Durante los primeros 100 días de la administración de Donald Trump, el mercado bursátil vivió una etapa compleja, marcada por la volatilidad y la incertidumbre. A pesar de que el índice S&P 500 registró una caída general del 7.1% en ese período, no todas las acciones siguieron esa tendencia a la baja. De hecho, 161 de las 502 compañías que forman parte del S&P 500 lograron obtener rendimientos positivos, destacando algunas con ganancias considerablemente elevadas. Este fenómeno genera una interrogante importante para los inversores actuales: ¿siguen siendo estas acciones una apuesta segura ahora, o los contextos cambiantes las han dejado atrás? Para responder a esta pregunta, es preciso revisar con detenimiento las características de estas empresas, sus sectores, y la evolución de cada una desde entonces hasta hoy.
Una de las acciones que más destacó fue Palantir Technologies (NASDAQ: PLTR), una compañía especializada en análisis de datos que experimentó un crecimiento explosivo. En tan solo 100 días, su precio aumentó un 65%, y su retorno total anual llegó a un impresionante 428.9%. Este desempeño pone a Palantir en la categoría de ganadores notables, aunque su curva no estuvo exenta de altibajos. La volatilidad se acentuó especialmente cuando el gobierno de Trump implementó recortes de gastos en contratos militares, un sector clave para la empresa.
A pesar de ello, Palantir ha mostrado una resistencia sorprendente y una capacidad para adaptarse a los cambios regulatorios y de política pública. Hoy en día, su capitalización de mercado supera los 274 mil millones de dólares, reflejando tanto el interés sostenido de los inversores como su relevancia en el ámbito tecnológico y de defensa. Otra compañía que tuvo un desempeño destacado fue Philip Morris International (NYSE: PM), con un alza del 40.9% durante los primeros 100 días. Con una rentabilidad anual del 87.
2% y una capitalización de mercado que ronda los 265 mil millones de dólares, Philip Morris representa un caso interesante de resiliencia dentro del sector tabacalero. A pesar de la fuerte regulación y los continuos cambios en las políticas de salud pública a nivel global, la empresa ha sabido diversificar su portafolio y avanzar hacia productos alternativos con menores riesgos para la salud, como los cigarrillos electrónicos y dispositivos de calentamiento de tabaco. Esta estrategia le ha permitido mantener la confianza de los inversores y continuar siendo un jugador relevante en la industria. Dollar General (NYSE: DG) también se destacó durante este período, con una subida del 36.9% en los primeros 100 días.
Sin embargo, su rendimiento anual fue negativo, con una caída del 33.3%. Esto sugiere que aunque la empresa pudo beneficiarse inicialmente de un entorno marcado por la incertidumbre económica y una baja confianza del consumidor, sus resultados a largo plazo no fueron tan favorables. Dollar General, como minorista centrado en ofrecer productos a precios accesibles, suele verse beneficiado cuando la economía se debilita y los consumidores reducen gastos. No obstante, factores como la competencia creciente, cambios en patrones de consumo y problemas internos pueden afectar su desempeño futuro.
VeriSign (NASDAQ: VRSN), una empresa que provee servicios de infraestructura para dominios de internet y seguridad en línea, mostró un aumento de precio del 34.5% en ese lapso, con un retorno anual del 65%. Este crecimiento refleja la creciente demanda por seguridad digital y servicios de internet, sectores que se mantienen en expansión constante. La empresa goza de un posicionamiento clave en un mercado con barreras de entrada altas y continua innovación tecnológica, lo que potencia su atractivo para inversionistas que buscan crecimiento sostenido en tecnología. Netflix (NASDAQ: NFLX) cerró los primeros 100 días con un alza del 31.
9% y un impresionante retorno anual del 105.8%, con una capitalización de mercado que supera los 482 mil millones de dólares. Como pionera en el sector del streaming, Netflix ha redefinido el consumo de contenido audiovisual, consolidándose como un referente mundial. La capacidad de Netflix para expandir su base de suscriptores, invertir en contenido original y adaptarse a distintos mercados internacionales ha sido clave para su destacado desempeño. El entorno competitivo se ha intensificado, pero el liderazgo de la empresa sigue siendo evidente.
Estos ejemplos representan una variedad de sectores y modelos de negocio que encontraron oportunidades durante un período tumultuoso. Sin embargo, es fundamental analizar cada caso con atención antes de decidir si invertir hoy en estas acciones es una buena idea. El contexto económico, político y tecnológico ha evolucionado considerablemente desde entonces. Factores como la inflación, las políticas fiscales, las tensiones comerciales internacionales, y la evolución de la tecnología impactan directamente en el desempeño bursátil. En el caso de Palantir, su volatilidad y dependencia del sector público implican que los inversores deben estar preparados para fluctuaciones significativas y evaluar su exposición a riesgos regulatorios.
Sin embargo, su potencial de crecimiento a largo plazo, especialmente en contratos gubernamentales y aplicaciones comerciales, sigue siendo robusto. Philip Morris ha demostrado que puede adaptarse a tendencias globales hacia productos con menos riesgos para la salud, una clave para su sostenibilidad, aunque enfrenta presión constante de regulaciones y cambios en hábitos de consumo. Dollar General, aunque inicialmente se benefició de un entorno económico difícil, debe enfrentar desafíos competitivos y evolucionar para mantener su relevancia. La experiencia indica que las empresas minoristas de descuento pueden ser refugios en tiempos de crisis, pero requieren innovación y eficiencia para sostenerse a largo plazo. VeriSign continúa siendo una apuesta más segura en términos de dominio digital y seguridad, áreas que son cada vez más críticas en un mundo hiperconectado.
Netflix, por su parte, debe competir en un mercado que cada vez más ofrece alternativas y lleva a un mercado de streaming saturado, aunque su ventaja en contenido original y su marca son fortalezas que podrían sostener su crecimiento. Para los inversores que se preguntan si estas acciones son ‘compras obvias’ hoy, no hay una respuesta sencilla. La decisión de invertir debe basarse en un análisis cuidadoso de la situación financiera de cada empresa, las tendencias del sector, y la situación macroeconómica actual. El hecho de que hayan tenido un rendimiento excepcional durante los primeros 100 días de Trump no garantiza resultados similares en el futuro sin considerar el contexto actual. En conclusión, las acciones que sobresalieron en un período marcado por desafíos políticos y económicos han distribuido resultados mixtos en años posteriores.
Empresas tecnológicas y de servicios digitales como Palantir, VeriSign y Netflix continúan teniendo potencial, pero con riesgos y competencia elevada. Empresas más tradicionales o ligadas a sectores regulados, como Philip Morris y Dollar General, muestran resistencia aunque deben innovar para mantener su atractivo. Evaluar cada una con un enfoque integral es clave para descubrir verdaderas oportunidades que generen rentabilidad en un mercado que nunca deja de cambiar.