The Incredibles: Rise of the Underminer es un título algo nicho de GameCube que ha capturado la atención de un pequeño pero dedicado grupo de jugadores y miembros de la comunidad speedrunning. Este juego de acción y combate, basado en el universo de Los Increíbles, ofrece una experiencia entretenida a lo largo de sus once niveles, culminando con un enfrentamiento épico contra el villano conocido como el Underminer. A pesar de su popularidad modesta, el juego esconde bajo la superficie aspectos técnicos y mecánicas que, al ser analizados a profundidad, pueden transformar la manera de jugar y acelerar significativamente el tiempo requerido para completarlo. En este contexto, el proceso de reverse engineering o ingeniería inversa y las modificaciones —modding— juegan un papel fundamental para aquellos que desean llevar sus habilidades al siguiente nivel y comprender las complejidades del juego. El viaje para optimizar una partida en Rise of the Underminer empieza en torno al combate, que es en esencia el núcleo de la experiencia de juego.
A lo largo de los niveles, el objetivo principal es derrotar a una multitud de robots enemigos y avanzar hasta el jefe final. Para mejorar en speedrunning, uno debe entender a profundidad cómo funcionan los sistemas de daño, la interacción entre habilidades y qué estrategias pueden maximizar la eficiencia en batallas. La dificultad radica en que la compleja interacción de diversos factores dificulta descubrir patrones simplemente observando la jugabilidad o analizando superficialmente el código. La ingeniería inversa se presenta como una solución poderosa para desentrañar estos misterios. El juego de GameCube utiliza un archivo ejecutable con formato .
dol que puede ser cargado y examinado gracias a herramientas especializadas como Ghidra. Esta plataforma no solo muestra las instrucciones en lenguaje máquina para PowerPC, sino que, afortunadamente, en el caso de Rise of the Underminer, el juego contiene símbolos de depuración. Esto permite apreciar los nombres de funciones y variables, facilitando la comprensión del código y ayudando a identificar módulos relacionados con el combate y otros sistemas clave. Por ejemplo, mediante este proceso, es posible observar funciones específicas que gestionan la extracción y el cálculo de datos de combate para ciertos enemigos, revelando cómo se ajustan las habilidades y daños en distintos contextos. Es así como se puede deducir que ciertos ataques se multiplican o interactúan de maneras no evidentes para el jugador típico.
Sin embargo, debido a la naturaleza emergente de muchos sistemas dentro del juego, interpretar exactamente cómo cada variable afecta la jugabilidad requiere más que solo leer el código; exige experimentación directa. Es en este punto donde el modding entra en juego para brindar una experiencia mucho más práctica e inmediata. La idea principal detrás de modificar Rise of the Underminer es insertar nuevas funcionalidades dentro del motor del juego que permitan mostrar información valiosa en tiempo real, como la barra de salud de los enemigos. Esto no solo ayuda a monitorear el impacto de cada ataque y combo, sino que también agiliza la identificación de qué movimientos ofrecen el mayor beneficio en términos de tiempo y daño. Para lograr esto, es necesario implementar un sistema que integre el código modificado directamente dentro del proceso de renderizado de la consola o emulador.
Este método incluye identificar en memoria dónde están almacenadas las entidades enemigas y hacer uso de funciones internas del juego para convertir coordenadas del mundo en posiciones en pantalla. Con estas herramientas, se puede dibujar texto y barras de salud de manera dinámica, entregando un feedback visual crucial para quienes buscan optimizar cada segundo. La creación de estos mods se basa en un flujo de trabajo bastante técnico que involucra la compilación de código en C hacia instrucciones compatibles con PowerPC, utilizando herramientas especializadas como DevkitPPC. Esta compilación se mezcla con parches específicos aplicados sobre el archivo .dol del juego y se convierte finalmente en códigos Action Replay.
Estos códigos son instrucciones que pueden inyectarse continuamente durante la ejecución del juego y son ampliamente compatibles con emuladores como Dolphin, haciendo que la distribución y prueba de estas modificaciones sea accesible para la comunidad. Una de las ventajas más significativas de emplear códigos Action Replay en lugar de parches estáticos es la facilidad para compartir y aplicar las modificaciones sin necesidad de distribuir archivos completos del juego, respetando así aspectos legales y facilitando la experimentación. Además, la historia rodeada de estos códigos revela cómo muchas funciones y trucos ocultos nunca fueron divulgados oficialmente y todavía permanecen enterrados en el código. El análisis detallado del combate a través del mod ha llevado a descubrimientos reveladores, especialmente en cuanto a la efectividad de ciertos ataques. Por ejemplo, se observó que los golpes de puño en el juego causan daño incrementado en golpes consecutivos, llegando a doblar el daño hasta un cuarto golpe.
