El ecosistema de las finanzas descentralizadas o DeFi, a pesar de su potencial revolucionario para redefinir las finanzas tradicionales, se enfrenta una vez más a la realidad de su vulnerabilidad ante ataques cibernéticos. En las últimas semanas, dos protocolos importantes, Loopscale y Term Finance, fueron víctimas de hackers que robaron una suma conjunta aproximada de 7 millones de dólares. Estos incidentes no solo han generado preocupación en la comunidad cripto, sino que también ponen de manifiesto la necesidad urgente de reforzar la seguridad en estos proyectos emergentes. Loopscale, un protocolo basado en la blockchain de Solana, sufrió una pérdida de aproximadamente 5.8 millones de dólares.
El ataque se originó debido a una falla en el sistema de valoración de colaterales, específicamente en la valoración de activos basados en un mecanismo denominado RateX, aunque este sistema en sí no fue comprometido. Esta vulnerabilidad permitió al atacante obtener préstamos bajo colateralización que no deberían haber sido autorizados, afectando principalmente los cofres de USDC y SOL del protocolo. Este ataque a Loopscale es de particular gravedad dado que ocurrió apenas dos semanas después del lanzamiento oficial del protocolo. La pérdida representa cerca del 12% del valor total bloqueado en la plataforma, lo que refleja el impacto significativo de la brecha en la confianza de los usuarios y en la integridad del sistema. Tras la detección del problema, Loopscale detuvo momentáneamente todas sus operaciones para realizar una evaluación exhaustiva del daño y tomar medidas correctivas.
El cofundador de Loopscale, Mary Gooneratne, informó públicamente sobre el incidente y explicó que se identificó claramente la causa raíz del incidente. En un esfuerzo por mitigar las pérdidas, la plataforma ofreció una recompensa del 10% de los fondos robados a quien devuelva el 90% restante, a la vez que lanzó una advertencia legal para el atacante en caso de no recibir respuesta para el 28 de abril. Paralelamente, Loopscale colabora con firmas de seguridad y autoridades legales para investigar el caso y tratar de recuperar los fondos dañados. Por otro lado, Term Finance, un protocolo Ethereum pionero en préstamos fijos escalables, perdió aproximadamente 1.5 millones de dólares debido a un error relacionado con una actualización defectuosa de su oráculo tETH.
A diferencia del caso de Loopscale, Term Finance no experimentó una explotación directa a nivel de contratos inteligentes, sino que el problema se originó en la función de liquidación afectada por la información errónea proporcionada por el oráculo. El equipo de seguridad blockchain TenArmorAlert detectó actividades sospechosas vinculadas a Term Labs, que permitieron a un atacante realizar liquidaciones indebidas al gastar una cantidad muy pequeña de ETH, aprovechando la actualización fallida. Term Finance pudo contener el problema dentro de los mercados que utilizan el token tETH y aseguró a los usuarios que el resto de los fondos permanecen a salvo. Además, comprometió un plan de reembolso completo para aquellos afectados por esta vulnerabilidad. Estos ataques forman parte de una tendencia preocupante que ha marcado el año 2025, donde se han registrado pérdidas cercanas a los 2 mil millones de dólares en proyectos de criptomonedas, especialmente en protocolos DeFi.
A comienzos del año, la plataforma Bybit enfrentó un ataque masivo con pérdidas de cerca de 1.46 mil millones de dólares, afectando a miles de usuarios y profundizando la preocupación respecto a la seguridad en este ecosistema. La constante aparición de vulnerabilidades ha llevado a expertos a cuestionar si las altas rentabilidades ofrecidas por estos protocolos realmente justifican el riesgo de posibles hackeos y pérdidas. Tim Haldorsson, fundador de Lunar Strategy, expresó sus dudas sobre la verdadera seguridad y sostenibilidad de las ganancias en DeFi en comparación con inversiones tradicionales como los bonos. En su opinión, una vez ajustados los rendimientos por las pérdidas ocasionadas por ataques, las ganancias en DeFi podrían no ser tan atractivas ni seguras como se piensa.
Estos eventos no solo dañan la reputación del sector, sino que también generan un efecto dominó en la confianza de inversores y usuarios, lo que puede ralentizar la adopción masiva de tecnologías basadas en blockchain y DeFi. Sin embargo, también han impulsado a los desarrolladores y a la industria en general a fortalecer las medidas de seguridad, mejorar la auditoría de contratos inteligentes, y establecer protocolos de respuesta rápida ante incidentes. Es crucial para los usuarios de DeFi tomar precauciones adicionales, como diversificar sus inversiones, estudiar cuidadosamente los protocolos antes de interactuar con ellos, y estar atentos a actualizaciones y alertas de seguridad. Además, la creciente colaboración entre plataformas, firmas de seguridad y reguladores promete ser un pilar fundamental para aumentar la transparencia y robustez del sector. En resumen, aunque la innovación tecnológica en DeFi continúa avanzando a un ritmo acelerado, los recientes robos en Loopscale y Term Finance demuestran que aún existen brechas significativas en la seguridad de estos ecosistemas.
La comunidad y los desarrolladores deben aprender de estos incidentes para implementar mejores prácticas, reforzar la confianza y asegurar que el futuro de las finanzas descentralizadas sea tanto prometedor como seguro para todos sus participantes.
