En los últimos años, la tecnología blockchain ha experimentado una evolución significativa, pasando de ser un mero soporte para criptomonedas a convertirse en una infraestructura clave en diversos sectores, especialmente en las finanzas reguladas. Entre las múltiples iniciativas que buscan optimizar esta tecnología se encuentra Coreum, una blockchain de tercera generación que ofrece una capacidad de procesamiento excepcional de 7,000 transacciones por segundo (TPS). Esta cifra posiciona a Coreum como una plataforma capaz de satisfacer las exigencias institucionales en términos de velocidad, seguridad y cumplimiento normativo. Coreum ha sido diseñada con una visión clara: facilitar la adopción masiva por parte de instituciones financieras que requieren infraestructuras tecnológicas robustas, confiables y compatibles con estrictas regulaciones. Su arquitectura técnica incorpora innovaciones que permiten superar barreras tradicionales, como la escalabilidad limitada y la complejidad en la integración de sistemas regulatorios.
Además, Coreum enfatiza un modelo de costos de transacción deterministas, una característica fundamental para entornos financieros donde la previsibilidad y transparencia en las tarifas son indispensables. Uno de los grandes avances que aporta Coreum es la integración de las funciones de cumplimiento normativo directamente en el protocolo. A diferencia de otras blockchains en las que las herramientas para conocer al cliente (KYC) y la prevención de lavado de dinero (AML) se adicionan mediante aplicaciones de terceros, Coreum trabaja conjuntamente con AnChain.ai, un proveedor líder en tecnologías de inteligencia artificial para gestión de riesgos y detección de fraudes. Esta colaboración asegura que todas las operaciones en la red estén sujetas a monitoreo en tiempo real, con evaluaciones automatizadas que fortalecen la confianza y seguridad requeridas por actores institucionales.
La capacidad de finalización rápida de las transacciones es otro factor crítico de Coreum. Con un tiempo promedio de finalización de aproximadamente 1.2 segundos, la plataforma permite que las operaciones concluyan en lapsos que se alinean con los estándares de mercados financieros tradicionales. Esto es especialmente relevante para operaciones de alto volumen o para aquellas mecánicas de trading de alta frecuencia que demandan una ejecución eficiente y sin retrasos. En cuanto a la infraestructura para el intercambio de activos, Coreum presenta una arquitectura innovadora para su exchange descentralizado (DEX).
A diferencia de otros modelos basados en “automated market makers” (AMM) que emplean pools de liquidez y pueden sufrir pérdidas impermanentes y deslizamientos significativos en los precios, Coreum utiliza un libro de órdenes onchain. Este enfoque dota al DEX de un mecanismo determinista para la ejecución de órdenes, ofreciendo mayor estabilidad, precisión en la fijación de precios y menores riesgos para los usuarios, características que son esenciales para operadores institucionales. Además, el DEX de Coreum está optimizado para soportar operaciones de trading de alta frecuencia, con una velocidad de procesamiento que rivaliza con la de las bolsas tradicionales. Su avanzado API facilita la integración con sistemas externos de negociación institucional, permitiendo a firmas financieras y creadores de mercado incorporar fácilmente las ventajas del ecosistema Coreum en sus flujos de trabajo habituales, sin sacrificar el cumplimiento ni la eficiencia operativa. La interoperabilidad es otro pilar de la propuesta de Coreum.
La plataforma ha establecido conexiones estratégicas con el XRP Ledger y la red Cosmos mediante su protocolo Inter-Blockchain Communication (IBC). Esta integración multiplica las posibilidades para las aplicaciones financieras que requieren movilidad ágil y segura de activos entre diferentes blockchains, incrementando la liquidez y abriendo nuevas oportunidades para la tokenización y gestión de activos regulados en un entorno multi-cadena. La asociación con XRP Ledger brinda acceso a la eficiencia comprobada en pagos y liquidaciones rápidas, mientras que la interconexión con Cosmos permite beneficiarse de una arquitectura modular con más de cien blockchains conectadas. Esta capacidad de operar sin comprometer la seguridad o el cumplimiento regula un salto cualitativo en la evolución de infraestructuras blockchain para el sector financiero. La tokenización de activos reales ha experimentado un crecimiento notable y se espera que esta tendencia continúe en los próximos años, especialmente en segmentos como bienes raíces, commodities y títulos financieros, donde existe una demanda creciente por instrumentos más líquidos y accesibles que cumplan con las normativas vigentes.
Coreum se posiciona como una opción sólida para soportar esta transformación gracias a su diseño que combina escalabilidad, cumplimiento incorporado, velocidad y capacidad de interoperar ampliamente. Por consiguiente, la plataforma representa un caso de estudio relevante sobre cómo las redes de blockchain de próxima generación pueden responder a las exigencias del mercado institucional, superando los retos que han limitado hasta ahora la adopción más generalizada en entornos regulados. Las funcionalidades de Coreum, desde la estructura de tarifas estáticas hasta la integración profunda de herramientas de compliance y una infraestructura DEX avanzada, sugieren un camino futuro para la convergencia entre criptomonedas y finanzas tradicionales. La importancia de abordar la regulación desde el diseño de la red no puede subestimarse, dado que la desconfianza hacia activos digitales en algunos sectores financieros se debe en buena medida a la incertidumbre legal y operacional. Coreum ataca directamente esta problemática al incluir la supervisión y evaluación de riesgos como elementos fundamentales y no secundarios, lo cual facilita no solo el cumplimiento, sino también la monitorización y auditoría continua de las operaciones en cadena.
Además, la experiencia de usuario para instituciones que integran Coreum es enriquecida por su infraestructura técnicamente avanzada pero práctica, que permite flexibilidad para desarrollar aplicaciones financieras a medida, mercados especializados y productos innovadores que respondan a las exigencias particulares de diferentes jurisdicciones y mercados. En resumen, Coreum ejemplifica cómo las tecnologías blockchain de tercera generación pueden ser adaptadas para resolver las demandas específicas de las finanzas reguladas, al ofrecer una plataforma rápida, segura, interoperable y que pone el cumplimiento normativo en el centro de su protocolo. Su capacidad para procesar más de 7,000 transacciones por segundo con tarifas claras y previsibles, junto con un ecosistema que apoya la tokenización de activos y el trading institucional, abre un abanico de posibilidades para la evolución armoniosa entre la innovación tecnológica y la regulación financiera. El futuro de las finanzas reguladas seguramente estará marcado por redes como Coreum, que combinan lo mejor del blockchain con los estándares exigidos por entidades supervisoras y mercados tradicionales, acelerando así la adopción institucional de tecnologías descentralizadas y promoviendo un entorno financiero más transparente, eficiente y abierto.