En el dinámico mundo del software de código abierto, los proyectos deben navegar no sólo los desafíos técnicos, sino también cuestiones legales y de gobernanza que pueden definir su futuro. El sistema de mensajería NATS, ampliamente utilizado en entornos cloud y microservicios, protagonizó recientemente una situación que puso en jaque su continuidad bajo un modelo verdaderamente abierto. Sin embargo, la reciente resolución entre la Cloud Native Computing Foundation (CNCF) y Synadia promete no sólo resolver tensiones, sino también sentar las bases para un desarrollo más colaborativo y sustentable. NATS es una solución ligera, de alta performance y escalable que se convirtió en un estándar para la mensajería en arquitecturas distribuidas, especialmente aquellas que requieren baja latencia y alta confiabilidad. Originado y mantenido por Synadia, este proyecto fue donado en 2018 a la CNCF con el objetivo de que se beneficiara del ecosistema, comunidad y gobernanza que dicha fundación promueve.
Sin embargo, con el paso del tiempo, Synadia expresó insatisfacción ante ciertos aspectos del manejo del proyecto, así como por la falta de apoyo financiero sustancial proveniente de los principales usuarios de NATS bajo la tutela de CNCF. En un movimiento inesperado, Synadia planteó la posibilidad de retirar NATS de la gobernanza de CNCF y cambiar la licencia original Apache 2.0 por la Business Source License (BSL) para los futuros lanzamientos del software. Esta decisión generó un debate importante dentro de la comunidad tecnológica. La transición de una licencia abierta a una más restrictiva causó preocupación entre los usuarios, que temían la posible pérdida de acceso abierto y la aparición de dominios exclusivos o versiones de pago que podrían fragmentar la comunidad.
La propuesta desencadenó una respuesta rápida y firme por parte de CNCF, que recordó la importancia de la neutralidad empresarial y del control comunitario en los proyectos donados a fundaciones abiertas. Según su reglamento y misión, los proyectos donados deben transferir la propiedad de marcas y derechos relevantes — incluyendo el uso de dominios y repositorios oficiales — a la Linux Foundation para asegurar un ambiente libre de influencias unilaterales. La tensión escaló cuando Synadia no cumplió con finalizar la transferencia de la marca NATS, dando origen a una disputa legal que amenazaba con paralizar o dividir el proyecto. Gracias a una serie de negociaciones intensas y la voluntad de ambos actores por mantener la salud del ecosistema cloud native, CNCF y Synadia lograron llegar a un acuerdo a inicios de mayo de 2025. Este pacto es especialmente relevante porque revierte la trayectoria conflictiva y abre la puerta a una colaboración más estrecha entre ambos, en función de preservar el carácter abierto, transparente y comunitario de NATS.
Los términos del acuerdo, aunque no revelados en todos sus detalles legales, reflejan un alineamiento en la gestión de la marca NATS y en la administración de los recursos asociados al proyecto. Ambas partes se comprometieron a que NATS continue siendo un proyecto bajo licencia Apache 2.0, con gobernanza comunitaria y accesibilidad para todos los usuarios y desarrolladores. Esto significa que la controvertida migración a BSL para las próximas versiones se detiene o será reconsiderada dentro de este nuevo marco colaborativo. El compromiso público de Synadia incluye una promesa de mantener la transparencia en sus contribuciones y modelos comerciales en adelante.
En paralelo, CNCF reafirma su postura como custodio y promotor de la colaboración abierta, destacando la importancia de evitar que un solo proveedor controle unilateralmente el código y los activos del proyecto. Para ambas organizaciones, el objetivo común es que NATS siga evolucionando como una piedra angular en la arquitectura moderna cloud native, con una comunidad sólida y diversa que impulse su éxito. Todd Moore, Vicepresidente Senior de Operaciones Comunitarias de la Fundación Linux, destacó que la resolución es una muestra clara de cómo las fundaciones open source deben actuar para mantener la salud y el crecimiento sostenido de proyectos estratégicos. La neutralidad en la gestión, el compromiso con los valores de código abierto y el involucramiento activo de la comunidad constituyen la base para este ejemplo de gobernanza exitosa. Desde la perspectiva de Synadia, su CEO y creador de NATS, Derek Collison, expresó su entusiasmo por fortalecer la colaboración con CNCF y la Fundación Linux.
Reconoce que los proyectos maduros y exitosos dentro de la CNCF necesitan apoyo robusto para prosperar, y esta alianza es un paso crucial para garantizar la estabilidad y el futuro del sistema de mensajería. La comunidad y los usuarios de NATS son los principales beneficiarios de este acuerdo, ya que elimina incertidumbres legales y de gobernanza que podrían haber afectado la adopción y desarrollo continuo del software. La estabilización del ecosistema también impulsa la participación de nuevos mantenedores, contribuyentes y empresas, fomentando así la innovación y expansión del proyecto. Además, la resolución puede ser vista como un síntoma de una tendencia más amplia en la industria tecnológica donde las empresas vuelven a apostar por las licencias abiertas tradicionales. La controversia alrededor de cambios restrictivos de licencia, como la tentativa de Synadia, o movimientos similares de otras compañías como Redis Labs, ha provocado un renovado interés en mantener los proyectos bajo licencias verdaderamente abiertas y colaborativas.
Al garantizar que NATS continuará bajo una licencia Apache 2.0 y mantendrá su gobernanza comunitaria, CNCF y Synadia envían un mensaje claro al ecosistema cloud native: la colaboración abierta, la neutralidad y el compromiso compartido son esenciales para la sustentabilidad y evolución tecnológica. Con la resolución de las disputas legales y políticas, el foco se vuelve nuevamente en los aspectos técnicos y estratégicos del roadmap de NATS. La diversificación en el liderazgo del proyecto y la ampliación de su comunidad de desarrolladores son prioridades reconocidas. Por su parte, Synadia seguirá innovando y ofreciendo servicios comerciales relacionados con NATS, pero dentro de los límites que respetan las expectativas del proyecto como un bien común.
En conclusión, el acuerdo entre CNCF y Synadia fortalece la propuesta de valor de NATS como una plataforma fiable, abierta, y adaptable para la mensajería en la era cloud native. Este caso sirve como ejemplo de cómo las diferencias entre mantenedores y fundaciones pueden resolverse mediante diálogo, compromiso y una visión compartida que prioriza el bienestar de la comunidad y la tecnología frente a intereses individuales. La historia de NATS y su evolución reciente son importantes recordatorios para toda la industria sobre la importancia de la gobernanza transparente y la colaboración abierta para el éxito sostenible de proyectos fundamentales en el mundo del software. Es un paso positivo que mantiene vivo el espíritu y los beneficios del código abierto para desarrolladores, empresas y usuarios finales alrededor del mundo.