La minería de Bitcoin continúa siendo una actividad vital dentro del ecosistema de las criptomonedas, y las empresas del sector buscan constantemente regiones que ofrezcan una combinación ideal entre costo energético, estabilidad política y facilidad para invertir. En este contexto, Hive Digital Technologies ha focalizado su atención en Paraguay, un país latinoamericano que emerge como un nuevo eje estratégico para la minería de Bitcoin a gran escala, gracias a sus recursos hidroeléctricos abundantes y a un ambiente favorable para las inversiones extranjeras. La elección de Paraguay no es arbitraria. Según Aydin Kilic, presidente y CEO de Hive, la visión de la compañía excede el aprovechamiento temporal de las condiciones locales, apostando por un modelo de colaboración a largo plazo. Este enfoque se diferencia de otras estrategias que buscan rápido rendimiento mediante el arbitraje regional.
La apuesta de Hive considera la estabilidad geopolítica como un factor central, un punto donde Paraguay destaca en comparación con otras regiones típicas para la minería, donde las tensiones políticas o económicas suelen amenazar la continuidad operacional. Paraguay posee una matriz energética dominada por la hidroeléctrica, la cual garantiza un suministro energético sostenible y con un costo muy competitivo. La energía generada por la represa de Itaipú, una de las mayores del mundo, proporciona al país una posición privilegiada para sostener actividades de alto consumo energético como la minería de criptomonedas sin la presión de precios elevados que afectan otras zonas. La combinación de energía renovable y bajo costo es un punto atractivo para Hive, que planea expandir significativamente su capacidad operativa en la región. Un paso decisivo para Hive fue la adquisición del centro de datos Yguazú, vandalizado anteriormente por Bitfarms, con una capacidad de 200 megavatios.
La compra se concretó por 56 millones de dólares en enero, y en apenas cuatro meses la firma logró completar la primera fase del centro con una potencia de 100 MW, capaz de sostener cinco exahashes por segundo (EH/s) en operación de minería mediante ASICs (circuitos integrados de aplicación específica). Este desarrollo demuestra la seriedad y velocidad con la que Hive avanza en el mercado paraguayo, marcando un fuerte compromiso con la región. Las ambiciones de Hive no terminan ahí. Para el año 2025, la compañía planea expandir su operación hasta alcanzar los 300 MW en Paraguay, y elevar la tasa de hash hasta 25 EH/s para septiembre del mismo año. Este crecimiento representa para Hive una oportunidad única para posicionarse como uno de los actores más influyentes en la minería de Bitcoin a nivel global, al mismo tiempo que impulsa la economía y la infraestructura local.
La importancia del trabajo colaborativo con los actores regionales quedó reflejada en la estrategia desplegada por Hive. La empresa ha invertido en la contratación de trabajadores locales y en programas de capacitación, además de fomentar relaciones sólidas con proveedores y socios dentro del país. Este enfoque no solo contribuye a la estabilidad operativa sino que también promueve el desarrollo de un ecosistema de minería sostenible, con beneficios a nivel social y económico que trascienden lo meramente tecnológico. A pesar de las oportunidades, la minería en Paraguay enfrenta desafíos regulatorios. Ha existido una propuesta para prohibir la minería por la preocupación sobre el impacto en el suministro eléctrico y el riesgo de incremento en los precios de la electricidad para los consumidores locales.
Sin embargo, Hive mantiene diálogo con los responsables políticos para generar un marco regulatorio claro y colaborativo, anticipando que la regulación será un elemento clave para el desarrollo futuro, tanto para la protección de los usuarios como para asegurar la viabilidad del sector minero. El plan de expansión regional de Hive no se limita a Paraguay. La empresa cuenta con centros de datos en Canadá y Suecia, combinando así una estructura diversificada que permite mitigar riesgos vinculados a factores geopolíticos o comerciales. Esta estrategia de globalización ayuda a equilibrar la exposición ante posibles tensiones internacionales y asegura la continuidad del negocio en caso de fluctuaciones en un mercado o región específica. Además, Hive ha decidido trasladar su sede principal a San Antonio, Texas.
Este movimiento refuerza su presencia en el continente americano y facilita la operatividad dentro de los mercados norteamericano y latinoamericano. Al mismo tiempo, les permite estar más cerca de socios estratégicos, reguladores y fuentes de financiamiento, un punto clave en una industria donde la agilidad y la adaptación son esenciales ante los cambios tecnológicos y regulatorios. Un aspecto crítico en la minería de Bitcoin es el costo y la disponibilidad de hardware especializado. Con la imposición de aranceles y barreras comerciales, especialmente entre Estados Unidos y China, los precios de los ASICs y componentes eléctricos han experimentado incrementos. Para contrarrestar esta situación, Hive ha trabajado en diversificar sus canales de aprovisionamiento, evitando depender exclusivamente de un solo mercado o proveedor.
Esto reduce la vulnerabilidad frente a interrupciones en la cadena de suministro y mejora la capacidad de competir con eficiencia. La rentabilidad en la minería de criptomonedas, según Kilic, se puede entender como una ecuación física donde las variables clave son el capital invertido, los gastos operativos y el rendimiento del hashrate. Sin importar el tamaño de la operación, desde un solo equipo hasta miles de máquinas, la gestión inteligente de insumos como el costo energético, el mantenimiento y la eficiencia de las máquinas determina el éxito a largo plazo. Hive utiliza una gestión disciplinada de su tesorería, combinando la venta controlada de Bitcoin con estrategias de compra en cajeros automáticos (ATM), para financiar el crecimiento mientras mitiga riesgos de volatilidad en el mercado. Este enfoque pragmático y basado en datos posiciona a Hive como una empresa robusta en la industria y capaz de aprovechar las oportunidades que la minería sostenible ofrece.
En resumen, el movimiento estratégico de Hive Digital Technologies hacia Paraguay representa no solo una expansión empresarial, sino también un paso significativo en la consolidación de América Latina como un núcleo emergente para la minería de criptomonedas. La combinación de recursos naturales, políticas favorables y la visión de largo plazo está transformando a Paraguay en un actor clave que podría cambiar el panorama global de la minería de Bitcoin. Con su apuesta por la energía hidroeléctrica renovable y la integración con la comunidad local, Hive no solo busca maximizar su rentabilidad, sino también crear un modelo sostenible que inspire a otros actores del sector a seguir caminos similares. Esta dinámica tiene potencial para generar un impacto positivo en toda la región, promoviendo la innovación tecnológica, la generación de empleo y la atracción de inversiones. El éxito de Hive en Paraguay será un indicador importante para la minería mundial en un contexto donde la eficiencia energética y la regulación consciente se vuelven imprescindibles para equilibrar crecimiento, sustentabilidad y rentabilidad.
Este proyecto abre nuevas puertas para la industria de las criptomonedas y su integración en las economías reales, consolidando a Paraguay como un caso de estudio para futuras iniciativas en minería digital.