Rune Christensen, el fundador de MakerDAO, ha presentado un ambicioso plan que busca transformar uno de los protocolos de finanzas descentralizadas (DeFi) más importantes y utilizados en el mundo de la criptografía. En una entrevista exclusiva, Christensen compartió los cinco pasos de su "Endgame Plan", una estrategia diseñada para equilibrar los ideales de las criptomonedas con la pragmática realidad de los negocios. A medida que el ecosistema DeFi evoluciona, MakerDAO se encuentra en una encrucijada, y este plan podría ser la clave para su futuro. El primer paso en este ambicioso plan es la rebranding del protocolo. Christensen ha dejado claro que no se trata simplemente de un cambio de imagen superficial; el objetivo es completamente redefinir la identidad de Maker.
Esto incluye no solo un nuevo nombre para Maker y MakerDAO, sino también para sus dos tokens: DAI, su stablecoin, y MKR, el token de gobernanza. La idea es colaborar con agencias de branding y experiencia de usuario de primera categoría para pensar en cómo hacer que la experiencia financiera sea más amigable y atractiva para el público en general. Christensen enfatiza que busca crear una marca unificada que refleje el espíritu innovador y accesible del DeFi. El segundo paso es el cambio en la toma de decisiones dentro del protocolo. En lugar de depender de un único grupo centralizado, el plan propone la creación de entidades subsidiarias llamadas sub-DAOs.
Estas sub-DAOs serán responsables de gran parte de la gobernanza del protocolo, cada una con su propio token de gobernanza y estructura. Christensen cree que al descentralizar el proceso de toma de decisiones, se puede fomentar una mayor eficiencia en la operación de MakerDAO. Esta medida también tiene la intención de reducir el tiempo y los recursos gastados en la incorporación de colaterales poco relevantes, lo que ha sido un punto de crítica en el funcionamiento del actual sistema de gobernanza. Además, el esquema de distribución de tokens de gobernanza por medio de farming es clave para este segundo paso. Los usuarios podrán ofrecer DAI rebrandeada y, a cambio, recibirán tokens de gobernanza de las sub-DAOs en un proceso que Christensen describe como un juego divertido y no riesgoso, a diferencia de las esquemas Ponzi.
Sin embargo, como es habitual en el entorno cripto, existen limitaciones y los usuarios de Estados Unidos no podrán participar en las actividades de farming, dada la regulación progresiva del país. El tercer paso del plan es la utilización de inteligencia artificial (IA) para mejorar la gobernanza dentro de Maker. Reconociendo que los procesos de gobernanza a menudo pueden ser confusos y desalentadores, Christensen planea implementar programas de IA que facilitarán la participación y mantendrán informados a los usuarios sobre las decisiones de gobernanza. Esta innovación no solo busca aumentar la participación de votantes, que ha sido baja, sino también mejorar la transparencia y detectar posibles malas prácticas dentro del protocolo. El cuarto paso es una propuesta simple pero potente: pagar a los votantes.
Christensen subraya que la falta de participación en el proceso de gobernanza ha permitido que un pequeño número de grandes poseedores de MKR, junto con él mismo, dominen las decisiones. Al incentivar a los votantes con recompensas, espera aumentar significativamente la participación y, a su vez, dar más credibilidad al proceso democrático dentro de MakerDAO. Esto no solo ayudará a diversificar las voces en la gobernanza, sino que también permitirá que las decisiones reflejen mejor la voluntad de la comunidad. Finalmente, el quinto paso se centra en la infraestructura técnica del protocolo. Christensen propone operar Maker en una red de blockchain personalizada, alejándose de la red Ethereum.
Esta decisión se basa en la necesidad de crear un entorno más seguro y eficiente, capaz de proteger al protocolo de posibles ataques provenientes de actores maliciosos que pudieran adquirir suficientes tokens de gobernanza para amenazar su funcionamiento. La seguridad es, sin duda, una de las principales prioridades en un mundo donde los ataques cibernéticos son cada vez más comunes. La respuesta de la comunidad a estos planes todavía está en desarrollo, pero es claro que Christensen tiene una visión clara para el futuro de MakerDAO. A medida que las finanzas descentralizadas continúan creciendo y enfrentando desafíos regulatorios, su enfoque parece ajustarse a la necesidad de innovación y adaptabilidad. Al introducir cambios significativos en la gobernanza, la experiencia del usuario y la estructura técnica, Christensen espera no solo revitalizar MakerDAO, sino también establecer un nuevo estándar para la operatividad de otras plataformas DeFi.