En un mundo donde la comunicación es esencial para el desarrollo social y profesional, las barreras que enfrentan las personas sordas y con dificultades auditivas siguen siendo un desafío fundamental. Aunque existen más de 70 millones de personas sordas o con pérdida auditiva que utilizan alguna modalidad de lengua de señas en todo el mundo, la escasez de intérpretes especializados limita su participación plena en diversas situaciones cotidianas. Frente a este panorama, una innovadora startup británica llamada Silence Speaks ha desarrollado una solución tecnológica basada en inteligencia artificial para crear avatares que interpretan la lengua de señas, revolucionando la accesibilidad para estas comunidades y ofreciendo una herramienta esencial que puede integrarse en múltiples entornos y aplicaciones. Silence Speaks surge como respuesta directa a la insuficiencia de intérpretes humanos en contextos como hospitales, estaciones de transporte, oficinas o escuelas, donde la comunicación efectiva puede marcar la diferencia entre la inclusión y la exclusión social. La empresa, fundada hace poco más de tres años por Pavan Madduru, un veterano en arquitectura de IA para chatbots, nació tras una experiencia personal que evidenció la dificultad de su amigo sordo para acceder a una comunicación fluida durante sus viajes.
Este impulso humano y tecnológico llevó al desarrollo de un sistema capaz de traducir texto en lengua de signos británica (BSL) a través de un avatar digital que no solo replica los signos, sino que también incorpora matices emocionales e intencionales, haciendo que el mensaje sea mucho más que una simple transcripción visual. El desafío técnico para crear un avatar de lengua de señas no es trivial. Las lenguas de señas no son universalmente iguales; existen más de 200 lenguas de signos diferentes en el mundo, cada una con su estructura, vocabulario y particularidades regionales. Aunque el inglés y el español, por ejemplo, pueden compartir words; sus lenguas de señas son totalmente distintas. Silence Speaks identificó la complejidad tras descubrir que incluso dentro del Reino Unido, el ritmo y la forma de signar variaban considerablemente entre ciudades como Edimburgo, Southampton y Birmingham, reflejando dialectos y jergas intrínsecas a las comunidades.
Para abordar esto, el equipo cuenta con un grupo de ingenieros sordos y expertos en BSL para entrenar la inteligencia artificial con datasets que incluyen no solo la variedad lingüística sino también aspectos emocionales y contextuales. De esta manera, el avatar no solo reproduce movimientos manuales, sino que también integra expresiones faciales y movimientos corporales que son esenciales para la correcta interpretación y comprensión de la lengua de signos. Esta integración de características no manuales es fundamental porque junto con las señas, la comunicación efectiva en BSL depende mucho de las expresiones faciales y del tono corporal, elementos que muchas tecnologías previas no lograban capturar adecuadamente. Actualmente, la plataforma funciona en la nube y permite transformar textos en BSL, aunque la traducción no es en tiempo real. Sin embargo, Silence Speaks trabaja para avanzar hacia una versión capaz de operar en dispositivos móviles con traducción instantánea, lo que significaría un asistente personal, prácticamente un intérprete en el bolsillo, disponible en cualquier momento y lugar.
Este avance es especialmente valioso en ámbitos donde la comunicación espontánea es crítica. Además de traducir el texto, la plataforma también incluye funcionalidades complementarias, como subtitulado para usuarios sordos que aún están aprendiendo la lengua de signos o para aquellos que no la utilizan, ampliando así el rango de accesibilidad. Este enfoque inclusivo demuestra la intención de la empresa de atender a toda la diversidad dentro de la comunidad sorda. Otro aspecto innovador es la posibilidad de crear avatares personalizados, que pueden variar desde personajes fotorrealistas hasta caricaturas o incluso personajes animados icónicos. Esta flexibilidad permite a empresas, organizaciones y usuarios individuales escoger un estilo que facilite la identificación del público objetivo y, a la vez, proporcione una experiencia estética agradable.
