En un mundo cada vez más digitalizado, la creación de aplicaciones y sitios web se ha convertido en una tarea esencial para empresas, diseñadores y desarrolladores. La llegada de la inteligencia artificial ha transformado muchos procesos industriales y creativos, y ahora el diseño de software no es la excepción. Figma, uno de los líderes en software de diseño colaborativo, ha dado un paso adelante en esta revolución tecnológica con el lanzamiento de su nueva herramienta premium, Figma Make, que incorpora una innovadora función llamada 'vibe-coding'. Figma Make nace en un momento clave para la industria tecnológica, en el que las soluciones basadas en inteligencia artificial buscan optimizar tiempos, reducir costos y potenciar la creatividad humana. A través de la función 'vibe-coding', Figma permite a los usuarios describir una idea para una aplicación o sitio web en lenguaje natural o elegir un diseño ya existente, para que su avanzado modelo de IA traduzca esa información en un código funcional y listo para usar.
Esta capacidad representa un salto significativo en la automatización del desarrollo web y móvil, facilitando la integración entre diseño y programación. La inspiración de Figma Make proviene del auge de aplicaciones similares conocidas como 'vibe-coding', entre las que destacan herramientas como Cursor y Windsurf. Estas soluciones han demostrado el valor de convertir descripciones textuales en código, agilizando así la creación de productos digitales sin la necesidad de un profundo conocimiento técnico por parte del usuario. Durante el último año, gigantes tecnológicos como Google y Microsoft también han promovido sus propias versiones de esta tecnología, abriendo camino para que el diseño asistido por inteligencia artificial se convierta en la norma. Uno de los diferenciadores clave de Figma Make es que trabaja estrechamente con el ecosistema y los activos de diseño que las empresas ya tienen almacenados en Figma.
Esto significa que las fuentes, paletas de colores, tamaños y otros elementos visuales de la marca pueden ser automáticamente integrados en el código generado. De esta manera, el producto final no solo es funcional, sino que mantiene coherencia con la identidad corporativa y los sistemas de diseño establecidos, algo que otras soluciones todavía no logran replicar con precisión. El motor detrás de esta poderosa herramienta es el modelo de inteligencia artificial Claude 3.7 Sonnet, desarrollado por Anthropic, que destaca por su capacidad para entender instrucciones complejas y generar resultados altamente precisos en diversos lenguajes de programación web. Figma Make también puede partir de archivos de diseño ya creados dentro de la plataforma para generar código que se aproxime fielmente a ellos, permitiendo a los usuarios ahorrar tiempo y evitar la tediosa tarea de programar desde cero.
A diferencia de algunas alternativas que ofrecen versiones gratuitas limitadas, Figma ha decidido que Figma Make estará disponible exclusivamente para usuarios con suscripción premium, comenzando en 16 dólares por asiento mensual si se adquiere anualmente. Actualmente, la herramienta está en fase beta para quienes cuentan con estas licencias, lo que sugiere un enfoque dirigido hacia profesionales y empresas que buscan una solución robusta y de alto nivel para optimizar sus flujos de trabajo. La interfaz de Figma Make incorpora un chat interactivo donde los usuarios pueden solicitar ajustes y modificaciones en el código generado. Sin embargo, el sistema está diseñado para ser intuitivo y eficiente, ofreciendo menús desplegables que permiten realizar cambios rápidos como alterar una fuente sin necesidad de consultar nuevamente al motor de inteligencia artificial, reduciendo tiempos de espera y aumentando la productividad. Los primeros usuarios con acceso anticipado a Figma Make han reportado resultados sorprendentes, utilizando la herramienta para crear desde videojuegos hasta aplicaciones de toma de notas y calendarios personalizados.
Estas experiencias iniciales reflejan la versatilidad y potencia del producto, mostrando cómo la inteligencia artificial puede ayudar a materializar ideas innovadoras en productos digitales operativos en cuestión de minutos. A pesar del auge de estas tecnologías automatizadas, Figma mantiene un mensaje claro sobre el rol indispensable de los diseñadores humanos. Dylan Field, cofundador y CEO de la empresa, ha reafirmado la relevancia de los profesionales del diseño en la construcción de software en el futuro. Según Field, la creatividad, el juicio estético y la comprensión profunda de las necesidades del usuario seguirán siendo áreas donde la inteligencia artificial será una herramienta, no un reemplazo. Paralelamente a Figma Make, la compañía ha anunciado el inicio de pruebas para otra función llamada Figma Sites.
Este complemento está orientado a convertir diseños directamente en sitios web completamente funcionales. Aunque inicialmente la generación de código mediante IA para esta función está prevista para lanzarse en las próximas semanas, ya se percibe como otra muestra del compromiso de Figma por integrar inteligencias artificiales en sus soluciones de diseño, reduciendo aún más las barreras entre la idea visual y la implementación técnica. El lanzamiento de Figma Make representa un movimiento estratégico importante para la empresa, que recientemente presentó de manera confidencial su solicitud para una oferta pública inicial (IPO). La incorporación de capacidades avanzadas de inteligencia artificial no solo posiciona a Figma como un actor innovador dentro del mercado del software de diseño, sino que también le ofrece una ventaja competitiva frente a otras plataformas que buscan captar a diseñadores, desarrolladores y empresas en la era de las herramientas de creación asistida por IA. Más allá de la implicación comercial, la llegada de Figma Make es una muestra clara de cómo la inteligencia artificial está moldeando el futuro del desarrollo y diseño de software.
Al automatizar tareas rutinarias y simplificar procesos complejos, se abren nuevas posibilidades para creativos, pequeñas empresas y grandes corporaciones por igual. El potencial para acelerar la innovación y reducir los tiempos de lanzamiento al mercado puede transformar la dinámica de la industria tecnológica de forma profunda y duradera. En conclusión, Figma Make con su tecnología 'vibe-coding' es una muestra palpable del avance imparable que la inteligencia artificial está teniendo en el diseño y desarrollo digital. Al ofrecer una herramienta poderosa, integrada y enfocada en la experiencia del usuario, Figma reafirma su posición como pionero en la democratización del diseño y la programación. Para quienes buscan mantenerse a la vanguardia en la creación de productos digitales, Figma Make promete ser un aliado imprescindible para convertir ideas en realidades funcionales con rapidez, coherencia y calidad.
Mientras el sector tecnológico sigue expandiendo sus límites, herramientas como Figma Make señalan un futuro donde la colaboración entre humanos y máquinas será la clave para el éxito y la innovación constante. La creatividad humana, potenciada por tecnologías inteligentes, promete redefinir lo que significa diseñar, programar y construir en la próxima década.