En un contexto donde el mercado del lujo enfrenta una ligera desaceleración global, Tapestry, la empresa propietaria de la icónica marca Coach, ha sorprendido a los analistas al elevar sus previsiones de ingresos y ganancias para el año 2025 por tercera vez en el año. Este movimiento se debe principalmente al auge en las ventas de sus bolsos Coach, que han mantenido una demanda robusta a precios completos, demostrando la solidez y atractivo continuo de la marca entre consumidores jóvenes y de diversas regiones, incluyendo Norteamérica, Europa y China. El éxito reciente de Tapestry no solo refleja la popularidad de los productos de Coach, sino también la astuta adaptación de la compañía a las tendencias actuales del mercado. Modelos como el bolso Tabby, Brooklyn y Empire han resonado especialmente bien entre las nuevas generaciones, gracias a una combinación de calidad, diseño contemporáneo y precios accesibles dentro del segmento de lujo asequible. Estos productos, cuyo rango de precios oscila desde 250 hasta 895 dólares, ofrecen a los consumidores una alternativa atractiva a las piezas de lujo ultra premium que requieren inversiones millonarias.
Un factor clave en la estrategia de Tapestry ha sido su enfoque en la venta a precio completo, evitando recurrir a descuentos agresivos. Esta práctica no solo mejora los márgenes de beneficio sino que también protege la percepción de exclusividad y valor de la marca. En esta coyuntura, la firma ha implementado aumentos selectivos de precios que han permitido incrementar los márgenes en aproximadamente 140 puntos básicos en comparación con el año anterior. Tal incremento evidencia la confianza del mercado en los productos Coach y en su capacidad para retener valor incluso en tiempos económicos inciertos. Además, la capacidad de Tapestry para gestionar su cadena de suministro ha jugado un papel crucial en su desempeño exitoso.
La producción de los bolsos Coach se lleva a cabo en países asiáticos como Vietnam, Camboya, Filipinas e India, lo que permite a la empresa diversificar sus fuentes y limitar la dependencia de un solo proveedor. Esta estrategia ha resultado particularmente beneficiosa considerando la incertidumbre generada por la puesta en vigor de nuevas tarifas en Estados Unidos a partir de abril de 2025. Al anticiparse a estos cambios, Tapestry pudo adelantar la importación de inventarios, reduciendo así el impacto económico negativo que normalmente tendrían estas medidas. La diversificación geográfica y la fortaleza operativa también han permitido a Tapestry enfrentar mejor la competencia dentro del sector del lujo, un mercado dominado por gigantes como LVMH y Kering, quienes han reportado retrocesos en algunas de sus líneas debido a la volatilidad del consumo global. La marca Coach se ha posicionado en un nicho atractivo, siendo percibida como una opción intermedia que atrae a los consumidores de alta gama que buscan lujo accesible, sin incurrir en los precios estratosféricos asociados a los bolsos de cinco cifras.
Este “punto dulce” en la cadena de valor del lujo ha generado un flujo constante de clientes nuevos y recurrentes. En términos financieros, las cifras recientes han sido contundentes. Las ventas netas trimestrales superaron los 1.580 millones de dólares, desafiando las expectativas del mercado que se situaban en torno a 1.530 millones.
Los beneficios por acción también se situaron por encima del consenso, alcanzando los 1,03 dólares frente a una estimación previa de 0,88 dólares. Estos resultados positivos se reflejaron en un alza en las acciones de Tapestry, que cerraron la jornada con un incremento del 5% a pesar de una previsión prudente para el último trimestre del año, influenciada por la incertidumbre macroeconómica global. Detrás del favorable desempeño de Coach, encontramos una campaña robusta de innovación que no solo abarca nuevos diseños sino también una estrategia de mercadotecnia afilada y dirigida. La firma ha sabido conectar con audiencias jóvenes mediante campañas digitales y colaboraciones especiales que potencian la visibilidad de la marca y fomentan el deseo de compra. Esta estrategia integral reafirma el valor de contar con un portafolio diverso y adaptable en el competitivo sector del retail de lujo.
El crecimiento de Tapestry también ha sido resistido gracias a su estructura productiva, que evita concentraciones riesgosas en proveedores específicos. Ningún proveedor representa más del 10% de las compras totales de inventario, lo que le confiere mayor flexibilidad y seguridad operativa en tiempos en los que la cadena global de suministro sigue siendo un reto por la pandemia y tensiones comerciales internacionales. Las perspectivas para Tapestry se mantienen optimistas, con la empresa proyectando unos ingresos anuales cercanos a los 6.950 millones de dólares, superior a la estimación previa que rondaba los 6.850 millones.
El beneficio esperado por acción también ha mejorado, estimándose alrededor de 5 dólares, cifra que representa un fortalecimiento respecto a la previsión anterior de entre 4,85 y 4,90 dólares por acción. En síntesis, Tapestry ejemplifica cómo una combinación de innovación constante, estrategia de precios inteligente y una gestión eficiente de la cadena de suministro puede generar un crecimiento sostenido incluso en un entorno global lleno de desafíos. La marca Coach se perfila no solo como un vehículo para el éxito financiero, sino también como un referente para entender el dinamismo y evolución del mercado del lujo contemporáneo. Para los consumidores y analistas por igual, el auge actual representa una oportunidad para observar cómo un título del lujo accesible puede consolidarse como un motor de crecimiento en la industria, con un claro enfoque en la demanda emergente de consumidores jóvenes y globalizados. Este incremento en la demanda de bolsos Coach también refleja una tendencia más amplia en el consumo de lujo, donde los clientes valoran cada vez más la autenticidad, la historia detrás de la marca y la calidad en relación a la inversión que realizan.
En un futuro próximo, será interesante seguir de cerca cómo Tapestry continúa innovando y aprovechando esa ventaja competitiva para mantener su posición destacada y seguir satisfaciendo las expectativas de un público exigente y cambiante.