En el último año, el mercado de criptomonedas ha mostrado una evolución significativa y notable, con un fuerte interés por parte de inversores institucionales y particulares que buscan exposición a activos digitales de una forma organizada y regulada. En este contexto, los fondos cotizados en bolsa (ETFs) especializados en criptomonedas en Estados Unidos han escalado a un nuevo récord, destacándose con un periodo sólido de cuatro semanas consecutivas donde las entradas de capital no han cesado, robusteciendo la confianza y consolidación de este tipo de productos financieros. Durante las últimas semanas, las cifras confirmaron que los ETFs criptográficos en Estados Unidos alcanzaron acumulados netos de 62.9 mil millones de dólares en entradas desde su lanzamiento a comienzos de 2024. Este dato supera el anterior máximo registrado en febrero de 61.
6 mil millones, marcando un hito en la historia de los productos de inversión en criptodivisas del país. Este crecimiento está estrechamente ligado a un aumento en la demanda de los inversores por vehículos regulados que les permitan acceder al mercado digital con mayor seguridad y flexibilidad. El atractivo de los ETFs criptográficos se ha visto potenciado en el contexto de un mercado global que se acerca nuevamente a niveles históricos en cuanto a activos totales bajo gestión (AUM). Según datos proporcionados por la firma europea de análisis CoinShares, los fondos mundiales de criptomonedas alcanzaron la suma de 169 mil millones de dólares en AUM, apenas un 2.5% por debajo del pico histórico que se registró a finales de enero de 2025 con 173.
3 mil millones. Este auge ha sido impulsado por entradas constantes de capital que, año tras año, reflejan un creciente interés en el ecosistema cripto. La dinámica inflacionaria y ciertas condiciones macroeconómicas también han jugado un papel importante en la actual demanda de instrumentos de inversión en criptodivisas. El aumento global en la oferta monetaria M2, sumado a tensiones económicas como la estanflación en Estados Unidos, han generado un ambiente donde muchos inversores buscan refugios alternativos para preservar su capital y diversificar su portafolio frente a la incertidumbre. La aprobación de Bitcoin como activo estratégico en algunos estados de EE.
UU. ha añadido un espíritu de legitimidad y confianza en el sector, ayudando a atraer aún más flujo de capital hacia estos ETFs. Dentro del universo de criptomonedas, Bitcoin continúa dominando el mercado con un notable volumen de entradas. En la última semana, se reportaron 867 millones de dólares en entradas netas hacia productos vinculados a Bitcoin, elevando las entradas totales en lo que va del año a 6.6 mil millones y un AUM de 146 mil millones de dólares.
Esta preferencia por Bitcoin refleja su posición consolidada como la criptomoneda de referencia y su creciente aceptación como activo de reserva. Sin embargo, los productos asociados a otras criptomonedas también han tenido movimientos interesantes. Ether, la segunda criptomoneda más grande, vio entradas más modestas, con 1.5 millones de dólares la semana pasada y un patrimonio administrado que alcanza los 12 mil millones de dólares. Entre las altcoins, el token Sui ha destacado con 11.
7 millones de dólares en entradas, demostrando que hay interés creciente en plataformas emergentes y proyectos innovadores dentro del ecosistema cripto. Solana, por otro lado, sufrió salidas de capital, totalizando 3.4 millones de dólares en la semana reciente, lo que generó un saldo negativo para el mes. Estas fluctuaciones reflejan la volatilidad propia del mercado de altcoins y la selectividad de los inversores ante proyectos que deben demostrar estabilidad y perspectiva a largo plazo. El liderazgo destacado en la captación de flujos lo tiene la gestora BlackRock con sus productos iShares.
La firma logró un ingreso de un billón de dólares solo en la última semana, con un acumulado anual que ya suma 8.1 mil millones, superando ampliamente el total del resto de la industria, que apenas alcanzó los 6.7 mil millones. Este dominio de BlackRock evidencia la confianza que los gigantes financieros tradicionales están depositando en los activos digitales y cómo están jugando un papel fundamental en la estructuración y popularización de ETFs criptográficos en el mercado estadounidense. Mientras tanto, empresas como Grayscale y Bitwise registraron salidas de capital en la última semana, con pérdidas de 168 y 27 millones respectivamente, lo que puede indicar cambios en la preferencia de los inversores o estrategias defensivas ante la volatilidad reciente.
Por otro lado, gestores como Fidelity y ARK lograron revertir tendencias negativas previas, reportando entradas de 62 y 46 millones respectivamente, señalando un interés renovado por algunos fondos activos que acompañan la tendencia alcista del mercado. El contexto global del mercado de criptomonedas también se refleja en el incremento significativo del valor total de capitalización, que se aproxima a los 3.5 billones de dólares. Aunque todavía cae un 11% desde el máximo histórico de 3.9 billones en diciembre de 2024, esta recuperación muestra un renovado apetito por activos digitales.
Junto con la valorización de activos, los ETFs se posicionan como un mecanismo efectivo para canalizar estas inversiones, beneficiándose de regulaciones claras y estructuras financieras consolidadas. Bitcoin, que superó la marca de los 100,000 dólares por primera vez desde enero 2025, ofrece un fuerte referente psicológico para el mercado y para los inversores que buscan resultados consistentes a pesar de la volatilidad característica. Su precio se ubicaba alrededor de 104,407 dólares en el momento de la era más reciente de observación, lo que contribuye al optimismo generalizado en el sector. El auge de los ETFs de criptomonedas simboliza una transición en la percepción del mercado y de los inversores hacia las criptomonedas, apuntando a productos cada vez más sofisticados, regulados y accesibles. Gracias a la combinación de productos gestionados activamente y pasivamente, junto con las innovaciones tecnológicas y regulatorias, los fondos de criptomonedas están construyendo un puente sólido entre mercados tradicionales y digitales.