cultura bancaria más sostenible en el siglo XXI. En el capítulo de la sostenibilidad, Abdallah Wafa, director de sostenibilidad en Mizuho Financial Group, está a la vanguardia de la integración de criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en el proceso de toma de decisiones.
Wafa aboga por prácticas que no solo generan rendimientos para los accionistas, sino que también contribuyen al bienestar del planeta. A medida que más bancos buscan alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, su influencia será esencial. Además, el papel de la banca comunitaria no puede ser pasado por alto. Mark Pinsky, CEO de la Asociación de Bancos Comunitarios, trabaja arduamente para abogar por las necesidades de estas instituciones que sirven a comunidades a menudo desatendidas. Con la creciente presión sobre los bancos para que se enfoquen en las necesidades de la comunidad, la voz de Pinsky será clave en 2024 al defender políticas que apoyen a la banca comunitaria y su papel en el desarrollo local.
En el ámbito de las criptomonedas y blockchain, hay personalidades como Elizabeth Stark, cofundadora de Lightning Labs, que están revolucionando la forma en que se realizan las transacciones digitales. Su trabajo en el desarrollo de soluciones de escalabilidad para Bitcoin está ayudando a mejorar la eficiencia y la seguridad de las operaciones. A medida que más bancos consideran adoptar criptomonedas, la experiencia de Stark será vital para guiar esta transición. Otra figura clave es Chris Britt, CEO de Emburse, una plataforma de gestión de gastos. Su enfoque en la automatización del proceso de gastos promete enviar una ola de eficiencia a la banca empresarial en 2024.
A medida que las empresas buscan optimizar sus operaciones, soluciones como las que ofrece Britt serán esenciales para mantener la competitividad en un mercado cada vez más globalizado. Por último, pero no menos importante, está la innovadora emprendedora fintech, Soledad Betancur. A través de su empresa, ha ayudado a emprendedores a acceder a financiamiento de forma más ágil y accesible, rompiendo los moldes tradicionales de la banca. Su enfoque centrado en el cliente y el uso de tecnologías emergentes como el aprendizaje automático están remodelando la forma en que se consideran los préstamos y la financiación. Cada una de estas 24 personas no solo representa una nueva ola de liderazgo, sino que también simbolizan el cambio hacia un modelo bancario más inclusivo, sostenible y centrado en el cliente.
Las innovaciones que están promoviendo cambiarán radicalmente la forma en que se gestionan las finanzas y se crea valor en la economía. Con el desarrollo tecnológico y una mayor conciencia social, el sector bancario está preparado para una profunda transformación en 2024. Con ellos a la cabeza, podemos esperar un año emocionante en el que la banca no solo se adaptará a los cambios, sino que los liderará.