Desde su creación en 2015, Ethereum se ha establecido como una de las principales plataformas de blockchain, impulsando innovaciones en contratos inteligentes y aplicaciones descentralizadas (dApps). Sin embargo, uno de los cambios más significativos en su ecosistema ocurrió en septiembre de 2022, cuando Ethereum completó su tan esperada transición de Prueba de Trabajo (PoW) a Prueba de Participación (PoS) en un evento conocido como la Fusión (The Merge). Esta transición no solo ha transformado la forma en que se validan las transacciones en la red, sino que también ha impactado de manera drástica en la economía del suministro de Ethereum, llevándolo a un territorio deflacionario. ## ¿Qué es la Fusión y Cómo Afecta a Ethereum? La Fusión marcó el punto en el que Ethereum dejó de depender de la minería y, en su lugar, adoptó un sistema donde los validadores son elegidos para crear nuevos bloques en función de la cantidad de ETH que poseen y están dispuestos a "apostar". Este cambio no solo mejora la eficiencia energética de la red, sino que también afecta la emisión de nuevas monedas.
Antes de la fusión, Ethereum emitía un promedio de 13,000 ETH diarios a través de la minería. Sin embargo, tras la transición, esta tasa se ha reducido significativamente. La Reducción del Suministro Uno de los resultados más sorprendentes del cambio a PoS ha sido la reducción del suministro de ETH. Con la implementación de la EIP-1559 (Ethereum Improvement Proposal 1559) en agosto de 2021, se introdujo un nuevo modelo de tarifas que quema una parte de las tarifas de transacción en cada bloque. Esta quema de ETH significa que, a medida que la actividad de la red aumenta, se quema una cantidad significativa de ETH, lo que puede llevar a un suministro neto negativo de nuevas monedas.
Desde la fusión, y con el continuo aumento del uso de la red, se ha observado que la cantidad de ETH en circulación comienza a disminuir. Esto pone a Ethereum en una situación deflacionaria, lo que significa que la oferta total de ETH está disminuyendo. A medida que la demanda por el activo se mantiene o incluso aumenta, el valor de ETH podría verse impulsado hacia arriba. Implicaciones del Territorio Deflacionario La deflación en el mercado de Ethereum plantea varias implicaciones interesantes. Primero, a medida que la oferta de ETH disminuye, la escasez puede aumentar su valor.
Considerando que Ethereum ha sido ampliamente utilizado en finanzas descentralizadas (DeFi) y no fungible tokens (NFTs), un suministro reducido podría elevar el interés de los inversores, contribuyendo a un ciclo de aumento de precios. Además, la transición a un modelo deflacionario podría cambiar la percepción del ETH como un activo. En el contexto de las criptomonedas, donde muchos activos han sido históricamente inflacionarios, el hecho de que Ethereum esté disminuyendo su oferta podría hacer que los inversores lo vean como un refugio más seguro. Esto podría atraer a un nuevo tipo de inversionista que está buscando activos que se aprecien en valor con el tiempo. El Futuro de Ethereum Con Ethereum ahora en territorio deflacionario, es interesante especular sobre su futuro.
Muchas formas de financiación descentralizada, como los préstamos y los intercambios, dependen de la liquidez del ETH. La disminución de la oferta puede llevar a un aumento de precios, pero también podría provocar la reducción de liquidez en ciertos escenarios si los inversionistas deciden mantener sus activos en lugar de comerciar con ellos. Esto podría hacer que la red de Ethereum enfrente desafíos inesperados al equilibrar la oferta y la demanda. En contraste, la creciente adopción de Ethereum para aplicaciones empresariales y contratos inteligentes también sugiere que la demanda seguirá aumentando. Desde grandes corporaciones hasta nuevos emprendedores que exploran la tecnología blockchain, Ethereum se ha convertido en la plataforma de elección.