La empresa brasileña WEG, reconocida internacionalmente como un gigante en la fabricación de motores eléctricos, enfrentó un primer trimestre del 2025 marcado por resultados que no alcanzaron las expectativas del mercado. A pesar de exhibir un crecimiento interanual en su beneficio neto del 16.4%, la compañía reportó cifras que estuvieron por debajo de lo previsto por los analistas, lo que generó preocupación entre inversionistas y especialistas del sector. Este escenario refleja no solo factores internos de desempeño, sino también una creciente incertidumbre en el contexto global que afecta su desempeño y proyecciones. WEG, que desarrolla una amplia gama de productos y soluciones en más de 40 países y mantiene plantas en 17 naciones, es un actor clave en la industria de motores eléctricos y equipos relacionados con la generación y transmisión de energía.
La empresa cerró el primer trimestre con una ganancia neta de 1.54 mil millones de reales brasileños, equivalentes a aproximadamente 274 millones de dólares. Si bien esta cifra representa un incremento frente al mismo periodo del año anterior, estuvo por debajo del consenso de 1.78 mil millones de reales que los analistas habían anticipado. Además, comparado trimestralmente, esto reflejó una caída de casi un 8.
8%, lo que llamó la atención sobre un desempeño decreciente frente al trimestre previo. La desaceleración del crecimiento se atribuye en parte a las complejidades del escenario económico mundial. WEG reconoció la incertidumbre vinculada a las tensiones geopolíticas y las condiciones macroeconómicas globales. Aunque la demanda sigue siendo positiva, la empresa señaló la necesidad de mantenerse alerta ante la volatilidad en los mercados internacionales y los posibles impactos que podrían derivarse. En este sentido, el contexto de las recientes políticas comerciales agresivas, particularmente las imposiciones arancelarias impulsadas por Estados Unidos bajo la administración del expresidente Donald Trump, sigue creando un clima de incertidumbre considerable para compañías con alta exposición a mercados globalizados, como es el caso de WEG.
La reacción del mercado a los resultados trimestrales fue inmediata y significativa. Tras el reporte, las acciones de WEG en la bolsa de Sao Paulo experimentaron una caída abrupta del 10.5%, situándose en 45.22 reales por acción. Ese descenso representó la principal pérdida dentro del índice Bovespa en la jornada, reflejando la preocupación de los inversionistas por la divergencia entre lo esperado y lo finalmente informado por la compañía.
Los analistas de JPMorgan señalaron que los resultados fueron más débiles de lo anticipado, destacando una desaceleración en el crecimiento de los ingresos provenientes del extranjero y un bajo desempeño en el beneficio operativo ajustado, medido a través del EBITDA, un indicador clave de la rentabilidad operativa. Más allá de los resultados trimestrales, WEG mantiene una perspectiva resiliente respecto a su modelo de negocio. La empresa enfatiza su diversificación y presencia global como fortalezas cruciales para enfrentar los ciclos de volatilidad. Su portafolio abarca no solo motores y generadores, sino también soluciones tecnológicas en segmentos con buen potencial a largo plazo, como la energía eólica y los equipos para grandes proyectos de infraestructura. Esta estrategia, junto con recientes adquisiciones, le ha permitido consolidar una base diversificada capaz de mitigar riesgos en periodos de turbulencia económica.
Uno de los aspectos destacados en el reporte fue el crecimiento en los negocios de ciclo largo, especialmente los equipos utilizados en proyectos como líneas de transmisión y parques eólicos. Este segmento representa una parte clave de la estrategia de crecimiento sostenible de la compañía, ya que está alineado con las tendencias globales de transición energética y demanda creciente de energías renovables. Sin embargo, pese a estos avances, las ventas netas alcanzaron 10.08 mil millones de reales en el primer trimestre, un incremento del 25.5% respecto al año previo, pero aún por debajo del pronóstico de los analistas, que había fijado la expectativa en 10.
49 mil millones de reales. Además, dicha cifra representó una caída del 6.9% respecto al trimestre inmediato anterior. Otro indicador que llamó la atención fue la disminución de la margen EBITDA a 21.6%, bajando 40 puntos base comparado con el mismo periodo del año anterior y también inferior al margen del 22.
1% reportado en los tres meses previos. Esta reducción puede atribuirse a presiones en costos y a la dinámica comercial en ciertos mercados internacionales, reflejando los desafíos que enfrenta la empresa para mantener altos niveles de rentabilidad en un entorno complejo. El panorama global que WEG enfrenta no es único. Muchas empresas multinacionales están reflejando la incertidumbre generada por tensiones geopolíticas, volatilidad en economías emergentes, y cambios en regulaciones comerciales. La guerra comercial impulsada por las políticas arancelarias estadounidenses ha generado disrupciones en cadenas de suministro y aumentos en costos de producción, afectando particularmente a industrias que dependen de exportaciones e importaciones estratégicas.
La capacidad de WEG para navegar este entorno volátil será crucial para sus resultados futuros. En términos estratégicos, la compañía ha demostrado interés en fortalecer segmentos con mayor potencial de crecimiento a largo plazo, incluyendo tecnologías limpias y productos destinados a infraestructura energética avanzada. Este enfoque no solo responde a cambios globales en la matriz energética sino también a necesidades de modernización de redes eléctricas en mercados emergentes, donde WEG tiene una importante presencia. La diversificación regional también es un factor determinante. La compañía no segmenta sus ventas por país sino por regiones, lo que permite un equilibrio natural de riesgos frente a fluctuaciones en determinadas economías.
No obstante, esta estrategia también exige una gestión sofisticada y adaptativa frente a variaciones regulatorias y comerciales en distintas áreas geográficas. El contexto macroeconómico global permanece desafiante. La inflación en varias regiones, las fluctuaciones en tasas de interés, y la incertidumbre política continúan generando un ambiente de cautela entre los inversores y empresarios. En este sentido, movimientos de política monetaria en grandes economías y negociaciones comerciales de alto nivel serán pasajes claves para observar la evolución del mercado donde opera WEG. Por su parte, los analistas sugieren que, pese a los resultados decepcionantes del primer trimestre, la compañía cuenta con fundamentales sólidos y una estructura de costos que le permitirá mantener competitividad y crecimiento sostenible.