El ejemplo de la creación de un avatar basado en una fotografía real, aunque presentó algunos desafíos en la parte facial, mostró cómo la tecnología puede adaptar su diseño para personas reales, aumentando la sensación de autenticidad en la comunicación. Las aplicaciones prácticas de esta tecnología ya están siendo puestas a prueba. Silence Speaks ha establecido una alianza con Transport for London para implementar su avatar en las más de 250 estaciones del Metro de Londres. A través de códigos QR en pantallas o señalizaciones, los usuarios sordos pueden acceder a vídeos en lengua de signos con la información más reciente, como anuncios de trenes y cambios en el servicio, brindando una experiencia de viaje mucho más accesible e independiente. Esta colaboración demuestra cómo la tecnología de inteligencia artificial puede integrarse en infraestructuras públicas para mejorar la vida cotidiana de millones de personas.
De igual manera, la tecnología ha sido adoptada por una empresa de tarjetas de felicitación que utiliza los avatares para crear mensajes personalizados en lengua de señas, lo que añade una dimensión emocional y humana a las felicitaciones tradicionales y promueve la inclusión en ámbitos sociales muy variados. El compromiso con la comunidad sorda es manifiesto en todo el proceso de desarrollo. La startup cuenta con ingenieros sordos y colabora estrechamente con lingüistas para asegurar que la traducción y la expresión de la lengua de signos sean fieles y respetuosas, justamente porque los intentos anteriores por automatizar esta modalidad muchas veces se han visto criticados por la falta de autenticidad o imprecisión en los gestos. Este rigor permite a Silence Speaks construir una plataforma que no solo funciona técnicamente, sino que también es bienvenida y aprobada por los propios usuarios. La inclusión social y laboral es uno de los grandes retos que enfrenta la comunidad sorda.
Según estadísticas en el Reino Unido, un alto porcentaje de profesionales sordos enfrentan exclusión o dificultades en sus empleos debido a barreras comunicativas. La integración de un intérprete digital accesible podría transformar la experiencia laboral, romper prejuicios y abrir oportunidades que antes parecían limitadas. Asimismo, en el ámbito educativo, existen cerca de 50,000 estudiantes sordos en el sistema escolar británico, muchos de los cuales no reciben asistencia continua por intérpretes, pues estos recursos suelen estar limitados. La tecnología permitirá que estos jóvenes tengan acceso a una comunicación más fluida durante todo el tiempo de clase, coadyuvando a una educación más equitativa. Aunque Silence Speaks no es la única empresa intentando mejorar la accesibilidad para personas sordas, su enfoque en avatares con capacidades emocionales y adaptabilidad regional marca una diferencia significativa.
Otros desarrollos, como gafas inteligentes con subtítulos o dispositivos auditivos mejorados, ofrecen alternativas que, en conjunto, enriquecen el ecosistema accesible y permiten a cada persona elegir la herramienta que mejor se adapte a sus necesidades y preferencias. En el panorama legal y social, el reconocimiento oficial de la lengua de signos en el Reino Unido y la llegada de personas influyentes a la dirección de la empresa, como Chloe Smith, ex secretaria de Estado para Ciencia, Innovación y Tecnología, refuerzan la importancia y relevancia de contar con tecnologías que apoyen la inclusión. Smith ha sido una firme defensora del reconocimiento legal de la lengua de signos y ahora impulsa desde la empresa el compromiso con derribar las barreras que enfrentan las personas sordas en la vida diaria. Sin embargo, existen voces críticas dentro de la comunidad que cuestionan la verdadera capacidad de la tecnología para traducir con precisión y naturalidad, señalando que, en algunos casos, el maquillaje digital sobre videos no ofrece la calidad necesaria para una comunicación sin fricciones. Estas críticas son importantes porque remarcan la necesidad de seguir trabajando con expertos sordos y mejorar constantemente la autenticidad y precisión de los avatares.