En Cape Coral, Florida, un pequeño estudio de fisioterapia ha encontrado una forma singular de brindar consuelo y apoyo a sus pacientes: un perro de tres patas. Este canino, llamado PT, se ha convertido en el alma de Apex Physical Therapy, un negocio familiar dirigido por Joe y Angie McGilvrey. Con su energía contagiosa y su espíritu indomable, PT no sólo alivia el dolor físico de los pacientes, sino que también les ofrece un mensaje poderoso de esperanza. PT llegó a la vida de los McGilvrey hace seis años, cuando fue rescatado de un refugio para animales. Originalmente conocido como Petey, el perro sufrió una grave lesión que llevó a los veterinarios a tomar la difícil decisión de amputarle una de sus patas traseras.
Sin embargo, aquellos que se encuentran con él no ven un animal que sufre, sino a un compañero lleno de vida y amor. “Cuando llegamos al veterinario, no sabíamos qué nombre ponerle”, recuerda Angie. “Así que, cuando nos pidieron que lo nombráramos, decidimos dejarlo como Petey en honor a su historia, pero las iniciales ‘PT’ nos hicieron pensar que sería perfecto para él, ya que iba a ser un perro de terapia”. Desde entonces, PT ha logrado tocar muchas vidas, brindando consuelo a pacientes que atraviesan procesos de rehabilitación. En Apex Physical Therapy, PT juega un papel crucial.
Durante las sesiones de fisioterapia, los pacientes a menudo se sienten nerviosos o incómodos, especialmente cuando se enfrentan a métodos como las agujas de acupuntura o el secado del dolor. “PT tiene esta increíble habilidad de percibir el estado emocional de las personas”, dice Joe. “Cuando alguien está asustado o ansioso, él sabe que necesita acercarse y acurrucarse al lado de la persona para que puedan acariciarlo y relajarse”. La elección de tener un perro de terapia como parte del equipo no es coincidencia. Los beneficios de la terapia asistida con animales están bien documentados.
Los animales pueden ayudar a disminuir la ansiedad, promover la sociabilidad y facilitar la curación emocional. PT no solo actúa como un compañero; él es un recordatorio tangible de que la adversidad se puede superar incluso cuando te enfrentas a desafíos significativos. La relación entre PT y los pacientes va más allá de las sesiones de terapia física. Joe y Angie han llevado al perro a escuelas, donde los niños pueden leerle, una actividad que no solo beneficia a los alumnos en su crecimiento personal y emocional, sino que también ayuda a PT a interactuar con un número diversificado de personas. A menudo, los niños eligen un libro específico y lo leen repetidamente a PT, creando una conexión especial entre ellos y el perro.
El impacto de PT también ha inspirado a los McGilvrey a contar su historia de una manera más amplia. Recientemente, escribieron un libro titulado “PT Runs Free”, un relato infantil que narra la vida de PT y su viaje desde el refugio hasta convertirse en un perro de terapia. La historia no solo habla de superación y valentía, sino que también busca sensibilizar sobre la importancia de la adopción de mascotas y los beneficios de la terapia asistida con animales. “Siempre quisimos que el libro transmitiera un mensaje poderoso”, dice Angie. “El tema principal de la historia es ‘nunca te rindas’.
Queremos que los lectores, ya sean niños o adultos, entiendan que todos enfrentamos dificultades, pero tenemos el poder de superarlas”. A través de esta narrativa, los McGilvrey han logrado recaudar fondos para organizaciones de rescate animal en el suroeste de Florida, lo que ha permitido ayudar a muchos animales necesitados. El impacto de PT va más allá de lo emocional; es un símbolo de resiliencia. Cuando los pacientes llegan a la clínica y ven a un perro que ha superado su propia lucha, sienten que ellos también pueden superar las suyas. La persistencia de PT es un testimonio palpable del poder del amor, la dedicación y la esperanza.
Para aquellos que asisten a la terapia en Apex, PT no es solo una fuente de confort, sino que se ha convertido en un amigo. “Hay algo en la manera en que se acerca a las personas”, comparte un paciente. “Te hace sentir más en control y menos ansioso. Es como si supiera exactamente lo que necesitas en ese momento”. Los pacientes han relato que su presencia puede cambiar por completo el ambiente de la clínica, llevando sonrisas en momentos difíciles.
El trabajo de los McGilvrey con PT ha llamado la atención de la comunidad, generando un aumento en las visitas a su clínica, así como un aumento en el interés por la.