Bitcoin, la criptomoneda más conocida y valiosa del mundo, parece estar en la cúspide de un nuevo ciclo alcista, con analistas sugiriendo que podría alcanzar un nuevo máximo histórico en un futuro cercano. Con un precio actual que ronda los 98,713 dólares, los expertos están comenzando a formular sus proyecciones sobre cómo la creciente adopción y los cambios en el entorno macroeconómico darán forma a su trayectoria. En las últimas semanas, Bitcoin ha mostrado un comportamiento notable, alcanzando su nivel más alto desde el 31 de julio. Esta recuperación coincide con el aumento de activos más arriesgados, como las altcoins y las acciones en los principales índices bursátiles. Por ejemplo, el índice Dow Jones y el S&P 500 han alcanzado niveles récord, mientras que el Nasdaq 100 se mantiene apenas por debajo de su máximo histórico.
Este contexto sugiere una recuperación del apetito por el riesgo entre los inversores, lo que pone a Bitcoin en una posición favorable. El analista de criptomonedas Miles Deutscher ha compartido su perspectiva optimista, indicando que Bitcoin podría continuar ascendiendo en el corto plazo, estimando que podría alcanzar los 81,000 dólares. En su análisis, Deutscher explica que el S&P 500 está actualmente un 9% por encima de su máximo del año, lo que implica que Bitcoin podría seguir esta tendencia si despliega el mismo desempeño. “Si Bitcoin logra alcanzar el mismo nivel de recuperación que las acciones, eso implicaría un precio de 81,000 dólares", afirmó en una publicación en la red social X.com, donde cuenta con más de 541,000 seguidores.
Este tipo de análisis es común en el entorno financiero, y muchos inversores están atentos a los movimientos de los índices bursátiles como indicadores del rendimiento potencial de activos como Bitcoin. Sin embargo, la opinión de Deutscher no es una excepción. Otros analistas también se muestran optimistas respecto al futuro de Bitcoin. Un reciente informe de BlackRock, la mayor gestora de activos del mundo, describe la criptomoneda como un "diversificador único" en tiempos de incertidumbre. Esta afirmación subraya la creciente aceptación de Bitcoin no solo como un activo especulativo, sino como una forma legítima de diversificación de cartera.
BlackRock ha continuado incorporando Bitcoin en su balance, lo que podría influir en otros fondos y empresas a seguir su ejemplo. El creciente interés institucional también ha jugado un papel crucial en la percepción de Bitcoin como un activo que puede ofrecer una protección contra la inflación y la inestabilidad económica. Otro apoyo significativo a la afirmación de que Bitcoin está listo para un repunte proviene de MicroStrategy, una empresa liderada por su fundador Michael Saylor, un conocido defensor de Bitcoin. La compañía tiene una impresionante cantidad de Bitcoin en su balance, con más de 252,000 monedas actualmente acumuladas. Saylor ha hecho predicciones audaces, sugiriendo que el precio de Bitcoin podría superar los 13 millones de dólares para el año 2045.
Este enfoque a largo plazo está en línea con la opinión de muchos que ven a Bitcoin como más que solo una moneda digital, considerándola una reserva de valor a largo plazo. Además de las influencias del mercado, los analistas también están considerando factores macroeconómicos que podrían impulsar el precio de Bitcoin. La liquidez global está en aumento, y se espera que los bancos centrales continúen reduciendo las tasas de interés. Esto, combinado con las presiones inflacionarias en muchas economías, aumenta la posibilidad de que más inversores busquen refugio en activos como Bitcoin, que no están sujetos a las mismas dinámicas que las acciones tradicionales. En este sentido, Michaël van de Poppe, fundador de MC Consultancy y entusiasta de Bitcoin, cree que el precio podría oscilar entre 90,000 y 100,000 dólares para finales de año.
Este pronóstico se basa en la creciente liquidez global, que ha empezado a fluir hacia los mercados de criptomonedas. "Antes de que termine el año, podríamos ver a Bitcoin negociándose entre los 90,000 y 100,000 dólares", escribió en un tuit, argumentando que la tendencia de crecimiento de altcoins aún está en las etapas iniciales. La estacionalidad también está trabajando a favor de Bitcoin en este periodo. Según datos de CoinGlass, el rendimiento promedio de Bitcoin en el cuarto trimestre es notablemente alto, con un 88%, lo que supera los incrementos más modestos del 6.3% y 27% observados en los terceros y segundos trimestres, respectivamente.
Octubre y noviembre suelen ser meses muy favorables para la criptomoneda, lo que añade otra capa de optimismo en torno a su desempeño inminente. Del lado técnico, Bitcoin muestra señales ciertamente positivas. Los gráficos recientes han revelado patrones de inversión, como la formación de un patrón de hombro-cabeza-hombro invertido y una cuña ampliada descendente. Estos son considerados indicadores de un mercado alcista. Además, Bitcoin ha logrado evitar la formación de un "death cross," en el que la media móvil de 50 días cruza por debajo de la media móvil de 200 días, lo que es tradicionalmente una señal bajista.
Más bien, ha estado operando por encima de ambos promedios móviles, lo que sugiere un potencial de crecimiento hacia el alza. Para avanzar en este trayecto, Bitcoin necesita superar la parte superior de esta cuña y sobrepasar la marca de los 73,777 dólares, que representa su máximo del año hasta la fecha. De hacerlo, podría acelerar aún más su recuperación y atraer a más compradores al mercado. Un análisis conductual adicional proviene de Polymarket, que muestra que los operadores están apostando, en un 63%, a que Bitcoin alcanzará un nuevo máximo histórico en 2024. Este tipo de proyección refleja la confianza del mercado en que Bitcoin no solo resistirá la volatilidad, sino que también superará los precios vistos en su anterior pico histórico de alrededor de 69,000 dólares.