En un avance científico que podría marcar un antes y un después en el tratamiento de lesiones medulares severas, un proyecto financiado por la comunidad cripto y desarrollado bajo el paraguas de una Organización Autónoma Descentralizada (DAO) ha logrado restaurar la movilidad en ratas con lesiones completas en la médula espinal. El grupo de investigación, conocido como HydraDAO y especializado en ciencia descentralizada (DeSci), ha dado a conocer resultados preliminares donde animales con la médula completamente seccionada recuperaron la capacidad de caminar apenas cinco días después de ser tratados mediante una innovadora técnica que utiliza un compuesto neuroprotector llamado neuro-PEG, mezcla de polietilenglicol (PEG) y quitosano, un biopolímero proveniente de la cáscara de crustáceos. Este descubrimiento, anunciado mediante una publicación en redes sociales y acompañado de videos que muestran a los roedores caminando en un entorno controlado, ha generado un gran interés y cautela en el mundo científico debido a la relevancia y el potencial impacto que podría tener en futuros tratamientos para lesiones medulares en humanos, condiciones que actualmente carecen de opciones terapéuticas efectivas para la recuperación funcional completa. La investigación forma parte del proyecto Dowell Spinal Fusogens liderado por el científico Andrey Panferov, quien junto a su equipo ha recaudado cerca de 380,700 dólares en stablecoins USDC a través de donaciones realizadas en la plataforma de HydraDAO. La organización evaluó la propuesta tras rigurosos procesos de revisión por pares y aprobó la financiación, destacando el interés comunitario en este proyecto pionero.
El fundamento de la técnica se basa en el uso de fusógenos, sustancias químicas capaces de fusionar membranas celulares, un campo conocido y estudiado durante años en la neurociencia. El PEG tradicionalmente ha sido explorado para sellar membranas axonales dañadas y facilitar la reconexión de fibras nerviosas lesionadas. Sin embargo, el desarrollo novedoso en este caso ha sido la combinación del PEG con quitosano, un biopolímero natural que aporta propiedades adicionales, como la capacidad de polimerizarse mediante luz para formar un andamiaje sólido y estable. Esta característica permite que el PEG-quitosano, denominado neuro-PEG, actúe como un “pegamento” biocompatible y duradero, capaz de soldar el tejido nervioso de forma más permanente que las soluciones líquidas convencionales basadas solo en PEG. Además, el equipo de científicos implementa técnicas complementarias esenciales para proteger la neurona, como la hipotermia localizada para disminuir el daño secundario y el uso de inhibidores de muerte celular, todas enfocadas en preservar la viabilidad y funcionalidad del tejido nervioso después de la cirugía.
Un estudio publicado en 2023 en la revista científica Surgical Neurology International, realizado por uno de los participantes del proyecto, el neurocirujano Michael Lebenstein-Gumovski, demostró que en cerdos tratados con este compuesto neuro-PEG se observó una recuperación significativa de la movilidad en tan solo dos meses tras una transección completa de la médula espinal. La publicación concluyó que este tratamiento podría abrir la puerta a ensayos clínicos en humanos que involucren incluso transplantes de médula espinal, una perspectiva que constituye un enorme salto en la medicina regenerativa. Además, el equipo ha protegido su innovación mediante patentes, con un registro ruso de 2022 que detalla el método para restaurar funciones de la médula espinal utilizando la conjugación de PEG y quitosano, en cuyo documento figura Lebenstein-Gumovski como uno de los inventores. Entre los planes de comercialización que el grupo propone se encuentran kits quirúrgicos especializados para neurocirugía a un precio estimado entre 3,500 y 20,000 dólares dependiendo de la región y el mercado, así como programas de capacitación y certificación para neurocirujanos y personal de emergencias médicas, con el propósito de facilitar la adopción y aplicación práctica de la técnica. A pesar de estas prometedoras perspectivas, la comunidad científica advierte prudencia y la necesidad de validar los hallazgos mediante experimentos independientes y replicaciones por terceros.
Aun cuando el equipo ya anunció que realizarán estudios adicionales con electrofisiología y trazadores para confirmar la reconexión funcional entre el cerebro y la médula a nivel inferior, todavía es prematuro afirmar que este procedimiento sea un tratamiento clínico efectivo para lesiones medulares humanas en entornos reales. El contexto histórico de la investigación presenta conexiones interesantes. Entre los investigadores clave se encuentran figuras como Lebenstein-Gumovski, vinculado a al menos un trabajo científico con Sergio Canavero, conocido por sus controvertidas afirmaciones sobre trasplantes de cabeza realizados en primates. Canavero ha sido una personalidad polémica en el ámbito de la neurocirugía debido a sus propuestas audaces que no siempre han recibido aval científico generalizado. De hecho, expertos en neurociencia han señalado la falta de evidencia sólida y han considerado sus proyectos como prematuros o poco viables.
En contraste, el equipo liderado por Panferov reconoce la experiencia de Canavero pero se distancia de sus conclusiones, enfatizando que el estudio de la médula espinal y la posibilidad de trasplantes requiere de pruebas robustas y evidencia científica rigurosa. El uso de fusógenos como herramienta para la reparación neuronal no es una novedad. Diversos grupos de investigación, incluyendo universidades prestigiosas, han reportado avances significativos en años recientes con diferentes variantes químicas y protocolos, aunque sin alcanzar aún resultados espectaculares como los reportados por HydraDAO. La diferencia reside en la fórmula neuro-PEG fotopolimerizable y el abordaje integral que combina neuroprotección, lo que podría marcar un nuevo rumbo en la terapia de daño medular. La financiación de este tipo de estudios a través de DAO representa una tendencia creciente dentro de la ciencia descentralizada impulsada por tecnología blockchain y criptomonedas.