La empresa brasileña Embraer, uno de los fabricantes de aviones más importantes a nivel global, ha reafirmado su perspectiva para el año 2025, manteniendo sus objetivos de entregas y resultados financieros a pesar de los retos derivados de los aranceles impuestos por Estados Unidos. Este anuncio ha sido recibido con atención en la industria aeronáutica, ya que refleja la resiliencia y capacidad de adaptación de una compañía que compite en un sector altamente competitivo y globalizado. En una conferencia telefónica con analistas, Francisco Gomes Neto, CEO de Embraer, destacó que aunque los aranceles establecidos por el gobierno estadounidense han ejercido cierta presión sobre sus operaciones, el impacto ha sido limitado hasta ahora. La empresa ha logrado mitigar las consecuencias de estas medidas a través de su estrategia de contenido estadounidense y la reestructuración de ciertas líneas de producción para adaptarse mejor a las condiciones comerciales actuales. El fabricante brasilero, conocido por sus aviones comerciales y jets ejecutivos, planea entregar entre 77 y 85 aeronaves comerciales a lo largo de 2025.
Además, espera que las entregas de su división de aviación ejecutiva oscilen entre 145 y 155 unidades, un dato significativo que pone de manifiesto la robustez del segmento ejecutivo frente a la turbulencia comercial. Uno de los aspectos importantes que ha permitido a Embraer enfrentar los aranceles es el hecho de que una parte considerable de la producción de sus jets ejecutivos, en particular los modelos Phenom y Praetor, cuenta con componentes estadounidenses. Esto inicialmente proporcionó una especie de amortiguador financiero, aunque también fue necesario realizar cambios en sus operaciones para reducir la exposición y el riesgo asociados a estos modelos específicos frente a la guerra comercial. El impacto financiero, en términos de márgenes operativos, se calcula en una reducción estimada de alrededor de 90 puntos básicos durante el año en curso, un efecto relativamente moderado dado el contexto. Para contrarrestar los efectos adversos, Embraer ha implementado medidas adicionales de reducción de costos y optimización en sus procesos, demostrando un compromiso claro con la eficiencia y la sostenibilidad de su negocio.
La postura de Embraer respecto a los aranceles de EE. UU. es clara y alineada con la visión de la industria. Gomes Neto expresó con firmeza la petición para que se restablezca la política de cero aranceles en el sector aeronáutico, una práctica que se mantuvo vigente durante décadas y que favoreció el comercio mundial y la integración industrial en la aviación. La globalización y la intrincada cadena de suministro en este sector requieren un entorno sin barreras comerciales para fomentar la innovación y competitividad.
Respecto a los resultados económicos reportados por Embraer en el primer trimestre de 2025, la compañía mostró un crecimiento en ingresos netos del 23% en comparación con el mismo periodo del año anterior, alcanzando 1,100 millones de dólares. Este rendimiento representa el mejor primer trimestre desde el año 2016, lo que indica una recuperación sólida y un posicionamiento favorable en el mercado. En términos de rentabilidad, los resultados ajustados antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) más que se duplicaron, alcanzando aproximadamente 108.6 millones de dólares. La margen EBITDA subió considerablemente, pasando de un 5.
2% a un 9.8%, reflejando mejoras en la eficiencia operativa y en la gestión financiera. Sin embargo, a pesar de estos indicadores positivos, Embraer registró una pérdida ajustada por acción de 0.40 dólares, contrarrestando las expectativas del mercado que anticipaban ganancias por acción de 0.01 dólares.
Esta discrepancia llevó a que los analistas de grandes instituciones como Citi consideraran que, pese a este desfase, la operación subyacente de la empresa sigue siendo sólida y prometedora. En el mercado de valores, las acciones de Embraer en la bolsa de Sao Paulo experimentaron una leve caída del 1% después del anuncio, pese a que el índice general Bovespa mostró un crecimiento del 0.2% en la misma jornada. Esto refleja la sensibilidad del mercado ante resultados que no cumplen del todo con las expectativas, aunque a largo plazo la tendencia sigue siendo positiva para la compañía. La estrategia de Embraer para mantener su competitividad en un entorno complicado se basa además en la diversificación de su portafolio, atendiendo tanto el mercado de aviones comerciales como el de jets ejecutivos, este último considerado menos vulnerable a factores externos como los aranceles y las tensiones comerciales.
La compañía continúa evaluando escenarios posibles para adaptar su cadena de suministro y localización de producción en las diferentes regiones, buscando minimizar los riesgos geopolíticos y comerciales. Este enfoque proactivo es fundamental en un mercado donde las decisiones políticas y económicas pueden cambiar rápidamente las reglas del juego. Desde una perspectiva global, el sector aeronáutico enfrenta desafíos significativos, como la ralentización del crecimiento económico, la sostenibilidad ambiental y las fluctuaciones en la demanda de viajes aéreos. Embraer tendrá que continuar adaptándose a estos cambios para sostener su crecimiento y mantener su posición como uno de los fabricantes más relevantes del mundo, justo detrás de gigantes como Airbus y Boeing. El llamado de Embraer para eliminar las barreras arancelarias también tiene resonancia internacional, ya que varios países y empresas coinciden en que la globalización y las cadenas de suministro integradas requieren políticas comerciales que favorezcan la libre circulación de bienes, especialmente en sectores tan especializados y estratégicos como la aviación.