En un mundo cada vez más conectado y dependiente de la tecnología móvil, la capacidad para rastrear dispositivos perdidos representa una herramienta imprescindible para millones de usuarios. Apple, consciente de esta necesidad, ha elevado el nivel de protección y accesibilidad con su función 'Buscar' o 'Find My', que en iOS 15 incorpora una característica fascinante: el iPhone puede ser localizado aun cuando esté apagado. Esta innovación es posible gracias a una combinación de hardware y software cuidadosamente diseñados, y representa un avance significativo en la tecnología móvil, aunque también genera un debate importante sobre seguridad y privacidad. Para comprender cómo funciona 'Buscar' cuando el iPhone está apagado, es necesario adentrarse en el concepto del procesador siempre activo, conocido en inglés como Always-on Processor (AOP). A diferencia del procesador principal del dispositivo, que se apaga para ahorrar energía, el procesador siempre activo permanece encendido constantemente, gestionando eventos en tiempo real y, sobre todo, manteniendo activas ciertas funciones clave sin consumir demasiada batería.
Este procesador está equipado con un sistema operativo en tiempo real llamado RTKitOS, un software ligero y eficiente que controla no solo sensores de movimiento, sino también la interacción con otros chips esenciales, incluyendo el Bluetooth, el Wi-Fi y el GPS. Esa conexión profunda con otros componentes permite que el AOP actúe como una especie de vigilante silencioso, reconociendo eventos específicos y despertando el sistema operativo principal solo cuando es necesario. En el caso de 'Buscar', cuando apagas tu iPhone, el dispositivo en realidad no se apaga completamente. El procesador siempre activo sigue funcionando, permitiendo que el chip de Bluetooth continúe transmitiendo señales Bluetooth Low Energy (BLE) específicas para que otros dispositivos Apple cercanos puedan detectarlo. Estas señales contienen anuncios especiales que utilizan claves secretas vinculadas al Apple ID del usuario, lo que garantiza que la ubicación del dispositivo pueda actualizarse y ser enviada al propietario sin exponer información personal.
Esta función también depende de chips específicos fabricados por Broadcom que cuentan con un firmware capaz de ejecutar aplicaciones IoT en modo de bajo consumo, conocido como modo lpm (low power mode). Por ejemplo, en los iPhone 11, 12 y 13, el chip Bluetooth lleva un parche denominado mpaf que implementa un servicio GATT Bluetooth LE utilizado para esta finalidad. Este software integrado en el hardware es el que posibilita la transmisión de señales incluso cuando el sistema operativo principal del iPhone está inactivo. Sin embargo, no todos los dispositivos compatibles con iOS 15 soportan esta funcionalidad de igual manera. Algunos modelos, como el iPhone SE 2020 o ciertos modelos de iPad Air, no cuentan con el parche mpaf en el firmware del Bluetooth, por lo que no muestran el diálogo de 'Buscar' activo tras apagar el dispositivo ni actualizan la ubicación con esta función.
Por otro lado, la gestión de la privacidad y la seguridad es una prioridad para Apple al implementar esta característica. Las señales BLE enviadas por el dispositivo apagado están cifradas y cambian regularmente para evitar un seguimiento no deseado por terceros. El sistema de 'Buscar' está diseñado para que ni siquiera Apple pueda conocer la ubicación exacta de los dispositivos, y se utiliza una red descentralizada donde otros iPhones, iPads y Macs retransmiten la información de manera anónima y segura. A pesar de estas protecciones, el hecho de que el Bluetooth siga activo mientras el dispositivo parece apagado ha abierto la puerta a preocupaciones sobre privacidad y seguridad. Expertos en seguridad han señalado que dado que el firmware del chip Bluetooth no está firmado en algunos casos, un atacante con acceso avanzado podría instalar malware específicamente diseñado para funcionar en bajo consumo, haciendo que el modo lpm se convierta en un vector de ataque persistente a nivel hardware.
Además, hay que tener en cuenta que la función 'Buscar' deja de funcionar cuando Bluetooth se desactiva a través del menú de configuración. Es decir, activar el modo avión no necesariamente apaga Bluetooth. Para que realmente deje de emitir las señales BLE que permiten la localización, es necesario apagar Bluetooth manualmente en ajustes, lo que deshabilita también la capacidad de transmisión en modo bajo consumo. Pero, ¿qué papel juega el procesador seguro (Secure Enclave) en todo esto? En el iPhone, las claves secretas usadas para autenticar y cifrar los anuncios BLE se almacenan de forma segura en este procesador, garantizando una robusta protección contra accesos no autorizados. Contrariamente al AirTag, donde una versión simplificada del chip U1 se encarga del almacenamiento de claves, el iPhone utiliza el Secure Enclave para mantener un nivel superior de seguridad en la gestión de estas claves y asegurar la integridad del sistema.
Para el usuario final, esta característica ofrece la tranquilidad de poder rastrear un dispositivo perdido, apagado e incluso con la batería casi agotada, lo que antes era imposible sin una conexión de red activa. Dispositivos cercanos pueden detectar las señales BLE y, mediante la red 'Buscar', enviar de manera anónima la ubicación al propietario, aumentando las posibilidades de recuperación. Desde la perspectiva tecnológica, la implementación de esta función representa un perfecto equilibrio entre funcionalidad y eficiencia energética. El uso del procesador siempre activo y la capacidad del chip Bluetooth de funcionar en modo bajo consumo permiten mantener esta capacidad ininterrumpida sin impactar significativamente la duración de la batería. Esta innovación, sin embargo, también nos invita a reflexionar sobre la naturaleza de nuestros dispositivos móviles y su potencial de seguimiento constante.
La función 'Buscar' es solo una pieza dentro del ecosistema que puede rastrear un smartphone: la red celular, el Wi-Fi, el Bluetooth, el GPS y otras tecnologías trabajan conjuntamente y pueden ser fuentes potenciales de seguimiento. En conclusión, la magia del procesador siempre activo y la gestión inteligente del firmware Bluetooth han permitido que el iPhone revolucione la forma en que se protege y localiza un dispositivo, incluso estando apagado. Esta característica destaca la experiencia y el compromiso tecnológico de Apple para ofrecer soluciones prácticas a los usuarios, sin perder de vista la privacidad y seguridad, aunque siempre queda espacio para mejoras y cautela. A medida que esta tecnología evoluciona, es fundamental que los usuarios conozcan cómo funcionan estos sistemas y cómo pueden gestionar sus ajustes para proteger su privacidad según sus necesidades.