Basis Cash: La criptomoneda estable algorítmica de la que Do Kwon no aprendió En el cambiante panorama de las criptomonedas, el término "stablecoin" se ha vuelto omnipresente, prometiendo estabilidad en un mar de volatilidad. Sin embargo, la historia ha demostrado que no todos los intentos de crear estas monedas han terminado en éxito. Un ejemplo notable es Basis Cash, una stablecoin algorítmica que fracasó estrepitosamente y que ilustra las lecciones no aprendidas en el camino hacia la creación de criptomonedas estables. A medida que el fiasco de Terra y su fundador Do Kwon continúan en el centro de atención, es crucial examinar Basis Cash y sus fracasos para entender mejor el ecosistema de las stablecoins. Basis Cash fue lanzada en 2020 como un producto innovador en el sector de las criptomonedas, cuyo objetivo era proporcionar una estabilidad similar a la del dólar estadounidense sin los problemas asociados con las stablecoins respaldadas por activos.
La idea era simple: utilizar algoritmos para regular la oferta de Basis Cash en circulación, aumentando o disminuyendo la cantidad de tokens dependiendo del precio en el mercado. La propuesta era atractiva, pero ya en sus inicios, surgieron dudas sobre la viabilidad de este enfoque. El mecanismo de Basis Cash se basaba en la creación de un "protocolo de reserva", que era único en su diseño. En lugar de depender de la garantía física de activos, como ocurre con el Tether o el USDC, Basis Cash buscaba imitar el comportamiento de una moneda fiduciaria ajustando automáticamente su suministro. Para lograr esto, la plataforma utilizaría un sistema de emisión y recompra de tokens, tratándose de un modelo deflacionario que prometía mantener el valor en un rango cercano al dólar.
Sin embargo, la realidad fue muy diferente. A pesar de su diseño ambicioso, Basis Cash se vio afectada por la misma volatilidad que pretende eliminar. A corto plazo, el proyecto tuvo un pequeño éxito, disfrutando de atención y popularidad en los foros de criptomonedas. Sin embargo, la falta de un respaldo tangible y la sobreoferta eventual de tokens llevaron a una rápida caída de su precio. Muchos inversores, atraídos por la promesa de ganancias rápidas, se encontraron atrapados en una caída libre sin un sistema claro de soporte.
Un factor determinante en el fracaso de Basis Cash fue la falta de confianza del inversor. Sin un activo subyacente que respaldara el valor de la moneda, los usuarios comenzaron a cuestionar la estabilidad que prometía. La comunidad cripto es conocida por su desconfianza hacia los modelos no respaldados, y esa desconfianza se intensificó a medida que la stablecoin se alejaba de su objetivo de paridad con el dólar. Una vez que el precio comenzó a descender, el pánico se apoderó de los inversores, lo que llevó a una liquidación masiva. La situación se complicó aún más por la aparición de numerosos clones de Basis Cash que intentaron replicar su modelo sin tener en cuenta las lecciones del fiasco original.
Esto generó una mayor fragmentación del mercado, y aunque algunos de estos proyectos lograron atraer algo de interés, ninguno pudo escapar de la sombra que había dejado Basis Cash. Los errores de la stablecoin original se repitieron, y muchos de estos nuevos proyectos también fracasaron, contribuyendo a un ciclo de desconfianza en torno a las stablecoins algorítmicas. Es crucial hacer una comparación con el caso de Terra y Do Kwon. Terra, otro intento de crear una moneda estable algorítmica, prometía revolucionar el sector al ofrecer un ecosistema que integraba varias aplicaciones y productos financieros. Sin embargo, al igual que Basis Cash, fracasó espectacularmente.
La caída de Terra en 2022 fue un llamado de atención para la comunidad de criptomonedas, con la misma historia que se repite: un diseño algorítmico que no pudo sostenerse ante las presiones del mercado. Do Kwon, el fundador de Terraform Labs y mente maestra detrás de Terra, ha sido ampliamente criticado por no aprender de los errores del pasado, especialmente de fracasos como el de Basis Cash. A medida que enfrentaba las repercusiones legales y financieras de su proyecto fallido, muchos comenzaron a señalar que la falta de aprendizajes de la historia de otras stablecoins era un indicativo de la falta de responsabilidad en el desarrollo de este tipo de productos. La arrogancia y la ambición en el sector de las criptomonedas a menudo llevan a la repetición de errores históricos, y Kwon parece ser un ejemplo emblemático de esto. La desconfianza en las stablecoins algorítmicas como Basis Cash y Terra deja una huella indeleble en la percepción del mercado hacia este tipo de proyectos.
A medida que los reguladores comienzan a prestar más atención a las criptomonedas y a las stablecoins, resalta la necesidad de transparencia y mecanismos de control que eviten fracasos similares en el futuro. La ambición de los creadores de estos proyectos no puede estar por encima de la responsabilidad hacia los inversores. El caso de Basis Cash debería servir como una advertencia no solo para Do Kwon, sino para cualquier persona que busque ingresar al mundo de las criptomonedas con ideas innovadoras pero riesgosas. Aprender de los fracasos del pasado es fundamental para avanzar hacia un ecosistema más robusto y confiable. La historia ha visto una y otra vez cómo la falta de una base sólida puede llevar al colapso, y la comunidad cripto debe tomar estas lecciones en serio.