En un paso decisivo hacia la regulación del mercado de stablecoins, el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos ha aprobado la propuesta legislativa conocida como Stablecoin Transparency and Accountability for a Better Ledger Economy Act, o más abreviadamente, la Ley STABLE. Esta legislación busca establecer un conjunto de reglas claras y rigurosas para la emisión y supervisión de stablecoins respaldadas en dólares, respondiendo a la creciente influencia de estos activos digitales en el sistema financiero global. La votación en el comité, celebrada recientemente, concluyó con 32 votos a favor y 17 en contra, marcando un avance significativo después de intentos previos que enfrentaron obstáculos políticos y desacuerdos sobre la participación del gobierno federal en el proceso regulatorio. La iniciativa está siendo impulsada principalmente por el presidente del comité, el representante francés Hill, junto con el representante Bryan Steil, ambos republicanos que han abogado por una regulación que apoye la innovación tecnológica y la competitividad internacional. La Ley STABLE busca introducir estándares estrictos en torno a la reserva de capital que debe respaldar cada stablecoin, asegurando que exista una paridad uno a uno entre el valor emitido y las reservas en dólares reales, lo que es fundamental para mantener la confianza del mercado y la estabilidad financiera.
Además, la propuesta impone requisitos de capital y salvaguardas contra el lavado de dinero, aspectos cruciales para mitigar riesgos asociados con los delitos financieros y proteger a los consumidores. El discurso durante la audiencia subrayó la importancia de no solo regular, sino hacerlo de forma que los Estados Unidos mantengan su rol preeminente en la innovación financiera global. El representante Hill destacó que la tecnología blockchain está revolucionando la manera en que el dinero circula y que los reguladores deben adaptarse con flexibilidad a estos cambios para evitar rezagos que puedan resultar en pérdidas de competitividad frente a otras regiones del mundo. No obstante, la ley ha generado debate intenso. La oposición liderada por figuras como la representante Maxine Waters, demócrata de California, ha expresado preocupaciones sobre la posibilidad de que esta regulación beneficie intereses políticos vinculados al sector cripto.
Waters argumenta que la legislación podría ser utilizada por actores con conflictos de interés para moldear las reglas a su favor, lo que subraya la necesidad de transparencia y supervisión efectiva. Un tema particularmente debatido ha sido el tratamiento de emisores extranjeros de stablecoins, como Tether, que operan con gran presencia internacional. La Ley STABLE propone un período de gracia transitorio de dos años para que estos emisores puedan alinearse con las normativas estadounidenses, mientras que el Senado sostiene una posición más estricta a través de la llamada Ley GENIUS, que limita la entrada de nuevos emisores extranjeros en el mercado estadounidense, aunque permite la circulación de tokens ya existentes en mercados secundarios. La industria también ha participado activamente en la discusión. Dante Disparte, director de estrategia de Circle — empresa creadora del USDC, una de las stablecoins más reconocidas—, ha manifestado apoyo al proyecto de ley, resaltando que impulsará la posición de Estados Unidos en la economía digital global.
Curiosamente, Circle anunció su intención de salir a bolsa apenas un día antes de la votación, reforzando la importancia del entorno regulatorio para el desarrollo y la confianza en estos activos. Desde la Reserva Federal, el presidente Jerome Powell ha reiterado su respaldo a la plataforma regulatoria para stablecoins, enfatizando la necesidad de proteger tanto a los consumidores como a los ahorradores, al tiempo que se permite la innovación financiera. Sus declaraciones en audiencias senatorias reflejan una visión institucional que busca equilibrar la innovación y la seguridad en este mercado emergente. Además del impacto inmediato en la regulación de stablecoins, el Comité de Servicios Financieros contempla avanzar en un proyecto complementario que atienda la estructura de mercado más amplia, aspecto que podría converger y fortalecer la propuesta principal. Como lo describió el representante Steil, ambos proyectos se complementan y serán fundamentales para establecer un ecosistema financiero digital sólido y coherente.