Vitalik Buterin, cofundador de Ethereum, ha hecho una propuesta innovadora y significativa que podría cambiar la forma en que los proyectos dentro de esta red se alinean con sus valores fundamentales. En un artículo de blog publicado el 28 de septiembre de 2024, Buterin destacó la necesidad urgente de desarrollar métricas que evalúen el grado de “alineación” de los diferentes proyectos con la esencia de Ethereum, reconociendo que esta tarea es uno de los desafíos sociales más grandes que enfrenta la comunidad. La idea de medir la alineación no es trivial; Buterin subrayó la diversidad de actores involucrados en el ecosistema de Ethereum, incluidos los equipos de desarrollo de clientes, los desarrolladores de aplicaciones, los investigadores y las comunidades locales. Este mosaico de colaboradores aporta singularidad al funcionamiento de la red, lo que hace fundamental que cada proyecto contribuya a un ecosistema cohesivo en lugar de operar como 138 facciones incompatibles. Buterin expresó su preocupación de que la fragmentación podría obstaculizar el crecimiento y la efectividad de Ethereum.
“El desafío principal es asegurarnos de que todos estos proyectos estén colectivamente construyendo algo que se sienta como un único ecosistema de Ethereum, y no como 138 feudos incompatibles”, afirmó. Este entendimiento sobre la importancia de la unidad refleja su compromiso con una visión más inclusiva y cooperativa para el futuro de la red. Entre los puntos que propuso Buterin para establecer un marco de referencia para la alineación, se encuentran criterios que abarcan una variedad de dimensiones. Uno de ellos es la naturaleza de código abierto de los proyectos. La idea aquí es que un proyecto debe ser de código abierto, lo que permite la inspección del código, mejora la seguridad y reduce el riesgo de un "bloqueo propietario".
Además, un código abierto invita a terceros a contribuir con mejoras, fomentando un ambiente colaborativo. La interoperabilidad también fue un punto clave en su propuesta. Buterin sugirió que la compatibilidad de las aplicaciones y billeteras con los diferentes estándares de ERC podría ser un indicador de la interoperabilidad de un proyecto. Aquellos que admiten múltiples estándares de ERC tenderán a tener un rango más alto en términos de alineación, promoviendo así un ecosistema donde los distintos componentes puedan comunicarse eficazmente entre sí. Buterin propuso también medir la descentralización y la seguridad de los proyectos mediante pruebas específicas.
La “Prueba de Caminar” evalúa si una aplicación sigue siendo funcional si su equipo de desarrollo y servidores dejan de existir. Por otro lado, la “Prueba de Ataque Interno” examina el daño que podría causar un intento del equipo del proyecto para socavar el sistema. Estas métricas no solo legitiman el enfoque hacia la seguridad en blockchain, sino que también establecen un estándar que todos los proyectos pueden seguir para asegurar su robustez. El impacto comunitario fue otro criterio esencial que Buterin consideró. Un proyecto debería ser evaluado no solo por su rendimiento técnico, sino también por sus contribuciones positivas a la comunidad de Ethereum y, por extensión, a la humanidad.
Iniciativas que promuevan la inclusión financiera o desarrollen nuevos mecanismos de financiación pública podrían ser vistas como más alineadas con los valores de Ethereum, reflejando un compromiso no solo con el éxito económico, sino también con el bienestar social. Buterin enfatizó la necesidad de que Ethereum mantenga una postura de credibilidad neutral. En este contexto, afirmó que “si la alineación significa tener los amigos correctos, entonces el concepto de 'alineación' ha fracasado”. Esta declaración pone de relieve que la alineación no debe depender de conexiones sociales o alianzas políticas, sino de valores y objetivos compartidos, un principio fundamental en un ecosistema que insiste en la descentralización. Ryan Berckmans, un miembro destacado de la comunidad Ethereum, respaldó las observaciones de Buterin, subrayando la importancia de minimizar los esfuerzos de marketing entre los constructores de Ethereum.
Berckmans advirtió que un marketing excesivo podría crear un ambiente competitivo que genere ganadores y perdedores, socavando la cohesión de la comunidad. “Aunque es literalmente bueno para el crecimiento, termina convirtiendo tu cadena y comunidad en un pantano de asociaciones cargadas políticamente, lo que eventualmente obstaculizará el crecimiento serio cuando corporaciones y gobiernos comiencen a depender de blockchain para actividades importantes”, expresó en una entrevista. La influencia de Vitalik Buterin en la comunidad es indiscutible. Su visión es frecuentemente considerada como una fuerza orientadora para muchos proyectos y miembros de la comunidad. Charles Hoskinson, fundador de Cardano, comentó en una reciente entrevista: “Todo el mundo lo mira a él para el mapa de ruta.
Todos lo ven como inspiración, y él es también la única persona que tiene suficiente poder para unir a la gente”. Hoskinson planteó una pregunta crítica sobre el futuro de Ethereum si Buterin dejara de participar: “Si lo quitaras de la ecuación ahora mismo, ¿cómo luciría el próximo hard fork, y qué tan rápido podrían lograrlo?”. Este comentario refleja preocupaciones sobre la posible inestabilidad y la incertidumbre en la hoja de ruta de desarrollo de Ethereum sin el liderazgo de Buterin. La propuesta de Buterin de crear métricas para medir la “alineación de Ethereum” subraya la evolución continua de este ecosistema. A medida que la red crece y se diversifica, establecer valores comunes y garantizar contribuciones cohesivas de varias partes interesadas se vuelve primordial.