Los mercados bursátiles de Estados Unidos experimentaron una sesión de apertura mixta el jueves 17 de abril de 2025, en un contexto marcado por la inestabilidad generada a raíz de la tensión en las negociaciones comerciales y las incertidumbres económicas globales. Los inversores, ansiosos por los avances o retrocesos en el ámbito de los aranceles, se vieron influidos por diversas noticias que impactaron directamente a índices clave como el Dow Jones Industrial Average, el S&P 500 y el Nasdaq Composite. Uno de los elementos que más llamó la atención fue el desplome significativo de las acciones de UnitedHealth, que arrastraron al Dow Jones a caer 500 puntos poco después de la apertura. Esta caída fuerte contribuyó a un sesgo bajista en el índice durante la jornada. Sin embargo, el comportamiento de los otros índices fue más variado: el S&P 500 y el Nasdaq Composite abrieron la sesión con ligeros avances, reflejando optimismo inicial especialmente tras la positiva publicación de las ganancias de TSMC, el gigante fabricante de chips, que anunció un aumento del 60% en sus ganancias netas del primer trimestre.
Esta noticia sirvió para dar un impulso momentáneo a las acciones tecnológicas y a los índices relacionados. A pesar de estas fluctuaciones, el sentimiento del mercado se mantuvo predominantemente cauteloso y algo pesimista debido a la persistente volatilidad y la incertidumbre que domina en el escenario económico actual. Los riesgos relacionados con la política arancelaria y la desaceleración del crecimiento económico continúan siendo factores de preocupación para los inversores, que evalúan cuidadosamente cada movimiento del mercado para tomar decisiones estratégicas. En medio de esta volatilidad, el expresidente Donald Trump volvió a captar la atención pública y de los mercados con un llamado contundente a la Reserva Federal para que actúe mediante una reducción de las tasas de interés. Trump criticó al presidente de la Fed, Jerome Powell, calificándolo de “siempre tarde y equivocado” en su gestión, argumentando que la entidad monetaria debe tomar medidas más rápidas y decisivas para estimular la economía y hacer frente a los efectos adversos de los aranceles.
Trump hizo estas afirmaciones a través de la plataforma Truth Social y no dejó pasar la oportunidad de señalar que mientras la Fed mantenía una postura más cautelosa, el Banco Central Europeo había implementado recientemente un recorte en las tasas de interés de 25 puntos básicos, reduciendo su tipo clave al 2.25%. Este contraste entre la política monetaria estadounidense y europea enfatizó su llamado para una acción más agresiva por parte de la Fed. Además, sugirió que Powell debería ser reemplazado cuanto antes para permitir un cambio en la dirección estratégica de la política económica. El impacto de estas declaraciones se sintió rápidamente en el mercado.
La semana había estado marcada por un fuerte retroceso en las acciones tecnológicas, con empresas clave como Nvidia registrando caídas significativas, lo que contribuyó a que el Dow Jones y el S&P 500 acumularan pérdidas semanales superiores al 1%, mientras que el Nasdaq, enfocado en tecnología, perdió hasta un 2.5% en los últimos cinco días. Todos estos factores se conjugaban en un contexto de semana de operaciones acortada, lo que añadía presión sobre los operadores para conseguir un cierre positivo y estable que mitigara las incertidumbres provocadas por los aranceles y la política monetaria. La tensión se mantuvo alta y los inversores se mantuvieron atentos a cualquier noticia que pudiese cambiar la tendencia en el corto plazo. Paralelamente, el mercado de criptomonedas reflejaba el estado general de ánimo de aversión al riesgo que reinaba entre los inversores.