La minería en Columbia Británica (BC), Canadá, está atravesando una fase de expansión sin precedentes, con un estudio reciente que revela la actividad económica generada por 27 proyectos mineros avanzados que suman un impacto estimado de 65.1 mil millones de dólares canadienses. Esta cifra, sin duda, refleja la importancia estratégica que tiene la industria minera para la economía provincial y nacional, especialmente en un contexto global marcado por la incertidumbre económica y retos fiscales significativos. El estudio, realizado por la Mining Association of British Columbia (MABC), ofrece una visión detallada sobre cómo estos proyectos mineros, enfocados en minerales críticos, metales preciosos y carbón para la fabricación de acero, están proyectados para fortalecer la economía de la región durante las próximas décadas. La construcción y operación de estos 27 proyectos no solo representan una inversión directa superior a 41 mil millones de dólares, sino que también crean miles de empleos, con un impacto importante en los ingresos laborales y contribuciones tributarias para las arcas públicas.
La minería en BC sustenta actualmente a más de 35,000 empleos y a cerca de 4,000 empresas, muchas de ellas vinculadas a comunidades indígenas, generando alrededor de 18 mil millones de dólares en actividad económica anual. Este sector también representa una tercera parte de las exportaciones de bienes que produce la provincia, reafirmando su papel esencial en el desarrollo económico y comercial de Canadá. Además de los 65.1 mil millones de dólares en actividad directa, el impacto económico total que podría generar el funcionamiento de estas minas en las próximas décadas alcanza la cifra monumental de 984 mil millones de dólares canadienses, destacando la minería como un motor clave en la economía a largo plazo. Esta robusta labor económica está acompañada por un compromiso ambiental considerable.
La minería en Columbia Británica es reconocida por su baja huella de carbono y por la producción responsable de materiales fundamentales para tecnologías modernas, como baterías para vehículos eléctricos y componentes para turbinas eólicas, sectores que están en auge a nivel global debido a la transición hacia energías limpias y sostenibles. El presidente y CEO de la MABC, Michael Goehring, ha enfatizado que la región posee minerales, metales preciosos y carbón para fabricación de acero vitales para la demanda internacional. Su visión es clara: el desarrollo responsable y eficiente de estos recursos minerales puede ser la base para una nueva ola de crecimiento económico, que no solo creará empleos sino que también fortalecerá las comunidades locales y las primeras naciones, además de aumentar los ingresos gubernamentales para servicios públicos. La importancia de estos proyectos se refleja en el enfoque del gobierno provincial, que en febrero de 2025 aceleró 18 proyectos mineros y energéticos valorados en aproximadamente 20 mil millones de dólares. Esta medida está en línea con la estrategia de la provincia para activar la minería y aprovechar sus oportunidades económicas frente a las presiones globales.
El análisis realizado por Mansfield Consulting, que fundamenta el estudio, se basó en entrevistas exhaustivas, revisiones de estudios técnicos y de viabilidad, además de evaluaciones económicas publicadas por los propios promotores de los proyectos. Esta metodología garantiza un panorama realista y basado en datos que permiten pronosticar el impacto económico con un alto grado de certidumbre. Los 27 proyectos incluyen 18 orientados a minerales críticos, esenciales para la fabricación de tecnología avanzada; seis proyectos de metales preciosos, fundamentales para inversiones y reserva, y tres iniciativas relacionadas con el carbón para acero, un sector tradicional pero que sigue siendo clave para la industria manufacturera. Este crecimiento minero se consolida luego de una evaluación previa en 2024 que consideró 17 minas propuestas de minerales críticos y sentó las bases para la actual expansión. La industria minera en BC no solo impulsa desarrollo económico, sino también actúa como un pilar para la resiliencia económica y la prosperidad a largo plazo.
Desde una perspectiva social, la minería abre puertas a colaboraciones con las comunidades indígenas, fomentando contratos y desarrollo de empresas propiedad de primeras naciones, lo que representa un avance significativo en la inclusión y participación económica de estas poblaciones en la modernización y crecimiento provincial. En términos de empleo, la minería genera miles de puestos de trabajo directos y numerosos indirectos a través de actividades relacionadas con proveedores, transporte, mantenimiento y servicios especializados. Esto se traduce en ingresos laborales que alcanzan los 27 mil millones de dólares, contribuyendo considerablemente al bienestar socioeconómico de la región. La actividad fiscal también es relevante, con más de 12 mil millones de dólares proyectados en ingresos por impuestos que ayudarán a financiar servicios públicos y programas gubernamentales, fortaleciendo la infraestructura y calidad de vida de la población. Cabe destacar que el contexto global muestra una creciente demanda por minerales críticos y materiales responsables, puesto que las transformaciones tecnológicas, como la electrificación del transporte y las energías renovables, requieren insumos de alta calidad y con estándares ambientales rigurosos.