Este fenómeno se ejemplifica con personajes como Mr. I y Frozone, cuya progresión de daño varía según el nivel de mejora o 'upgrade' aplicado. Estos datos permiten a los jugadores planificar estrategias que priorizan combinaciones que maximicen el daño en el menor tiempo posible, crucial para mejorar tiempos en speedruns. Además, se identificaron peculiaridades en ataques específicos como el deslizamiento de hielo de Frozone, que puede golpear dos veces a enemigos grandes, o que el cuarto golpe sobre enemigos congelados puede terminar con ellos al instante. Esta información no solo agrega capas de profundidad al entendimiento táctico del juego, sino que también destaca áreas en las que antes no se habría pensado para acelerar las partidas.
Otro aspecto fascinante y explorado a partir de la ingeniería inversa son los códigos de trucos que se pueden ingresar desde el menú de pausa. Aunque estos códigos están disponibles en el juego, muchas fuentes externas como libros antiguos o sitios web presentan únicamente un conjunto incompleto o erróneo de ellos. Por ejemplo, el código 'NUKE' aparece listado en muchas recopilaciones, pero resulta que en la versión pública del juego este código no es reconocido debido a que está bloqueado detrás de un modo de desarrollador interno. Este modo de desarrollador oculto se puede activar mediante un sencillo código Action Replay, desbloqueando funciones especiales como super movimientos ilimitados, la habilidad de volar presionando combinaciones específicas de botones y un overlay de depuración que revela información técnica como la posición del jugador y la tasa de frames por segundo. Estos extras, aunque no útiles en speedruns tradicionales, proporcionan un contexto enriquecedor sobre cómo se diseñó y probó el juego.
Las investigaciones también descubrieron códigos adicionales para teletransportación a puntos de control o para modificar la experiencia del jugador, que jamás fueron documentados en sitios o guías públicas. Estos secretos abren nuevas posibilidades para experimentación y pueden, en teoría, usarse para saltar obstáculos o manipular progresos. En términos de jugabilidad, otro hallazgo valioso está relacionado con glitches fuera de límites, que permiten al jugador explorar áreas normalmente inaccesibles al juego. Aunque no está confirmado que estas técnicas disminuyan los tiempos en speedruns, la mecánica detrás de estos glitches, como reaparecer a un personaje en el aire mientras otro está fuera de la zona, podría ser explotada para descubrir atajos o comportamientos inesperados que mejoren la eficiencia. El hecho de compartir este conocimiento y avances técnicos con la comunidad, aunque pequeña, es fundamental para fomentar el desarrollo de nuevas estrategias y la mejora constante de récords.
Por ende, compartir el código de los mods y los hallazgos técnicos ofrece un recurso valioso para jugadores apasionados y desarrolladores interesados en la emulación, modding y speedrunning. En conclusión, The Incredibles: Rise of the Underminer representa un fascinante campo de estudio para quienes están interesados en la optimización de juegos a través de ingeniería inversa y modding. El proceso de analizar el código, modificar el juego e implementar herramientas visuales mejora sustancialmente la capacidad de análisis y experimentación, permitiendo descubrir secretos ocultos y optimizar el rendimiento de las partidas. Los descubrimientos acerca del sistema de daño, los códigos secretos y los glitches ofrecen una nueva dimensión para disfrutar y dominar este título clásico. Además, este tipo de investigaciones refuerzan la importancia de la colaboración y el intercambio de conocimientos dentro de la comunidad gamer.
A medida que más jugadores y desarrolladores exploran los límites técnicos del juego, surgen nuevas tácticas y herramientas que enriquecen la experiencia, ofreciendo no solo entretenimiento sino también un acercamiento profundo y técnico al mundo de los videojuegos retro. El futuro del speedrunning y modding en Rise of the Underminer se presenta prometedor, con la esperanza de que estos aportes ayuden a nuevos récords y a un mayor reconocimiento de esta joya oculta del catálogo de GameCube.