La reciente decisión de la Corte Suprema de India de anular la adquisición de Bhushan Power y Steel por parte de JSW Steel ha marcado un hito importante en el ámbito industrial y judicial del país. Esta resolución proviene de la revisión del proceso de insolvencia que envolvió a Bhushan Power, una empresa involucrada en una deuda considerable y acusaciones de fraude que afectaron su estabilidad financiera. La anulación representa un claro mensaje sobre la necesidad de respetar rigurosamente los procedimientos legales en adquisiciones complejas y procesos de insolvencia, y subraya la importancia de la supervisión judicial en la protección de los intereses de los acreedores y demás partes involucradas. La historia de Bhushan Power está marcada por una oleada de dificultades económicas que culminaron en 2017, cuando fue uno de los primeros casos señalados por el Banco de Reserva de India (RBI) para ser sometido al nuevo régimen regulatorio bajo el Código de Insolvencia y Quiebras (IBC, por sus siglas en inglés). Bhushan Power acumuló una deuda superior a Rs470 mil millones (alrededor de 5,6 mil millones de dólares), lo que desencadenó procedimientos legales destinados a reestructurar la empresa o liquidar sus activos para saldar sus compromisos con acreedores.
La adquisición de Bhushan Power por JSW Steel, concretada en 2021 por aproximadamente Rs197 mil millones (2,35 mil millones de dólares), fue vista inicialmente como una oportunidad para rescatar a la empresa y proteger puestos de trabajo, al tiempo que ampliaba la capacidad industrial y estratégica de JSW Steel. Sin embargo, la Corte Suprema encontró que el proceso de insolvencia y la aprobación de la adquisición contenían irregularidades que comprometían su legalidad. Según fuentes consultadas, la orden verbal emitida por la Suprema Corte apuntó a fallas en el cumplimiento de obligaciones legales por parte del administrador de insolvencia y el comité de acreedores que supervisaba la transacción. En particular, el tribunal calificó el plan de adquisición como "ilegal", indicando que la aprobación otorgada por el comité de acreedores no debería haberse materializado. Esta postura refleja la vigilancia judicial sobre procesos tan sensibles y complejos donde, además de la gestión financiera, están en juego consideraciones legales, éticas y regulatorias.
La respuesta del mercado inmediato a la noticia fue negativa, con una caída cercana al 7% en el precio de las acciones de JSW Steel. Esto refleja la incertidumbre y preocupación de los inversionistas ante la incertidumbre sobre los activos adquiridos y las futuras estrategias de la empresa. Por su parte, JSW Steel ha anunciado que está a la espera de la versión oficial de la orden para comprender detalladamente los fundamentos de la anulación y definir los próximos pasos legales o estratégicos. La controversia alrededor de Bhushan Power no se limita solo a su situación financiera. En 2019, el Punjab National Bank (PNB) inició procedimientos penales contra los antiguos directivos de Bhushan Power después de descubrir un fraude por aproximadamente 453 millones de dólares.
Este hallazgo puso en evidencia prácticas irregulares dentro de la gestión corporativa, aumentando las dudas sobre la transparencia y credibilidad de la empresa en su conjunto. Es importante destacar que en este proceso, ni el Punjab National Bank ni el State Bank of India —ambos líderes del comité de acreedores— han emitido comentarios oficiales, lo que contribuye a la opacidad del caso y genera más preguntas sobre la gestión del proceso de insolvencia. Por otra parte, la jurisprudencia establecida por la Corte Suprema en este caso puede tener repercusiones amplias para futuras adquisiciones en el marco del Código de Insolvencia y Quiebras de 2016. El rol del comité de acreedores, bajo supervisión adecuada, se vuelve esencial para garantizar que las decisiones se tomen dentro del marco legal y con transparencia, garantizando que los derechos de todas las partes involucradas sean respetados. Vale la pena señalar que, en un contexto relacionado pero separado, otra filial del Grupo JSW, JSW Energy, obtuvo la aprobación para adquirir la planta térmica de carbón de 3.
6 GW de KSK Mahanadi Power Company en Chhattisgarh. Esta adquisición también se encuadra bajo el mismo marco legal de insolvencia, pero hasta ahora no ha enfrentado controversias similares. Esta situación demuestra la complejidad y la importancia estratégica de las adquisiciones en sectores como la energía y la industria pesada en India, donde grandes activos en dificultades son atractivos para consolidar capital y capacidad productiva. Para comprender plenamente el impacto de la decisión de la Corte Suprema, es relevante analizar la evolución del Código de Insolvencia y Quiebras de India. Este código fue diseñado para agilizar la resolución de deudas y evitar largos procesos judiciales que prolongan la incertidumbre.