En un giro significativo en la dinámica electoral de Estados Unidos, un nuevo sondeo de USA TODAY/Suffolk University revela que los votantes de bajos ingresos están cambiando su lealtad hacia Kamala Harris en lugar de apoyar a Donald Trump. Este cambio de tendencia se ha observado especialmente entre los votantes que ganan menos de 20,000 dólares al año, con un apoyo que se eleva al 58% para la vicepresidenta frente al 35% para el ex presidente. Este notable aumento de apoyo se produce en un contexto donde, en junio pasado, Trump había superado a Biden por tres puntos entre este grupo demográfico. La encarnación de la esperanza para muchos votantes de bajos ingresos, Kamala Harris ha logrado captar el interés y apoyo de comunidades afroamericanas, hispanas y de ingresos limitados. Daigre Thomas, una trabajadora de salud de Connecticut, expresa que, hasta el anuncio de la candidatura de Harris, se mostraba indecisa.
"Ya no tenemos que explicarle nuestra realidad. Ella es parte de nosotros, y sé que se preocupa por lo que enfrentamos, especialmente por los niños", afirma Thomas, destacando la conexión personal que siente con la vicepresidenta. Uno de los factores clave que ha impulsado esta nueva ola de apoyo hacia Harris es su ascenso al lugar de candidata presidencial, tras la decisión de Joe Biden de no buscar la reelección. Los votantes, que en su mayoría provienen de entornos desfavorecidos, ven en la trayectoria de Harris una representación auténtica de sus luchas y desafíos diarios. A medida que se hace eco de promesas relacionadas con la accesibilidad de la vivienda, el aumento del crédito tributario por hijos y medidas contra lo que califica como abuso de precios en productos de primera necesidad, Harris ha comenzado a consolidar su posición como una opción viable para aquellos que, tradicionalmente, han sentido que sus necesidades no han sido atendidas por los políticos en el poder.
El sondeo también revela que el apoyo a Harris se extiende más allá de los votantes de bajos ingresos. Los votantes de ingresos moderados, aquellos que ganan menos de 50,000 dólares, también han mostrado una preferencia por la vicepresidenta, que lidera a Trump por un pequeño margen de tres puntos. Este aumento en la popularidad de Harris se ha visto impulsado por una serie de factores, incluida su actuación en la Convención Nacional Demócrata, donde tuvo la oportunidad de presentarse y conectar con un electorado ansioso por cambios significativos. El cambio en la percepción de Harris también se refleja en su clasificación de favorabilidad, que ha aumentado un 16% desde junio, pasando del 37% al 53% entre los votantes de bajos ingresos. Este aumento es significativo, ya que demuestra cómo la narrativa en torno a Harris ha evolucionado y ha sido recibida con entusiasmo por aquellos que buscan candidatos que realmente entiendan sus realidades.
Los sociólogos y analistas políticos han señalado que la base de votantes de bajos ingresos está compuesta mayormente por jóvenes que comienzan a entrar al mercado laboral o ancianos en una situación económica precaria. David Paleologos, director del Centro de Investigación Política de la Universidad Suffolk, argumenta que la familiaridad y el reconocimiento de la historia personal de Harris han ayudado a generar esta conexión. "Los votantes mayores, que a menudo se sientan frente a la televisión, han sido influenciados por figuras como Michelle Obama y Bill Clinton, que han hablado positivamente sobre Harris", dice Paleologos. Lo que es aún más notable es el aumento del apoyo de los votantes afroamericanos, que ha saltado un 17% desde el apoyo que tenían hacia Biden. Esta vez, el respaldo a Harris ha alcanzado el 64%.
Este sentimiento es especialmente fuerte entre aquellos que sienten que Harris representa no solo sus esperanzas políticas, sino también su identidad cultural. La comunidad negra ha encontrado en Harris a una aliada en cuyos antecedentes y logros pueden verse reflejados. Sin embargo, no todos están convencidos. Algunos votantes todavía sienten desencanto respecto a las opciones en el paisaje político actual. John Pike, un jubilado de Madison, Wisconsin, que actualmente vive con 18,000 dólares al año, menciona su falta de interés inicial en participar en las elecciones: "Cuando se trata de Biden y Trump, no sentía que ninguno de ellos fuera una buena opción".
Sin embargo, añade que "Kamala Harris parece ser una mujer muy inteligente. Ha demostrado ser una fiscal capaz, un buen fiscal del distrito y una buena vicepresidenta", lo que sugiere que, aunque algo escéptico, Pike ve destellos de esperanza en la candidatura de Harris. Mientras la campaña se intensifica y las elecciones se acercan, la capacidad de Harris para aguantar este impulso será crucial. Hasta ahora, ha sabido navegar hábilmente las tensiones y oportunidades del electorado moderno, en un momento en el que la economía sigue siendo un tema candente en la mente de muchos votantes. Esto incluye su enfoque en el costo de vida, donde ha prometido medidas concretas para hacer frente al aumento de precios en productos de primera necesidad, que afectan desproporcionadamente a los hogares de bajos ingresos.