Meta, la gigante tecnológica reconocida por su impulso en el campo de la realidad virtual y aumentada, ha comenzado a realizar un proceso de despidos en su división Reality Labs, la cual es responsable del desarrollo de hardware y software relacionado con sus dispositivos de realidad virtual, principalmente los auriculares Quest. Este movimiento afecta a un área clave para la visión del futuro de la compañía: la realidad mixta. Los últimos informes indican que el recorte de personal no se limita a una sola unidad, sino que impacta especialmente a los equipos dentro de Oculus Studios, el brazo de desarrollo interno de Meta que crea juegos y aplicaciones para sus dispositivos Quest. Entre los productos afectados se encuentra Supernatural, un juego de fitness en realidad virtual que Meta adquirió por más de 400 millones de dólares y que ha sido una de las apuestas significativas de la empresa en cuanto a contenido para sus plataformas. Esta aplicación no sólo ha sido importante por su popularidad, sino también porque Meta tuvo que defender su adquisición frente a un caso antimonopolio.
La empresa ha declarado que estos cambios responden a la necesidad de trabajar de manera más eficiente para crear las experiencias futuras de fitness y entretenimiento en realidad mixta. Según un portavoz de Meta, el reajuste en la estructura y roles dentro de Oculus Studios busca precisamente optimizar la entrega de contenido innovador sin perder la calidad que los usuarios actuales esperan. Es destacable que, aunque algunos equipos están siendo reducidos, la compañía reafirma su compromiso con la inversión en experiencias de realidad mixta, consolidando su interés en el desarrollo de juegos y aplicaciones enfocadas en la salud y el bienestar dentro de este ecosistema. No obstante, la información oficial no contempla detalles precisos sobre cuántos empleados han sido afectados o qué otras áreas podrían estar enfrentando recortes. La decisión de Meta ocurre en un contexto donde las ventas de sus dispositivos Quest no han alcanzado plenamente las expectativas.
A pesar del lanzamiento reciente del Quest 3S, que incluso ha visto descuentos en ciertos modelos, el dispositivo no ha logrado un despegue significativo en el mercado frente a las dificultades generales en la adopción masiva de realidad virtual. Por otro lado, otras divisiones dentro de Meta, como la desarrolladora de gafas inteligentes Ray-Ban Stories, han mostrado un desempeño comercial más favorable, superando las proyecciones iniciales. Este hecho podría estar influyendo en la decisión de focalizar recursos en sectores con mayor potencial de crecimiento inmediato, mientras se reestructura Reality Labs para alinearse con las nuevas prioridades empresariales. Los despidos dentro de una de las áreas más innovadoras de Meta reflejan también la tendencia general de la industria tecnológica, en la que empresas grandes ajustan sus labores de investigación y desarrollo, priorizando proyectos con retornos más evidentes a corto plazo. Esta dinámica ha provocado movimientos similares en compañías que invierten en tecnologías emergentes, con recortes para estabilizar sus modelos de negocio.
Para los empleados y desarrolladores que aún permanecen en Reality Labs, el desafío será el de adaptarse a una estructura más eficiente pero también a un entorno de trabajo más exigente, donde las expectativas sobre la calidad y la innovación siguen siendo altas a pesar de la reducción de recursos humanos. Meta sigue apostando a la realidad mixta como uno de sus pilares estratégicos a largo plazo, un campo que combina realidad virtual y aumentada para crear experiencias más integradas y naturales para los usuarios. Desde el punto de vista del consumidor, estos cambios podrían significar una ralentización en la frecuencia de lanzamientos o actualizaciones de ciertos títulos y aplicaciones relacionadas con fitness y juegos en Quest, pero también la posibilidad de que Meta concentre su talento en proyectos con mayor potencial transformador. En última instancia, la visión de Mark Zuckerberg y su equipo es continuar liderando el mercado emergente de la realidad mixta, aunque con una gestión más selectiva de sus recursos. Además, la adquisición de Supernatural y el esfuerzo para mantener ese producto dentro de su ecosistema ha sido un paso relevante para Meta en el terreno del fitness inmersivo, un nicho que busca aprovechar el atractivo de la realidad virtual para fomentar hábitos saludables.