Uber Technologies, la gran empresa líder en movilidad urbana y entrega de alimentos, presentó resultados financieros del primer trimestre de 2025 que sorprendieron al mercado por su desempeño mixto. Aunque la compañía reportó ganancias por acción mejor de lo esperado y un pronóstico optimista para el segundo trimestre, sus ingresos y reservas brutas quedaron ligeramente por debajo de lo anticipado por Wall Street, lo que generó una caída significativa en el valor de sus acciones durante las primeras horas de negociación. El informe trimestral reveló que Uber logró un beneficio de 83 centavos por acción, una cifra que contrasta marcadamente con la pérdida de 32 centavos por acción del mismo periodo del año anterior y que superó las expectativas de los analistas, que estimaban ganancias de 51 centavos. Este repunte en la rentabilidad marca un avance importante para Uber, reflejando esfuerzos constantes por optimizar su modelo de negocio y reducir pérdidas anteriores. A pesar de este dato positivo, los ingresos totales de Uber en el trimestre alcanzaron los 11.
530 millones de dólares, un crecimiento anual del 14%, pero por debajo de los 11.630 millones pronosticados. De manera similar, las reservas brutas, una métrica clave que indica el total de transacciones manejadas a través de la plataforma, crecieron un 14% interanual hasta 42.800 millones de dólares, pero también se quedaron cortas frente a la expectativa de 43.100 millones.
Este ligero desajuste en las cifras de ventas fue el principal motivo por el que las acciones de Uber retrocedieron más de un 2%, cotizando cerca de 83.92 dólares en las operaciones recientes. Los inversores suelen reaccionar rápidamente ante cualquier indicio de desaceleración en el crecimiento de ingresos, incluso si la rentabilidad mejora, ya que los ingresos son fundamentales para el futuro crecimiento y valor de la empresa. Sin embargo, el CEO Dara Khosrowshahi ofreció un mensaje alentador durante la llamada con analistas, explicando que cada componente del marco multianual de crecimiento de Uber está "funcionando de manera óptima". Subrayó que las métricas de clientes muestran un crecimiento robusto y saludable, y destacó especialmente el aumento en el número de usuarios activos y viajes realizados.
Durante el trimestre, Uber registró tres mil millones de viajes en su plataforma, un incremento del 18% con respecto al año anterior. Además, la base de usuarios activos en la aplicación alcanzó 170 millones, un aumento del 14% anual, lo que reafirma la sólida demanda de los servicios de la compañía tanto en movilidad como en entrega. Analizando la segmentación del negocio, la división de movilidad, que comprende los viajes reservados a través de la aplicación de Uber, reportó reservas por valor de 21.180 millones de dólares, un crecimiento del 13% anualmente pero inferior a las expectativas de 21.500 millones.
En contraste, la división de entregas, que abarca pedidos de comida y comestibles, mostró una expansión más sólida con un aumento del 15% y reservas por 20.380 millones, superando ligeramente las previsiones. Otro aspecto destacable es la mejora en la rentabilidad operativa medida a través del EBITDA ajustado, que creció un 35% hasta 1.870 millones de dólares, superando las estimaciones de 1.850 millones.
Uber espera mantener esta tendencia positiva con una proyección para el segundo trimestre de un EBITDA ajustado de 2.070 millones, por encima del consenso previo de 2.040 millones. La estrategia de Uber de diversificar su oferta y preparar su futuro mediante la integración de vehículos autónomos también fue un punto clave en la presentación. El CEO enfatizó la exitosa utilización de los aproximadamente 100 vehículos autónomos de Waymo operativos en Austin, Texas, y destacó la expansión continua de esta colaboración en otras ciudades como Phoenix y pronto Atlanta.
Estas alianzas tienen el objetivo de fortalecer su posición frente a la competencia y nuevas tecnologías, anticipando la creciente importancia de los robotaxis en el mercado. Sin embargo, la preocupación persistente sobre el impacto que estos vehículos autónomos, tanto de Waymo como del robotaxi de Tesla, podrían tener en la cuota de mercado de Uber sigue latente entre los inversores, lo que añade presión sobre las acciones de la empresa a corto plazo. En lo que va del año, a pesar de la reciente caída, las acciones de Uber han subido alrededor de un 42%, muy por encima de la pérdida del 4.7% que registra el índice S&P 500. Este rendimiento ha estado respaldado por una serie de avances técnicos, incluyendo una ruptura de base en su estructura de mercado que atrajo la atención de los inversores técnicos y especulativos.
A nivel técnico, Uber mantiene un puntaje Composite Rating alto según el sistema de calificación de Investor’s Business Daily, lo que refleja la fortaleza relativa de la acción y su potencial para continuar ganando terreno. El promedio del rango verdadero (ATR) de 21 días es del 4.65%, indicador que sugiere volatilidad moderada y manejable bajo las condiciones actuales del mercado. En un contexto más amplio, la apuesta de Uber por la innovación tecnológica, la diversificación de su modelo de negocio y el refuerzo de su presencia global parecen estar dando frutos, pero la compañía enfrenta el desafío constante de cumplir o superar las expectativas de ingresos para satisfacer a los inversores y mantener un precio de acción estable. De cara al futuro próximo, la atención se centrará en la evolución del segundo trimestre, donde Uber ha proporcionado un pronóstico optimista con un crecimiento esperado en reservas brutas, lo que podría reafirmar la confianza del mercado si se logra cumplir o superar.
Además, la continua integración y expansión del negocio de entregas, junto con la consolidación de sus alianzas en vehículos autónomos, serán factores cruciales para sostener su ventaja competitiva. En conclusión, aunque Uber enfrenta fluctuaciones en sus ingresos que impactan en su valoración bursátil, la empresa sigue mostrando señales claras de avance en rentabilidad, crecimiento de usuarios y estrategias de innovación tecnológica. Para inversores y analistas, el balance entre cumplir las expectativas de ventas y mantener la rentabilidad será clave para determinar la trayectoria futura de la acción en un mercado cada vez más competitivo y dinámico.