En los últimos años, el mercado de criptomonedas ha atraído la atención de miles de inversores en India, pero lo que se presenta como una oportunidad para enriquecerse rápidamente a menudo se ha convertido en una trampa mortal para muchos. Un informe reciente revela que más de 12 estafas de criptomonedas han causado pérdidas que superan los 72,000 crore de rupias, dejando a innumerables víctimas sin respuestas ni justicia. A pesar de las investigaciones en curso, los esfuerzos de las autoridades indias para desmantelar estas estafas han fracasado rotundamente. La historia de las estafas de criptomonedas en India comenzó a hacerse eco con la llegada de GainBitcoin, una de las más grandes y audaces estafas, donde miles de inversores fueron atraídos por la promesa de rendimientos mensuales del 10% en contratos de minería de Bitcoin. Su fundador, Amit Bhardwaj, un ex-empleado de Infosys, utilizó tácticas de marketing agresivas y prometió riquezas rápidas a los incautos.
Sin embargo, lo que se suponía que era un negocio legítimo se convirtió en un esquema Ponzi, donde los fondos de nuevos inversores se utilizaban para pagar a los anteriores, manteniendo así la farsa. GainBitcoin no fue un caso aislado. Otros fraudes como Bitconnect, Morris Coin y Ether Trade Asia han seguido un patrón similar. Bitconnect, un esquema que prometía un retorno del 1% diario, atrajo a inversores de todo el mundo, acumulando pérdidas de hasta 41,000 crore de rupias solo en India. A pesar de los indicios claros de fraude, muchos inversores, incluyendo figuras influyentes como funcionarios gubernamentales, optaron por no presentar quejas, dejando a los estafadores en libertad.
Uno de los aspectos más alarmantes de estas estafas es el perfil de los estafadores. Muchos de ellos son reincidentes reconocidos en el ámbito de las criptomonedas. Ranjeet Saxena y Divyesh Darji, por ejemplo, son mencionados en múltiples esquemas fraudulentos. Darji, el cerebro detrás del modelo de negocio de Bitconnect en Asia, también fue implicado en otras aventuras fraudulentas. La repetición de estas actividades delictivas pone de manifiesto la falta de un sistema judicial y regulatorio eficaz que pueda actuar rápidamente y detener a estos criminales.
La situación se agrava aún más por la ineficacia de las investigaciones llevadas a cabo por las agencias de seguridad. El proceso investigativo es notoriamente lento y enredado, lo que permite a los importantes acusados seguir en libertad luego de recibir fianzas, mientras las víctimas quedan sin justicia. En el caso de GainBitcoin, más de 33 denuncias han sido registradas en diversos estados indios, y a pesar de las investigaciones por parte de múltiples departamentos de policía, el caso sigue abierto sin resultados concretos. Otra de las razones por las cuales las investigaciones han fracasado es la naturaleza compleja y técnica de las criptomonedas y los sistemas que las sustentan. Las autoridades indias, como la Oficina de Investigación de Delitos Económicos (EOW) y la Dirección de Ejecución (ED), carecen de la formación y recursos necesarios para manejar estas nuevas tecnologías adecuadamente.
Esto ha llevado a que muchos funcionarios no puedan desentrañar los entresijos de cómo operan las estafas, lo que se traduce en una falta de eficacia en la persecución de los delincuentes. Adicionalmente, la proliferación de estos criptoesquemas se ha visto facilitada por un entorno regulatorio inadecuado. India, al ser un país con una vasta población que busca inversiones rápidas, se ha convertido en un terreno fértil para estos operadores fraudulentos. La falta de una entidad reguladora que supervise y regule las criptomonedas ha dejado a los inversores vulnerables a este tipo de delito financiero. Sin un sistema que ofrezca la debida diligencia sobre las iniciativas de criptomoneda, los estafadores pueden operar con impunidad.
A pesar de la creciente concienciación sobre los riesgos que conllevan las inversiones en criptomonedas, la gente aún cae en el juego de la avaricia. En un reciente viaje a Mumbai, un conductor de taxi intentó convencer a un periodista sobre las "inversiones seguras" en criptomonedas mientras alardeaba sobre la compra de un lujoso apartamento. Su falta de comprensión sobre el funcionamiento de las criptomonedas y los riesgos legales también es un reflejo de la mentalidad del inversionista promedio. La combinación de la ignorancia y las promesas de altos rendimientos sigue convirtiendo a muchos en víctimas. Además, los datos son alarmantes.
Según un informe de la Autoridad de Protección e Inversión de Inversores, más de 10 millones de indios han sido estafados en esquemas Ponzi relacionados con criptomonedas, con una media de pérdida de aproximadamente 15.27 lakh de rupias por víctima. Esta realidad desconsoladora no solo cuestiona la integridad del mercado de criptomonedas en India, sino que también afecta su futuro. El panorama actual sugiere que la resolución y el cierre de las investigaciones actuales es poco probable. A medida que las estafas continúan evolucionando y nuevos nombres surgen en la industria, la situacion se complica aún más.