Binance, la plataforma de intercambio de criptomonedas más grande del mundo, ha decidido revivir su intento de obtener un permiso para ofrecer servicios de criptomonedas en Singapur, a pesar de la creciente presión y el escrutinio por parte de reguladores en Estados Unidos. Esta decisión representa un movimiento estratégico significativo en un momento en que la industria de criptomonedas enfrenta desafíos regulatorios tanto a nivel local como internacional. La compañía ha cambiado su enfoque desde los clientes minoristas hacia el segmento de clientes corporativos. Según ejecutivos de Binance, su brazo de custodia, conocido como Ceffu, se está preparando para aplicar para un permiso que le permita ofrecer servicios de custodia a corporaciones con operaciones en el principal centro financiero de Asia. Parece que Binance ha tomado esta decisión después de cerrar temporalmente su plataforma para clientes minoristas en 2021, en medio de estrictas restricciones impuestas por la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS).
A finales de noviembre, Binance relanzó su negocio para clientes corporativos bajo la nueva marca Ceffu. Esta unidad está diseñada para atender a inversores profesionales que buscan servicios de custodia y otros servicios relacionados con activos digitales. La decisión de pivotar hacia los clientes institucionales refleja un cambio en la estrategia de Binance, buscando adaptarse a un entorno regulatorio que ha mostrado ser cada vez más riguroso. Jarek Jakubcek, quien lidera la formación de cumplimiento legal en Binance, comentó que la empresa ha estado aumentando sus capacidades para satisfacer las exigencias regulatorias. Ha enfatizado que la compañía está contratando personas con experiencia en cumplimiento normativo y ejecución de la ley para fortalecer su posición.
Este enfoque proactivo podría ser un intento de demostrar a los reguladores de Singapur que Binance está comprometido a operar de manera responsable y dentro de los límites de la ley. Singapur ha sido un bastión para la innovación financiera en Asia, con una reputación bien establecida en cuanto a gobierno corporativo y un marco regulatorio sólido. La atracción de Binance hacia este entorno no es accidental. Athena Yu, vicepresidenta de Ceffu, subrayó que Singapur es un lugar atractivo para los inversores institucionales debido a su infraestructura y regulaciones que fomentan un ecosistema financiero saludable. Sin embargo, el camino hacia la obtención de un permiso en Singapur no está exento de obstáculos.
A medida que Binance intenta establecer su presencia, se enfrenta a un panorama regulatorio en evolución. Después de que la MAS ordenara a Binance cesar su actividad con inversores minoristas en 2021, la plataforma ha sido objeto de investigaciones por parte de las autoridades de delitos financieros del país. Esta vigilancia ha elevado la presión sobre la plataforma para que cumpla con las normas locales. El contexto regulatorio en Estados Unidos también ha influido en la estrategia de Binance. Recientemente, las autoridades estadounidenses se opusieron a la propuesta de Binance US, una entidad separada creada para operar en el mercado estadounidense, para adquirir los activos de un prestamista de criptomonedas en quiebra.
La preocupación de que este plan pueda violar las leyes de valores locales destaca el desafío que enfrenta Binance no solo en Singapur, sino también en su mercado de origen. A pesar de estos desafíos, Binance parece decidido a avanzar. La firma ha estado trabajando para establecer relaciones con reguladores en todo el mundo, incluida Singapur, al tiempo que se adapta a las exigencias que estos imponen. La MAS también está buscando nuevas formas de proteger a los consumidores en el espacio de criptomonedas, lo que podría resultar en nuevas regulaciones que afecten a empresas como Binance. El marco regulatorio propuesto contempla restricciones significativas, como la prohibición de que las empresas presten monedas digitales poseídas por los clientes minoristas y la necesidad de mantener los activos de los clientes separados de los de la compañía.
Además, se podría prohibir el uso de líneas de crédito para financiar compras de criptomonedas y exigir que las firmas lleven a cabo evaluaciones de idoneidad para los inversores minoristas antes de permitirles operar con tokens virtuales. Estas propuestas podrían impactar negativamente en la actividad de Binance en el futuro. Las distintas empresas de criptomonedas, incluidas Binance, han expresado su preocupación por los costos de cumplimiento cada vez más altos que estas regulaciones pueden imponer. Jakubcek de Binance advirtió que la inversión en cumplimiento puede ser considerable, lo que representa un obstáculo para las empresas más pequeñas con recursos limitados. La implementación de medidas rigurosas puede parecer necesaria para proteger a los consumidores, pero también plantea preguntas sobre la viabilidad de ciertas empresas en el mercado.
Mientras tanto, la MAS está revisando las opiniones de las partes interesadas sobre su propuesta de regulaciones y planea publicar su respuesta en los próximos meses. Observadores del sector estiman que podría tomar tiempo antes de que se implementen nuevas reglas en el marco regulatorio de Singapur, que ya es conocido por su estricta supervisión del comercio de criptomonedas. En este complicado contexto, Binance está haciendo todo lo posible para asegurar que su nueva unidad de custodia no solo obtenga el permiso necesario, sino que también pueda operar con éxito dentro del marco regulatorio. La compañíaá parece decidida a mantener una presencia operativa en Singapur, incluso en un ambiente donde los operadores de criptomonedas enfrentan una mayor presión por parte de los reguladores. A pesar de los desafíos, la elección de Singapur para establecer operaciones de negocios institucionales refleja una estrategia calculada de Binance para adaptarse a un ámbito financiero que busca equilibrar la innovación con la protección de los consumidores.