Marriott International, una de las cadenas hoteleras más grandes y reconocidas del mundo, ha anunciado una ligera reducción en sus expectativas de ganancias para el año 2025. Esta decisión responde a una desaceleración observada en la demanda de viajes a nivel global, que ha comenzado a afectar tanto el turismo de ocio como el corporativo. Aunque la empresa registró resultados sólidos durante el primer trimestre del año, los ejecutivos han adoptado una postura cautelosa para afrontar los desafíos económicos que se perfilan en los próximos meses. Durante los primeros tres meses de 2025, Marriott reportó un aumento del 4.1 % en los ingresos por habitación disponible (RevPAR, por sus siglas en inglés), un indicador clave que refleja la rentabilidad en la industria hotelera.
Este crecimiento fue impulsado por un incremento del 3.3 % en las zonas de Estados Unidos y Canadá, acompañado de un aumento más significativo del 5.9 % en los mercados internacionales. Estos resultados reflejan el vigor con el que se ha retomado el movimiento turístico tras los impactos de la pandemia, especialmente en regiones fuera de Norteamérica. En términos financieros, Marriott alcanzó un ingreso neto de 665 millones de dólares durante el primer trimestre, con un ingreso neto ajustado que llegó a 645 millones.
Las ganancias diluidas por acción se situaron en 2.39 dólares, mientras que las ganancias diluidas ajustadas por acción fueron de 2.32 dólares. Asimismo, el EBITDA ajustado, que mide la rentabilidad antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización, alcanzó los 1.220 millones de dólares para el período.
Estos indicadores evidencian la solidez financiera que aún mantiene la compañía, a pesar del entorno más incierto. Sin embargo, los directivos de Marriott señalaron que comienzan a detectarse presiones en la demanda global de viajes. La combinación de riesgos macroeconómicos, volatilidad en los mercados y posibles cambios en los patrones de consumo turísticos han llevado a la empresa a ajustar a la baja su previsión de crecimiento de ingresos para lo que resta del año. Esta revisión refleja un escenario más moderado para los sectores de ocio y corporativo, que son fundamentales para la rentabilidad de la cadena hotelera. Pese a esta moderación en las expectativas, la estrategia de crecimiento y expansión de Marriott continúa firme.
Durante el primer trimestre del año, la compañía sumó aproximadamente 12,200 habitaciones netas nuevas, lo que representa un aumento del 4.6 % respecto al mismo período de 2024. Además, el pipeline global de desarrollo de hoteles sigue robusto, con casi 3,800 establecimientos y más de 587,000 habitaciones en diferentes fases de planeación o construcción. Esta cifra representa un crecimiento anual del 7.4 %, señalando que los desarrolladores y franquiciados mantienen un interés sostenido en invertir y expandir la marca a nivel mundial.
Especialmente en mercados internacionales de alta demanda, Marriott concentra sus esfuerzos estratégicos. Los incrementos de RevPAR que han superado a los del continente americano demuestran que existen focos que ofrecen grandes oportunidades para seguir capitalizando el crecimiento, aun cuando la economía global presente desafíos. Los ejecutivos de la empresa continúan expresando confianza en los fundamentos a largo plazo de la industria turística, destacando que la actual volatilidad es más una fase de moderación que un retroceso definitivo. La política de retorno de capital a los accionistas sigue siendo un pilar importante en la gestión de Marriott. Durante el primer trimestre, la empresa recompró 2.
8 millones de acciones comunes por un monto aproximado de 800 millones de dólares. Para finales de abril, la suma total devuelta a los inversionistas, vía dividendos y recompra de acciones, superó los 1,200 millones. Esta estrategia proporciona valor adicional a los accionistas y refleja la confianza de la compañía en su flujo de caja y estabilidad financiera. Desde una perspectiva macroeconómica, la preocupación radica en las señales de enfriamiento del turismo mundial, debido a factores como la inflación persistente, la incertidumbre geopolítica y cambios en el comportamiento de los viajeros. Muchos consumidores y empresas están adoptando una mayor cautela en sus gastos y planes, afectando los niveles de reservaciones y estancias.
Esto ha llevado a que empresas como Marriott ajusten sus pronósticos para mantener expectativas realistas y adaptarse a un mercado cambiante. No obstante, la fortaleza de Marriott radica en su diversificación global y capacidad para adaptarse a diferentes segmentos del mercado. La cartera de marcas y destinos abarca desde opciones de lujo hasta estadías más accesibles, lo que permite una flexibilidad que no poseen muchos competidores. Además, su extensiva red de franquicias y socios facilita la continua expansión incluso en momentos de incertidumbre. En conclusión, aunque Marriott ha optado por una revisión a la baja en su guía financiera para el 2025 debido a una moderación en la demanda turística global, la empresa sigue en una posición sólida.
El robusto crecimiento en los ingresos por habitación disponible durante el primer trimestre, la expansión constante de su pipeline hotelero y el compromiso con el retorno a los accionistas son indicadores claros de una compañía que está gestionando con prudencia los retos actuales sin perder de vista las oportunidades a largo plazo. La industria del turismo, a pesar de los altibajos, mantiene una perspectiva optimista basada en cambios continuos en las preferencias de los viajeros y el dinamismo de los mercados internacionales. Marriott, con su amplio alcance y experiencia, se posiciona para navegar esta fase de cambio y aprovechar el crecimiento cuando la demanda se recupere plenamente.