En el contexto de la conferencia telefónica para comunicar los resultados del primer trimestre de PepsiCo, un momento curioso y revelador captó la atención de analistas y medios: la CEO de la compañía, Ramon Laguarta, fue sorprendido por una pregunta directa e inteligente realizada por una joven de apenas 13 años. Milena Gajrawala, hija de un analista de Jefferies, tuvo la oportunidad de preguntar durante la sesión, en el marco de la iniciativa “Bring Your Kid to Work Day”, que promueve llevar a los hijos al trabajo para que conozcan el entorno profesional de sus padres. Sin embargo, en lugar de una pregunta común o sencilla, Milena señaló un asunto crucial y de relevancia estratégica para PepsiCo y el sector alimentario en general: el impacto de los tratamientos con medicamentos GLP-1 en el comportamiento del consumidor y, por tanto, en las ventas de snacks y productos relacionados. Los medicamentos GLP-1, o agonistas del péptido similar al glucagón tipo 1, están revolucionando el campo de la pérdida de peso y el control del apetito. Estas terapias funcionan mediante la supresión del hambre y la regulación del metabolismo, ayudando a millones de personas a reducir su ingesta de alimentos y, como consecuencia, a perder peso.
Un avance significativo en este segmento es el desarrollo de formas orales del fármaco, como el orforglipron desarrollado por Eli Lilly, que representa un potencial crecimiento en la adopción de estos medicamentos debido a la comodidad que ofrecen en comparación con las inyecciones tradicionales de fármacos como Ozempic. La pregunta de Milena fue directa: ¿qué piensa PepsiCo respecto al lanzamiento de los medicamentos orales GLP-1, previsto para el próximo año, y cómo esto podría afectar al consumo de sus productos? El CEO Laguarta no evadió la consulta y respondió con seriedad y claridad. Reconoció que la empresa estaba consciente de los desafíos que estas medicinas representan para la industria, ya que al reducir el apetito y las cantidades consumidas, inevitablemente podrían afectar la demanda de snacks y alimentos procesados. PepsiCo se encuentra en un momento en que debe innovar y adaptar sus estrategias para mantener la relevancia y la preferencia del consumidor en un mercado que cambia rápidamente a raíz de tendencias de salud y bienestar. Laguarta destacó que una de las formas en que PepsiCo está enfrentando este reto es a través de la comercialización de porciones más pequeñas y productos diseñados para satisfacer a consumidores que buscan opciones más controladas y saludables.
La oferta de snacks en porciones reducidas, disponibles en multipacks o empaques que promueven un consumo moderado, es una apuesta para continuar siendo parte del repertorio de los consumidores, incluso aquellos que adoptan hábitos alimenticios más cuidadosos o que incorporan medicamentos que controlan el apetito. Además, Laguarta mencionó que PepsiCo está invirtiendo en soluciones que promueven la salud a través del aumento en el consumo de fibra y productos que favorecen la hidratación, ambos aspectos alineados con las demandas actuales del mercado y con el interés de muchos consumidores por llevar un estilo de vida saludable. Estos esfuerzos reflejan un reconocimiento claro de la empresa de que debe transformar su portafolio y comunicarse mejor con un público cada vez más informado y consciente de los efectos de sus elecciones alimentarias. El impacto potencial de los medicamentos GLP-1 en la industria alimentaria es significativo. A medida que más personas adoptan estas terapias, la demanda por productos tradicionales con altos contenidos calóricos podría disminuir, afectando a grandes compañías como PepsiCo y otros fabricantes de snacks.
Esta presión obliga a la industria a replantear su enfoque hacia la innovación, desarrollo de productos más saludables y adaptados a las nuevas realidades del consumidor. El diálogo generado por la joven Milena Gajrawala no solo sorprendió por la profundidad de la pregunta, sino que también refleja un cambio generacional en la conciencia sobre la salud, el bienestar y la sostenibilidad. Los niños y adolescentes de hoy crecen en un ambiente donde la información sobre nutrición, medicamentos y estilos de vida saludables están más al alcance que nunca. Este fenómeno influye no solo en ellos mismos, sino también en las decisiones de mercado y en la necesidad de las compañías de escuchar y responder a estos nuevos intereses y preocupaciones. Por otro lado, la interacción destacada entre el CEO de PepsiCo y la joven fue vista como un momento positivo de apertura y transparencia durante la conferencia de resultados.
En un entorno donde las preguntas suelen ser técnicas y financieras, la inclusión del cuestionamiento de una menor de edad aportó frescura, profundidad y recordó que detrás de los números existen consumidores reales, con comportamientos que cambian aceleradamente. Este ejemplo también demuestra cómo los eventos corporativos pueden servir para conectar temas emergentes —como los avances en la medicina para la pérdida de peso— con las estrategias y respuestas de empresas líderes, creando un diálogo enriquecedor que beneficia a diferentes audiencias, desde inversionistas hasta consumidores atentos. En definitiva, el impacto de los medicamentos GLP-1 representa un punto de inflexión para la industria alimentaria, invitando a gigantes como PepsiCo a repensar y reformular sus modelos de negocio y portafolios de producto. La respuesta de Ramon Laguarta durante esta llamada trimestral muestra una empresa que reconoce estos cambios y está dispuesta a adaptarse e innovar en busca de seguir siendo relevante en un mundo donde la salud y el bienestar ganan cada vez más protagonismo. En conclusión, la inesperada pregunta de una joven de 13 años durante la llamada de resultados de PepsiCo no solo fue un momento anecdótico, sino también una señal clara de los desafíos y las oportunidades que enfrentan las compañías alimentarias ante la llegada de nuevas terapias como los medicamentos GLP-1.
La innovación en productos, el enfoque en porciones controladas y el compromiso con la salud son claves para mantenerse competitivos en un mercado que demanda cada vez más responsabilidad y adaptación. PepsiCo, a través de las palabras de su CEO, ha mostrado que está prestando atención a estos cambios y que continúa trabajando para ofrecer soluciones que respondan a las necesidades de los consumidores del futuro.