La posibilidad de un ETF (fondo cotizado en bolsa) de Solana ha capturado el interés de muchos inversores y entusiastas de las criptomonedas, especialmente tras la aprobación de los ETFs de Bitcoin y Ethereum en Estados Unidos en 2024. Sin embargo, la realidad es que, a pesar de las esperanzas, un ETF de Solana podría estar más lejos de convertirse en una realidad de lo que muchos desean. El año 2024 ha sido fundamental para el ecosistema de criptomonedas, ya que la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) finalmente aprobó los ETFs de Bitcoin y Ethereum, lo que provocó un aumento significativo en la capitalización y el interés del mercado.
Este ambiente de optimismo ha llevado a la comunidad a preguntarse: ¿será Solana la siguiente en conseguir su propio ETF? Aunque la aprobación reciente de un ETF de Solana en Brasil podría parecer un indicio positivo, los desafíos regulatorios en Estados Unidos son significativos. Solana, que ha crecido rápidamente desde su lanzamiento en 2020, ha demostrado ser una plataforma robusta y eficaz para contratos inteligentes, similar a Ethereum, pero con la diferencia de una mayor velocidad y menores costos de transacción. Esto la convierte en un candidato atractivo para un ETF, pero la SEC ha sido cautelosa en cuanto a la aprobación de estos instrumentos financieros para activos que todavía están bajo un marco regulatorio incierto. Un punto crucial en el debate sobre la regulación de los ETFs ha sido determinar la naturaleza legal de las criptomonedas. ¿Son commodities o valores? La SEC ha dejado claro que si una criptomoneda puede ser manipulada por una entidad corporativa, podría haber problemas serios relacionados con un ETF que la respalde.
En este sentido, las preocupaciones sobre la manipulación de precios son válidas, ya que los ETFs son considerados valores y no sería posible construir un fondo seguro en torno a un activo cuyo estatus legal no esté claro. A diferencia de otras criptomonedas que han mostrado serias controvertencias en su manejo, Solana parece estar en una posición más privilegiada por su alta capitalización de mercado y uso creciente. La reciente aprobación del ETF de Solana en Brasil ha provocado un interés renovado en este activo. Sin embargo, la experiencia con el ETF de Ethereum ha sido dispar; a pesar de su madre en su lanzamiento, ha enfrentado flujos de salida significativos, lo que hace que los inversores se pregunten si un ETF de una criptomoneda más pequeña como Solana tendría éxito. ¿Qué pasa si el ETF de Solana sufre el mismo destino que su contraparte más grande? Esta incertidumbre es uno de los factores que complican su posible aprobación en EE.
UU. El panorama para una aprobación de un ETF de Solana en Estados Unidos es complicado. Jeffery Balchunas, analista de Bloomberg y experto en ETFs, comentó que las posibilidades de aprobación son muy bajas; incluso llegó a decir que Solana tiene “una posibilidad de nieve en el infierno” de obtener dicha aprobación a menos que haya cambios significativos dentro de la SEC. La SEC rechazó el intento de CBOE de asegurar un ETF de Solana antes de que pudieran comenzar a manejar fechas límite críticas, lo que indica que la postura de la SEC es conservadora, por no decir negativa, hacia este tipo de productos. A pesar de este pesimismo, algunos expertos siguen albergando esperanzas.
CBOE ha presentado peticiones para el ETF en nombre de VanEck y 21Shares, y Matthew Sigel, jefe de investigación de activos digitales en VanEck, cree que el entorno podría cambiar. Sigel ha mencionado un precedente legal que podría ser relevante: un caso de 2018 entre la CFTC y My Big Coin, donde se argumentó que el token era un activo tipo commodity. Si este estándar se pudiera aplicar a Solana, podría calificar para un ETF spot. Sin embargo, la lucha por conseguir un ETF de Solana es aún larga. Brazo regulador como la CFTC pueden ser una vía más fácil, ya que tienen criterios menos estrictos para los ETFs de futuros en comparación con un ETF spot.
Esto podría significar que, aunque el camino hacia un ETF de Solana puede ser complicado, a corto plazo un ETF de futuros de Solana podría tener más oportunidades de éxito. Este tipo de producto podría ofrecer a los inversores una vía para interactuar con Solana sin las complicaciones del ETF spot. Con el año electoral de 2024, ambos partidos políticos en EE. UU. están buscando atraer a los entusiastas de las criptomonedas con promesas de una regulación más amigable.
Sin embargo, aunque se produzcan resultados favorables de las elecciones, los cambios regulatorios llevarán tiempo y, por lo general, es difícil prever cómo se desarrollarán estas dinámicas. Desde un punto de vista del mercado, los defensores del ETF de Solana deberían observar de cerca no solo el desempeño de su ETF en Brasil, sino también cómo reaccionan los capitales a la integración de estos productos en un marco regulatorio más amplio. La aprobación de un ETF de futuros podría ser un punto de inflexión, así como la claridad en cuanto a la clasificación de Solana como un activo tipo commodity. En conclusión, aunque el interés en un ETF de Solana persiste, es fundamental reconocer que aún estamos lejos de su aprobación en Estados Unidos. Si bien existe una lucha legítima y un fuerte deseo de que los ETFs de criptomonedas se integren en el sistema financiero más tradicional, las normas y regulaciones aún deben evolucionar.
Aunque los escenarios pueden cambiar, la comunidad detrás de Solana ha demostrado su capacidad para superar obstáculos, y aunque la tarea que tienen por delante es monumental, el sentido de comunidad y las innovaciones en el espacio de criptomonedas continúan impulsando las esperanzas de que un ETF de Solana pueda, algún día, volverse realidad. Hasta entonces, los aficionados y los inversores deben permanecer informados y ser pacientes. La historia de Solana y su camino hacia un ETF es solo una parte de un relato más amplio sobre la evolución de las criptomonedas y su lucha por ser reconocidas y aceptadas en el sistema financiero global.