SLB, una de las principales compañías proveedoras de servicios para la industria petrolera, ha presentado resultados financieros que reflejan un entorno desafiante marcado por la reducción en el gasto de los productores de petróleo y las complicaciones derivadas de las tarifas comerciales internacionales. En su reporte correspondiente al primer trimestre de 2025, la empresa destacó una disminución en sus ingresos que responde a varios factores, incluyendo la menor actividad en regiones clave y los efectos de las sanciones económicas globales. Los ingresos de SLB durante el primer trimestre alcanzaron los 8,49 mil millones de dólares, mostrando una caída del 3% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta disminución se atribuye principalmente a una menor actividad de perforación en México, un inicio lento en mercados estratégicos como Arabia Saudita y áreas offshore en África, así como una caída significativa en Rusia, consecuencia directa de las sanciones impuestas a nivel internacional. En América Latina, los ingresos descendieron un 10%, situándose en 1,5 mil millones de dólares, lo que contribuyó a una caída del 5% en los ingresos internacionales totales, los cuales sumaron 6,73 mil millones de dólares.
Contrariamente, el mercado de América del Norte experimentó un crecimiento en ingresos del 8% año tras año, impulsado en parte por el incremento en infraestructura de centros de datos, aunque este auge fue parcialmente contrarrestado por una menor actividad en la perforación terrestre en Estados Unidos. Este panorama financiero refleja las preocupaciones más amplias presentes en la industria petrolera global, que están siendo anunciadas también por actores importantes del sector. Empresas rivales como Halliburton y Baker Hughes han expresado inquietudes similares sobre la disminución de la demanda y los costos adicionales derivados de las tarifas comerciales. Halliburton ha advertido sobre un impacto negativo en sus resultados del segundo trimestre a raíz de estos factores, mientras que Baker Hughes proyecta recortes de gasto más profundos por parte de los productores petroleros a nivel mundial. Olivier Le Peuch, CEO de SLB, manifestó que se espera una reducción general en la inversión upstream para el año, con la excepción de mercados como Oriente Medio y Asia, que muestran una mayor resiliencia.
Esta expectativa subraya un contexto volátil en el que la inversión en exploración y producción está siendo reajustada por los productores con miras a optimizar costos ante las incertidumbres económicas y geopolíticas existentes. El impacto de las tarifas comerciales, especialmente en materiales que se negocian entre Estados Unidos y China, afecta a aproximadamente la mitad de las operaciones de SLB. La empresa ha tomado medidas para optimizar sus cadenas de suministro y mitigar los efectos adversos, incluyendo la intención de trasladar parte de los costos adicionales a sus clientes. Esta estrategia busca mantener la viabilidad financiera y proteger los márgenes, a la vez que permite adaptarse a un contexto más complejo en términos comerciales. Además, SLB está impulsando una fuerte agenda de reducción de costos y alineación de recursos conforme a los niveles de actividad proyectados para los próximos trimestres.
Este enfoque incluye reorganizaciones internas y continuas reducciones de personal, decisiones que buscan una mayor eficiencia operativa y capacidad de respuesta ante la dinámica cambiante del mercado. En un contexto de incertidumbre, la compañía mantiene una perspectiva optimista para la segunda mitad de 2025, anticipando que los ingresos puedan mantenerse estables o incluso experimentar un aumento moderado de un dígito medio en comparación con la primera mitad del año. Un dato relevante en la actualidad es la adjudicación reciente de un contrato significativo por parte de Woodside Energy a SLB para la perforación de 18 pozos ultra profundos en el proyecto Trion en México. Este contrato evidencia que, a pesar de los desafíos, existen oportunidades de crecimiento en proyectos especializados y de alta complejidad técnica. La industria petrolera vive un momento de transición en el que factores como la geopolítica, los cambios regulatorios, las fluctuaciones en los precios del crudo y el impacto de políticas comerciales como las tarifas arancelarias están influyendo de forma decisiva en la inversión y la operativa.
SLB, como proveedor esencial de tecnología y servicios, está adaptando su modelo de negocio para navegar en este entorno competitivo y sensible a los cambios globales. En resumen, la reducción en el gasto de los productores petroleros globales y los efectos de las tarifas comerciales representan un reto importante para SLB y el sector en general. La respuesta estratégica de la empresa incluye optimización de cadenas de suministro, ajustes en costos operativos, reestructuras internas y un análisis cuidadoso del mercado para identificar oportunidades de crecimiento en regiones con mejor desempeño. Este conjunto de acciones será determinante para mantener la competitividad en un mercado que exige flexibilidad y capacidad de adaptación constantes. La evolución de las dinámicas comerciales entre Estados Unidos y China, así como las condiciones políticas y económicas en regiones claves del mercado petrolero, serán factores a seguir de cerca para prever el rumbo del sector en los próximos años.
SLB se posiciona así en un punto crítico donde la innovación, la gestión eficiente y las alianzas estratégicas jugarán roles esenciales para sortear los desafíos presentes y futuros.