En el mundo de las criptomonedas, cada comienzo de mes puede traer consigo tanto oportunidades como desafíos. El 1 de octubre de 2024, Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH) se adentran en un nuevo mes, después de haber tenido un septiembre marcado por la volatilidad y la incertidumbre. Sin embargo, a pesar de algunos movimientos negativos en los precios, existen ciertas señales que sugieren que ambas criptomonedas podrían comenzar octubre con un tono positivo. Septiembre terminó con un ambiente de nerviosismo en el mercado de las criptomonedas, ya que tanto Bitcoin como Ethereum enfrentaron caídas notables en sus precios. En particular, Bitcoin vio una disminución significativa, cayendo de $65,600 a $63,301, un descenso del 3.
50%. Por su parte, Ethereum no se quedó atrás, experimentando una caída del 2.13%, pasando de $2,657 a $2,601. Ambas criptomonedas cerraron septiembre por debajo de sus promedios móviles de 200 días, lo que generó preocupación entre los inversores. Una de las razones detrás de estas caídas en el precio fue el aumento en el volumen de liquidaciones largas, lo que indica que muchos traders estaban cerrando sus posiciones en medio de un mercado dominado por posiciones cortas.
Las liquidaciones largas se producen cuando los traders que apuestan a que el precio de una criptomoneda subirá se ven obligados a vender en pérdidas ante una caída del mercado, lo que puede amplificar aún más la caída de los precios. Sin embargo, a pesar de estas dificultades, hay indicios de que el mercado puede estar preparando el terreno para un rebote. La ausencia de un sell-off significativo es un factor positivo. De acuerdo con los datos de CryptoQuant, aunque la disminución en el interés abierto (OI) de Bitcoin fue notable, cayendo de $18.6 mil millones a $18.
1 mil millones, ha habido una recuperación en las operaciones. En el momento de redactar este artículo, el interés abierto de Bitcoin se había recuperado parcialmente a $18.3 mil millones. Ethereum, por su parte, también mostró señales de actividad renovada, con su OI aumentando a $9.4 mil millones tras una leve disminución.
El interés abierto es un indicador crucial que ayuda a los traders a entender la liquidez y el interés general en el mercado de futuros. Por lo general, un descenso en el interés abierto indica una reducción en la liquidez y el interés en las operaciones de derivados, lo que puede dar lugar a una presión de compra en el futuro si los traders comienzan a reanudar sus posiciones. En términos de precios, la reciente caída en el valor de ambos activos ha sido seguida de ligeras recuperaciones. En el transcurso de la jornada, Bitcoin logró un incremento del 0.7%, cotizando a $63,789, mientras que Ethereum registró una ganancia de más del 1%, alcanzando los $2,639.
Esta ligera recuperación es un indicativo de que los traders podrían estar volviendo a evaluar sus posiciones y el enfoque del mercado podría estar cambiando. Además, las métricas relacionadas con los flujos de intercambio también se han mantenido en un estado relativamente estable. A pesar de las recientes caídas, no ha habido una fuga significativa de BTC hacia los exchanges, lo que significa que los inversores no están apresurándose a vender sus activos. Según datos de CryptoQuant, el flujo de intercambio de Bitcoin se ha estabilizado, con un flujo negativo que indica una distribución equilibrada de BTC entre exchanges y billeteras personales. Esto podría interpretarse como un signo de que los inversores están dispuestos a mantener sus activos, anticipándose a un posible repunte del mercado.
Para Ethereum, los flujos de intercambio han mostrado un aumento temporal, con 14,000 ETH fluyendo hacia los exchanges. Sin embargo, esta cantidad no fue suficiente para provocar un sell-off abrupto. En tiempos recientes, el flujo de ETH ha vuelto a ser negativo, retirando más de 23,000 ETH de los exchanges, lo que indica una reducción en la presión de venta. Esta dinámica sugiere que los inversores podrían estar buscando acumular más ETH en vez de desprenderse de él. Con el inicio de octubre, muchos traders analizan las tendencias históricas y las condiciones actuales del mercado para predecir cómo podría comportarse Bitcoin y Ethereum en este nuevo mes.
Históricamente, octubre ha sido un mes favorable para las criptomonedas, y muchos creen que la combinación de un interés abierto recuperado, flujos de intercambio estables y la falta de un sell-off significativo puede sugerir que el terreno está preparado para un repunte. A medida que nos adentramos en octubre, la atención también se centra en los factores que pueden influir en el mercado. La regulación de las criptomonedas, las innovaciones tecnológicas y el comportamiento de los inversores son factores cruciales a considerar. La adopción generalizada de criptomonedas por parte de instituciones y empresas también puede influir en la percepción del mercado y en la dirección futura de Bitcoin y Ethereum. En la comunidad de inversores, hay un sentido de anticipación con respecto a cómo estas dinámicas podrían jugarse.
Las ballenas de criptomonedas, o aquellos con grandes cantidades de BTC y ETH, son observadas de cerca, ya que sus movimientos pueden afectar significativamente los precios. A medida que octubre avanza, será crucial observar cómo se desarrolla la situación y si Bitcoin y Ethereum pueden capitalizar sobre estas condiciones en su camino hacia la recuperación. En conclusión, aunque Bitcoin y Ethereum cerraron septiembre con precios a la baja, las señales actuales sugieren que las criptomonedas podrían estar comenzando octubre con un respiro positivo. La combinación de una ligera recuperación en los precios, el restablecimiento del interés abierto y la estabilidad en los flujos de intercambio ofrecen esperanza a los inversores. Sin embargo, el mercado de criptomonedas es notoriamente volátil, y será importante seguir de cerca las tendencias y las noticias que podrían impactar en el clima general del mercado.
Las oportunidades están ahí, pero como siempre en el mundo de las criptomonedas, es vital realizar un análisis exhaustivo antes de tomar decisiones de inversión.