En el universo en constante evolución de los videojuegos Web3, una tendencia que dominó a comienzos de 2024, el tap-to-earn, está perdiendo fuerza rápidamente. Notcoin, uno de los proyectos más destacados en el ecosistema de juegos basados en Telegram, ha señalado que el modelo de tap-to-earn está “probablemente muerto”, marcando un punto de inflexión significativo hacia una nueva etapa centrada en ofrecer experiencias de juego verdaderamente entretenidas y sostenibles. El tap-to-earn o “toca para ganar” es un concepto que, durante cierta temporada, atrajo a millones de usuarios en dispositivos móviles y plataformas sociales. La promesa de ganar tokens o recompensas simplemente con acciones repetitivas dentro del juego revolucionó la manera en que la industria Web3 abordaba la vinculación de los jugadores con las criptomonedas. Sin embargo, la dinámica reveló ser insostenible a largo plazo, con un desgaste evidente en el interés y la retención de usuarios.
Notcoin, desde sus inicios en 2024, logró captar la atención y aportar una solución notable al problema del onboarding de usuarios hacia las criptomonedas dentro del ecosistema de Telegram, una plataforma que ha experimentado un auge en su faceta de juegos. El proyecto atrajo a más de 30 millones de usuarios en apenas tres meses tras su lanzamiento, un hito que evidenció el enorme potencial del gaming Web3 en entornos sociales, pero también las limitaciones inherentes de modelos basados en la mera obtención de recompensas. Según declaraciones de Vladimir Plotvinov, cofundador de Notcoin, el interés por juegos que únicamente incentivan el farming de tokens es efímero, llevando a muchos usuarios a saltar de un juego a otro apenas alcanzan sus metas de ganancias. Esta conducta revela que la motivación primordial de estos jugadores está en la recompensa económica, no en la diversión o interacción. Sasha Plotvinov, otro cofundador de Notcoin, complementa esta visión explicando que los jugadores actuales buscan una experiencia que va más allá de la simple recompensa económica.
El deseo de pasar un buen rato con amigos, formar comunidades y compartir partidas en grupo está marcando la pauta del desarrollo futuro de los juegos en Telegram y, en general, en el ecosistema Web3. El cambio de paradigma apunta a que la economía Web3 en los juegos deje de ser el centro absoluto del entretenimiento para convertirse en un complemento. La propuesta de valor pasa a estar basada en la calidad del gameplay, la sociabilidad y el disfrute, generando además un compromiso a largo plazo por parte de los usuarios, un elemento crucial para la sostenibilidad de estos proyectos. El diseño y desarrollo de estos nuevos juegos no es inmediato. Uliana Salo, responsable de diseño y producto en NotGames, parte del ecosistema Notcoin, reconoce que Telegram todavía no cuenta con juegos ‘reales’ o lo suficientemente profundos, pero expresa un optimismo fundamentado en la capacidad que tiene la plataforma para evolucionar hacia modelos de juego más sofisticados que incorporen elementos Web3 de forma secundaria.
Esto significa un futuro prometedor donde el token y la blockchain acompañan pero no dominan la experiencia del usuario. En paralelo, la inteligencia artificial está emergiendo como una herramienta clave para acelerar el desarrollo de juegos Web3 en Telegram. Vladimir Plotvinov destaca que gracias a la IA, los desarrolladores pueden codificar más rápido y eficientemente, optimizando procesos que antes eran largos y tediosos. No obstante, advierte sobre la necesidad de experiencia y atención rigurosa para garantizar que la integración técnica funcione adecuadamente bajo condiciones de alta demanda y complejidad. El auge de Telegram como una plataforma para juegos Web3 no es casual.
Comparada con otras grandes plataformas sociales como Facebook o WeChat, Telegram alberga una audiencia muy similar en volumen y con gran potencial para la creación de ecosistemas de juegos propios. Esta comparación subraya que, aunque todavía incipiente, el escenario está maduro para un crecimiento exponencial en el segmento gamificado y criptointegrado. El entorno actual de Telegram Web3 gaming carece aún de grandes editoras y financiación robusta, pero el potencial para atraer desarrolladores e inversores es considerable. La clave del éxito radica en abandonar la fórmula del juego mercantilizado exclusivamente para ganar tokens, y en su lugar, apostar por la creación de experiencias que los jugadores quieran disfrutar por sí mismas, promoviendo una cultura gamer orgánica y social. Este giro en los juegos Web3 vinculados a Telegram manifiesta un cambio en la percepción y el comportamiento del jugador.
No se trata solo de la recompensa financiera inmediata, sino del valor intangible de la socialización, el entretenimiento y el sentido de comunidad, aspectos muy distintos a la simple lógica de farming o tap-to-earn que dominó la escena. En conclusión, Notcoin representa una visión de futuro para el mundo de los juegos Web3, especialmente aquellos integrados en plataformas sociales como Telegram. La muerte probable del modelo tap-to-earn abre paso a una evolución necesaria: modelos de juego más complejos, divertidos, y socialmente atractivos, donde la tecnología blockchain y los tokens sean facilitadores y añadidos, no el núcleo excluyente del entretenimiento. Para la industria, esto implica repensar el diseño de juegos, cómo captar y retener jugadores y cómo equilibrar la economía interna del juego sin sacrificar la jugabilidad. La sostenibilidad del ecosistema de juegos Web3 depende de esta transición y de la capacidad de atraer audiencias que valoren la experiencia completa y no solo la recompensa financiera.
El desarrollo con inteligencia artificial y la oportunidad que ofrece Telegram como plataforma social emergente posicionan a este sector en un punto crítico de crecimiento y madurez. Mientras los juegos Web3 maduran, los usuarios seguirán buscando diversión auténtica y conexiones sociales reales, y los proyectos que logren satisfacer estas necesidades prosperarán en la nueva era del gaming conectado a la blockchain.