En un movimiento estratégico de gran envergadura, Cantor Fitzgerald ha anunciado su asociación con la empresa detrás de la stablecoin más grande del mundo, Tether, y el gigante inversor japonés SoftBank Group, para lanzar un emprendimiento conjunto valorado en 3.6 mil millones de dólares. Esta alianza marca un paso significativo en la consolidación del ecosistema cripto y demuestra el creciente interés que grandes actores tradicionales de la bolsa están manifestando hacia el mercado de las criptomonedas, especialmente el Bitcoin. El proyecto engloba la fusión del vehículo financiero conocido como Cantor Equity Partners con una nueva entidad denominada Twenty One Capital. Esta última iniciará operaciones con una tenencia impresionante de más de 42,000 bitcoins, lo que la posiciona como la tercera mayor reserva corporativa de Bitcoin a nivel mundial.
La valoración utilizada para esta operación se basa en un precio cercano a los 85,000 dólares por bitcoin, destacando la confianza de los involucrados en la fortaleza y el potencial de esta criptomoneda. La iniciativa surge en un momento clave, en el que se anticipa una posible expansión del interés y la adopción de las criptomonedas bajo la administración del entonces presidente estadounidense, Donald Trump. Se espera que las políticas que promuevan una regulación más favorable para los activos digitales impulsen un crecimiento sólido y estructurado en este sector emergente. Este factor, sumado a la experiencia y respaldo financiero de las tres entidades, genera expectativas positivas en los mercados. Twenty One Capital se presenta como una entidad cuyo objetivo no es simplemente competir en el mercado de valores, sino construir uno nuevo, ideado y dirigido por la comunidad Bitcoin.
Jack Mallers, cofundador y CEO de Twenty One, ha expresado con claridad esta misión: la intención es crear un espacio público en bolsa que refleje el espíritu y los valores de quienes impulsan el ecosistema bitcoin, asegurando además la transparencia y el compromiso con los inversionistas y usuarios. No obstante, el proyecto toma como modelo el éxito de otras firmas ya consolidadas que han elevado considerablemente su valor gracias a la tenencia de bitcoins, particularmente después de acontecimientos políticos que han generado confianza en el crecimiento de este activo digital. Un ejemplo notable es Michael Saylor y su empresa Strategy, que acumula la mayor reserva corporativa de bitcoins con más de 538,000 unidades, alcanzando un valor de mercado aproximado de 91 mil millones de dólares tras un auge derivado de las condiciones políticas recientes. En términos financieros, la contribución directa de Tether al nuevo joint venture representa unos 1.6 mil millones de dólares en bitcoins.
Además, Bitfinex, una plataforma de intercambio relacionada con Tether, aporta cerca de 600 millones, mientras que SoftBank añade 900 millones de dólares a la ecuación. Para fortalecer la estructura del proyecto, se busca también levantar 585 millones adicionales mediante bonos convertibles y financiamientos en acciones, mezclando así distintas herramientas para captar capital. Desde una perspectiva de mercado, los analistas hablan de Bitcoin como un refugio ante los riesgos económicos globales y destacan su papel como un almacén de valor emergente para esta nueva era digital. En los últimos seis meses ha mostrado un crecimiento superior al 40%, una señal clara del creciente interés en activos alternativos fuera de las finanzas tradicionales. Sin embargo, eventos como la escalada de tensiones comerciales impulsadas por Trump han provocado volatilidad y caídas temporales, evidenciando que, aunque el potencial es alto, existen riesgos inherentes al contexto geopolítico y macroeconómico actual.
Expertos como Matt Mena, estratega de investigación cripto en 21Shares, subrayan que las actuales condiciones globales hacen imperativo el desarrollo de una reserva de valor digital capaz de ofrecer estabilidad y confiabilidad. Bitcoin, ante sus características descentralizadas y limitación de emisión, se perfila como el candidato ideal para desempeñar ese rol, en franca competencia con activos tradicionales como el oro, que en períodos de incertidumbre también ha alcanzado precios récord. Entre los aspectos que fortalecen la alianza destaca la relación duradera entre Tether y Cantor Fitzgerald, que se ha traducido en una alianza basada en la confianza y el manejo eficiente de activos. Cantor administra una parte sustancial de las reservas denominadas en dólares que Tether utiliza para respaldar su stablecoin; de hecho, el 99% de los bonos del Tesoro de Estados Unidos en posesión de Tether están custodiados con Cantor. Esto no solo asegura transparencia, sino que también optimiza la gestión financiera e incrementa la seguridad para inversores y usuarios.
Con esta unión, Twenty One Capital se prepara para debutar en el Nasdaq bajo el símbolo "XXI", lo que le permitirá acceder a un mercado amplio y regulado, generando mayores oportunidades de inversión y distribución de su proyecto. Este paso también simboliza la apertura y profesionalización del mercado cripto, al integrarse con los circuitos financieros tradicionales y facilitar la entrada a inversores institucionales y particulares. A largo plazo, esta colaboración puede significar un punto de inflexión en la percepción y adopción de las criptomonedas a escala global. La participación de grandes entidades financieras y tecnológicas como Cantor Fitzgerald y SoftBank, sumadas al impulso de Tether, proporciona un respaldo sólido que impulsa la legitimidad del ecosistema y su integración en la economía mundial. El proyecto también representa una oportunidad para diversificar las ofertas existentes en el mercado financiero, ampliando las alternativas para quienes busquen una exposición legítima y regulada al Bitcoin sin necesidad de gestionar directamente la compra y almacenamiento de estos activos digitales.