En el dinámico ecosistema de las criptomonedas, la custodia segura y compatible con regulaciones es un elemento fundamental para el crecimiento y la adopción institucional. Ante este escenario, Ripple Custody ha dado un paso significativo al anunciar el soporte para tokens HBAR de Hedera Hashgraph mediante una innovadora billetera compartida basada en la tecnología Multi-Party Computation (MPC). Esta solución no solo amplía las capacidades de la plataforma para gestionar activos en distintas criptomonedas y blockchains, sino que también está respaldada por un estudio académico riguroso que certifica su funcionamiento y seguridad. Ripple Custody se ha consolidado como un referente en la custodia de activos digitales, ofreciendo transferencia segura y control confiable en un entorno que exige altos estándares regulatorios. La integración del token HBAR, nativo de la red Hedera, fortalece su posición como una plataforma capaz de manejar una amplia gama de activos digitales en un único ecosistema, aportando flexibilidad y eficiencia a los inversionistas institucionales que buscan diversificar sus carteras en varios protocolos.
La investigación presentada en la renombrada revista Future Internet refleja la capacidad técnica y arquitectónica del sistema para la gestión de activos distribuida, utilizando el concepto de billetera MPC compartida. Esta tecnología rompe con el modelo tradicional de custodia, evitando la concentración de claves privadas en una sola entidad, lo que representa un riesgo significativo. En lugar de ello, implementa un esquema de firma de umbral (Threshold Signature Scheme, TSS), que fragmenta el control de la clave entre tres partes esenciales: el cliente, el proveedor de custodia y el gestor patrimonial. Esta división garantiza que ninguna parte esté en posición de comprometer la integridad o acceso sin la cooperación colectiva, mitigando el riesgo de un punto único de falla. Este diseño no solo contribuye a la seguridad, sino que también incorpora herramientas indispensables para cumplir con las normativas vigentes.
La billetera permite establecer listas blancas para transacciones, límites de retiro y autorizaciones basadas en funciones específicas dentro de la organización, facilitando una gobernanza clara y auditables adaptados a las exigencias regulatorias actuales, tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea. Un avance notable dentro de las características integradas es la inclusión del protocolo de recuperación descentralizada, conocido como DeRec. Este protocolo elimina la dependencia de la tradicional frase semilla, que históricamente ha sido un punto vulnerable para la pérdida o robo de acceso a criptomonedas. En lugar de almacenar o recordar esta frase, los datos de recuperación están encriptados y distribuidos entre nodos auxiliares descentralizados. Esta arquitectura protege a los usuarios contra usos no autorizados y facilita la recuperación segura de credenciales, lo que añade una capa crítica de resistencia y confiabilidad para el manejo de portafolios institucionales.
Con la reciente adición de Hedera a su plataforma, Ripple Custody amplía considerablemente su alcance más allá de tokens conocidos de Ethereum y XRP Ledger (XRPL). La capacidad de manejar activos sobre múltiples cadenas permite a los gestores y bancos privados optimizar la diversificación y la gestión integral de portafolios de inversión, incluyendo valores tokenizados, bonos digitales y otros activos basados en blockchain, sin sacrificar el cumplimiento regulatorio y la seguridad. Este soporte multichain representa un paso clave para los inversionistas institucionales, que demandan soluciones que combinen flexibilidad con transparencia y regulación estricta. La billetera compartida de MPC de Ripple Custody está diseñada para soportar complejidades y demandas propias de fondos de cobertura, bancos privados y gestores de patrimonio, que deben operar dentro de marcos legales en constante evolución. La compatibilidad con contratos inteligentes y las herramientas automatizadas de cumplimiento integradas aseguran que las operaciones se ajusten a las normativas locales e internacionales, minimizando riesgos legales y facilitando auditorías rigurosas.
Además, estas funciones simplifican el proceso de integración para organizaciones que buscan digitalizar su gestión patrimonial y operativa sin comprometer la seguridad ni la conformidad. En cuanto al modelo de monetización, Ripple Custody adopta un enfoque convencional adecuado a servicios profesionales de custodia: cobra tarifas por listado, administración de activos bajo custodia, transacciones y rendimiento. Esto permite a la plataforma sostener servicios especializados como staking, préstamos y provisión de liquidez, todo ello sin delegar el control a intermediarios como exchanges o custodios tradicionales, manteniendo la integridad y autonomía de las operaciones. Los beneficios de esta integración llegan en un momento relevante para el sector cripto, donde la gestión institucional y la interoperabilidad entre cadenas son necesidades prioritarias. La colaboración académica con institutos de prestigio, como el Centro de Tecnologías Blockchain de UCL y la Fundación Ciencia Exponencial, aporta credibilidad científica y práctica, validando la solución no solo desde el punto de vista tecnológico sino también estratégico para el mercado institucional.